La colaboración formalizada en 2020 entre el Congreso Mundial Menonita (CMM) y el Seminario Bíblico Menonita Anabautista (AMBS, por sus siglas en inglés) de Elkhart, Indiana, EE.UU., está abriendo las puertas para que personas de todo el mundo reciban educación pastoral y de liderazgo anabautista.
A través de programas existentes y de nuevas iniciativas, personas del pastorado y liderazgo eclesial están tomando cursos de estudios bíblicos y teológicos, ministerio e historia eclesiástica en sus países de origen, tanto acreditados como no.
César García, Ph.D., secretario general del CMM, describió la colaboración como una respuesta al llamado en 2003 a “compartir dones” entre las iglesias miembros del CMM. El AMBS pertenece a la Iglesia Menonita de Canadá and Iglesia Menonita de EE. UU. , dos de las 108 iglesias miembros del CMM.
A través del vínculo del AMBS con el CMM, el Seminario ha recibido cada vez más invitaciones de personas en el liderazgo de iglesias nacionales para apoyar la formación de líderes anabautistas en sus contextos particulares. Esto ha llevado a un mayor intercambio de dones, dado que, a su vez, las iglesias miembros del CMM y otras organizaciones anabautistas se han unido al AMBS. La campaña del Seminario, Formar Líderes Juntos también ha ayudado a financiar estas iniciativas conjuntas.
Por ejemplo, en octubre de 2023, Andi Santoso (M.A. 2022), director regional para Asia y Medio Oriente de la Red Menonita de Misiones (MMN, por sus siglas en inglés); Joe Sawatzky, Ph.D. (M.Div. 2005), especialista del Proyecto de Colaboración de Liderazgo Mundial del AMBS, y también de la MMN; y David Boshart, Ph.D., presidente del AMBS, fueron invitados a impartir un curso de tres días sobre liderazgo para unos treinta estudiantes de cinco convenciones anabautistas de la India. Cada convención envió a dos mujeres, dos hombres y al menos una persona joven para que se capacitaran y en el futuro enseñaran el material en su región.
“Previamente evaluamos el material con los líderes y luego lo revisamos en función de su pertinencia contextual, proporcionando unidades en el plan de estudios para que los capacitadores incluyeran material de casos de su contexto local”, dijo Boshart. “Dicho material ahora pertenece a estas iglesias para que lo utilicen y adapten de la forma que les resulte más útil en sus entornos.”
La coparticipación formalizada en 2019 entre el AMBS y el Seminario Meserete Kristos (MKS, por sus siglas en inglés, Seminario Menonita Etíope) de Bishoftu/Debre Zeit, Etiopía, también se ha fortalecido a través de la relación del AMBS con el CMM. Líderes del MKS y del AMBS crearon conjuntamente una versión personalizada de la Maestría en Artes: Teología y Anabautismo Mundial a fin de formar líderes para la Iglesia Meserete Kristos. Los estudiantes realizan una combinación de cursos virtuales semestrales y cursos presenciales intensivos de corta duración, adaptados al contexto etíope, e impartidos en el MKS por profesores del AMBS. El programa cuenta con 29 estudiantes; los primeros siete estudiantes se graduaron en 2023.
“Participar con las iglesias y líderes emergentes en su contexto particular fortalece a los miembros de nuestro profesorado, ya que así conocen y valoran más a la comunidad anabautista mundial, especialmente en el Sur global”, señaló Boshart.
—Annette Brill Bergstresser es directora de Comunicaciones del Seminario Bíblico Menonita Anabautista (AMBS, por sus siglas en inglés), una comunidad de aprendizaje ubicada en Elkhart, Indiana, EE.UU., en las tierras ancestrales de los pueblos potawatomi y miami. El AMBS ofrece educación teológica para estudiantes tanto en el propio predio como a distancia, y brinda una amplia variedad de programas de aprendizaje permanente, con el objetivo de formar a los seguidores de Jesucristo para ser líderes de la misión reconciliadora de Dios en el mundo. ambs.edu
Sobre la Comisión de Fe y Vida
Las iglesias anabautistas de todo el mundo viven su fe de manera diversa, abordando los desafíos y oportunidades locales en tanto que adhieren a las Convicciones compartidas.
La Comisión de Fe y Vida permite que las iglesias miembros del CMM reciban y brinden consejo sobre la fe y la práctica cristianas, así como sobre el testimonio anabautista en el mundo actual. Dicha Comisión alienta a las iglesias miembros del CMM a desarrollar relaciones de responsabilidad mutua con respecto a las convicciones que sostienen y en la vida que viven, a nivel local, internacional y transcultural.
“La Comisión de Fe y Vida es un punto neurálgico entre muchos, mediante el cual no ‘construimos koinonía’ sino que cuidamos, nutrimos y mantenemos la unidad que crea el Espíritu. Esperemos que, de alguna manera, no obstaculicemos sino más bien agilicemos las señales que el Espíritu vivificante envía a las distintas partes del cuerpo -o mosaico-, para mezclar metáforas”, expresa Thomas R. Yoder Neufeld, presidente de la Comisión de Fe y Vida.
¿Qué hace la Comisión de Fe y Vida?
Los miembros de Fe y Vida y algunos otros representantes del CMM han entablado un diálogo con la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (WCRC, por sus siglas en inglés). Tras años de planificación, este proceso se puso en marcha en marzo de 2023, en Canadá.
Los miembros del Diálogo han colaborado en la elaboración de una declaración para el culto ecuménico ‘Zúrich 2025’ en Zúrich, Suiza. La misma incluirá puntos tales como los recuerdos del pasado, el lamento por la división y la persecución, la gratitud por los pasos dados hacia la reconciliación, el deseo de vivir en unidad, el compromiso con el testimonio común y la participación en pos de la paz y la justicia.
Durante el año pasado, Fe y Vida ha estado compartiendo historias sobre la incorporación a la tradición anabautista mundial y cuáles son los desafíos para la unidad en nuestras regiones tan diversas. Estas historias fomentan iniciativas para apoyar a las iglesias miembros a vivir la unidad en un mundo cada vez más polarizado.
En 2023, las Redes Anabautistas Mundiales de Educación (GAEN) iniciaron una relación con la Comisión de Fe y Vida, y dos de sus miembros pasaron a formar parte de la Comisión, a la espera de la aprobación del Concilio General en 2025.
“Las redes de educación son claves para transmitir los recursos de la Comisión de Fe y Vida a las escuelas miembros de GAEN, y para apoyar su objetivo de fortalecer la iglesia a través de la formación en la fe centrada en Cristo”, comenta Anicka Fast.
Planes para el próximo año
Con miras a la conmemoración de los quinientos años del anabautismo en 2025, Fe y Vida tiene previsto algunos talleres para las reuniones del Concilio General en Alemania, en mayo de 2025. El material de los talleres estará disponible para todas las iglesias después de las reuniones.
El enfoque principal de los talleres será el bautismo, tanto porque es el quincentenario del primer “bautismo de creyentes” en Zúrich, como porque Fe y Vida ha participado activamente en ayudar a las iglesias miembros del CMM a examinar el material que ha surgido del Diálogo Trilateral sobre el bautismo.
“Lo más importante es que quisiéramos animar a nuestras iglesias a considerarlo como una oportunidad para fortalecer y profundizar nuestra comprensión y práctica del bautismo, especialmente su relación con el fundamento de nuestro discipulado”, afirma Thomas R. Yoder Neufeld.
Además del bautismo, dos temas cada vez más urgentes serán competencia de la Comisión:
La unidad en la diversidad: Continuar trabajando para ayudar a nuestra comunión de iglesias a abordar los verdaderos desafíos de estar unidos en el contexto de una gran diversidad.
El cuidado de la creación: Frente a la presión apremiante que trae consigo la crisis climática, Fe y Vida considera la urgencia de ir más allá de las relaciones humanas. Los modos de vida sostenibles son una cuestión de fe y de vida.
“Procuramos la manera de ayudar a nuestra familia eclesial a comprometerse con la creación, según el mandato de Dios en Génesis 2:15, para que las personas la trabajen y la cuiden. Este año publicaremos un breve documento sobre este tema”, dice Anicka Fast.
“También hemos escuchado a los miembros de la Comisión enfatizar la importancia de producir recursos teológicos para la iglesia mundial que respondan a las necesidades sentidas, especialmente en el Sur global. En este marco, hay algunos debates apasionados sobre cómo vincular dichos recursos teológicos con los jóvenes y jóvenes adultos de hoy. Esperamos trabajar en ello en colaboración con GAEN y el Grupo de Trabajo de Cuidado de la Creación”, expresa Anicka Fast.
“En definitiva, ayudamos a las iglesias a ser fieles en el discipulado y a aprender a vivir con la diversidad. Dado que la iglesia es el proyecto de Dios de construcción de la paz, todo lo que hagamos para ayudar a la iglesia a ser más fiel es de hecho construir la paz. De tal manera, Fe y Vida lleva a la practica el lema del CMM: Seguir a Jesús, vivir la unidad, construir la paz”, afirma Thomas R. Yoder Neufeld.
“No vivan ya según los criterios del tiempo presente; al contrario, cambien su manera de pensar para que así cambie su manera de vivir y lleguen a conocer la voluntad de Dios, es decir, lo que es bueno, lo que le es grato, lo que es perfecto.” Romanos 12:2 (DHH)
Renovación es el nombre que el Congreso Mundial Menonita le ha dado a una década de eventos regionales en torno a la memoria de los cinco siglos de nuestra existencia como comunidad de fe.
Nos aproximamos a estos diez años de conmemoraciones centrándonos en nuestra historia desde una perspectiva mundial, ecuménica y transcultural.
Estas palabras del apóstol Pablo nos ayudan a recordar el pasado y mirar hacia el futuro.
Expresamos gratitud a Dios por la herencia de fe que hemos recibido.
Pero también venimos ante el Señor con un espíritu de arrepentimiento y renovación, comprometidos a aprender del pasado y llegar a conocer más a Dios tanto aquí y ahora como en los años venideros.
Transformación
Consideramos cómo nuestra tradición anabautista ha entendido el discipulado como un proceso continuo de transformación.
En primer lugar: la transformación es un camino en el que renunciamos a ciertas cosas y asumimos cosas nuevas.
Implica movimiento continuo. Abandonamos lugares constantemente y avanzamos. Actuamos en contra del espíritu religioso que sostiene la certeza absoluta de las doctrinas, los dogmas y la ética; afirmamos la necesidad de renovar nuestra mente, y por lo tanto, estamos dispuestos a desafiar las creencias y la ética como lo hicieron nuestros antepasados espirituales en el siglo XVI.
En segundo lugar: la transformación en la Biblia nunca es una experiencia individualista.
Siempre es comunitaria. La hacemos juntos porque requiere diálogo e interdependencia.
La diversidad de posturas de nuestra comunidad nos permite corregir el rumbo en el proceso de transformación.
Centrados en Jesús
Nuestros hermanos y hermanas nos ayudan a descubrir aquellas cosas que necesitamos cambiar, renunciar o incorporar para llegar a ser como Jesús.
Y ello nos lleva al tercer comentario bíblico o componente de transformación: la persona de Jesús.
No cualquier cambio es válido. Como seguidores de Jesús, no podemos apoyar la transformación en cualquier dirección.
Para ser discípulos fieles, los cambios en nuestras creencias y ética deben hacerse para que lleguemos a ser semejantes al carácter y a la persona de Jesús.
Como señala Pablo, “hasta que todos lleguemos a estar unidos por la fe y el conocimiento del Hijo de Dios, y alcancemos la edad adulta, que corresponde a la plena madurez de Cristo”. (Efesios 4:13)
La transformación en unidad es un desafío que enfrentamos históricamente en el mundo anabautista.
Muy a menudo los movimientos de renovación han enfrentado el rechazo que producen las divisiones.
La transformación no siempre se ha dado en torno al carácter de Jesús.
Por eso hoy necesitamos recuperar la visión del Congreso Mundial Menonita: Quisiéramos ser una iglesia mundial en la que seguimos a Jesús, vivimos la unidad y construimos la paz.
Somos un cuerpo de más de diez mil congregaciones locales distribuidas en *110 iglesias nacionales que se encuentran repartidas por todo el mundo, con más de 1,5 millones de creyentes bautizados.
Nos necesitamos mutuamente para ser transformados a la imagen de Jesús.
Mientras damos gracias a Dios por las oportunidades de ser transformados, mantengamos también una actitud de arrepentimiento por nuestras divisiones.
Pidamos perdón por nuestra renuencia a cambiar.
Arrepintámonos de nuestro orgullo y de la actitud de juzgar el proceso de transformación de los demás, en lugar de participar en él con amor y paciencia.
Procuremos la renovación desde un corazón contrito que reconoce la necesidad de transformación continua.
Que juntos podamos ser transformados a la imagen de Jesús.
—César García, secretario general del Congreso Mundial Menonita, es oriundo de Colombia y reside en Kitchener, Ontario, Canadá.
*Número de iglesias miembros del CMM tras las reuniones del Comité Ejecutivo en Brasil, abril de 2024.
Países Bajos
Vivimos en una sociedad –en Europa Occidental– que ya no habla nuestro idioma. Hemos sido la cultura dominante durante siglos y siglos… ya sea católica romana, protestante o menonita. El lenguaje cristiano, la imaginería cristiana, las normas y los valores cristianos eran absolutamente dominantes en la cultura holandesa. Y en una generación, todo ello desapareció.
Por supuesto, antes tuvimos la secularización. Ha estado sucediendo durante algunas décadas. Y la aceptamos.
Nuestras iglesias siempre han sido pequeñas, nuestras congregaciones también. Eso nos gusta. Nos gusta el hecho de conocernos.
Pero, al parecer, hubo un punto de inflexión al que llegamos sin darnos cuenta. Algunos de nosotros ni siquiera lo reconocemos aún.
No se trata sólo de la secularización. Se trata de que desaparece una cultura entera con todas sus referencias, en un abrir y cerrar de ojos.
Pero esa es la cuestión: la gente que nos rodea ya no nos entiende ni entiende nuestra historia. Es como Pentecostés al revés. Hablamos y contamos nuestra historia, utilizando el mismo idioma que la gente que nos rodea. Pero nadie entiende lo que decimos. Las palabras que empleamos no tienen sentido, o incluso tienen otro significado para nuestros oyentes.
Nos despertamos en una realidad extraña, muy extraña. Incomprensible.
Esto es diferente a la decadencia. Este es un mundo nuevo.
Y me gusta.
Estamos más allá de intentar salvar lo que fue. Estamos más allá de intentar cambiar la marea. Estamos a punto de reinventarnos, nuestras iglesias, nuestra manera de contar historias. Estamos en el camino del descubrimiento.
No hay otra opción. Ni siquiera nuestro dinero podrá salvarnos ahora. Eso da mucho, mucho miedo.
Y me gusta.
Exiliados en nuestra propia tierra
Esto lo reduce todo a su mínima expresión. Incluso el Evangelio. Es necesario leerlo, estudiarlo, reencontrarlo. ¿Qué vale la pena? ¿Qué es verdad? ¿Qué es la tradición? ¿Qué historia? ¿Cuáles son las respuestas antiguas a preguntas aún más antiguas? ¿Y qué nos sigue hablando ahora, a nuestro corazón, a nuestra alma? Debemos escudriñarnos, escudriñar nuestros motivos, nuestras confesiones. No hay una salida fácil.
Y esa es la cuestión. Por ahora nuestro crecimiento debe medirse espiritualmente. No en números, sino en gentil sabiduría. En humanidad. En comunidad.
Es necesario que profundicemos. Debemos asimilar el hecho de que ya no nos sentimos como en casa en esta tierra, en este mundo, en este idioma, y lamentar esa pérdida.
Y la Biblia nos dirá cómo.
Ya lo hemos hecho antes. Una época, un lugar y una situación diferentes; el mismo problema. Estamos exiliados en nuestra propia tierra y continente: «Ríos de Babilonia», aunque seamos los únicos que quedamos que entendemos esta referencia (y no nos referimos a la canción de Boney M).
Y entonces encontramos nuevos caminos.
No le hablamos a la gente de nuestra fe. La vivimos.
Un mundo diferente
Muchos de nuestros jóvenes han conocido a la iglesia a través de AKC, nuestros campamentos de verano. En dichos campamentos no se pronuncia ni una palabra sobre el Evangelio. Pero en los campamentos creamos un mundo que es totalmente diferente de lo que estos niños y jóvenes adultos conocen en casa o en la escuela. Un espacio de sanación, sin presiones ni juicios. Un espacio donde aprenden que los caminos del mundo que nos rodea quizá no sean la respuesta definitiva.
No presionamos, no sermoneamos. Nos divertimos, sostenemos el espacio… y esperamos.
En un momento dado, sienten curiosidad. Empiezan a hacer preguntas: ¿Qué es tan diferente aquí? ¿Y cuál es la razón?
En la casa de la hermandad (broederschapshuis) donde trabajo, llega y se queda todo tipo de gente. No compartimos nuestra fe salvo que nos lo pidan. Pero les pedimos a todos que se reúnan, que trabajen juntos, que formen parte de nuestra comunidad mientras permanecen allí.
Al lavar los platos juntos, nos encontramos con Dios, o al menos con preguntas sobre Dios. En cada pregunta procuramos encontrar algo que podamos aprender.
Ya no tenemos respuestas. Pero las preguntas de la gente que no sabe nada de Dios ni de la fe nos muestran el camino.
Me conmueve cuando una persona joven voluntaria de nuestra broederschapshuis visita nuestra iglesia por primera vez, encuentra el valor para ponerse de pie y dar su testimonio: “Aquí descubrí algo. Aún no tengo palabras para describirlo, pero ahora vive en mi corazón”.
En nuestra situación, eso es un testimonio de fe. Porque es verdad: no tenemos palabras. Sin embargo…
Nuestro crecimiento no se centrará en los números, sino en ser humanos-con-Dios. Nuestra misión es nuestra propia búsqueda del Camino. Y al hacerlo, procuramos vivirlo plenamente.
La gente se da cuenta. La gente hace preguntas. Procuramos responderlas y fracasamos. Y eso es lo hermoso. Es lo que fomenta la conversación, impulsa el proceso de aprendizaje.
Creceremos desde el desconocimiento. Y dubitativamente, nos sentiremos bien con eso.
Demos gracias a Dios.
—Wieteke van der Molen, pastora y directora espiritual de la Iglesia Menonita Holandesa (Algemene Doopsgezinde Sociëteit); y codirectora de Dopersduin, una casa de la hermandad menonita y centro de retiros en Schoorl, Países Bajos.
¿Por qué la Iglesia Meserete Kristos es la iglesia menonita de más rápido crecimiento?
Etiopía es una nación multiétnica, multirreligiosa y multilingüe con más de 120 millones de habitantes, el segundo país más poblado de África. Situado en el noreste de África, Etiopía es un país sin salida al mar.
Las potencias europeas no colonizaron Etiopía. Sin embargo, los conflictos internos desgarraron el país y lo dividieron según criterios étnicos, religiosos y geográficos. Las guerras civiles arruinaron la economía del país. Los conflictos étnicos y religiosos dañaron los lazos sociales entre los diversos grupos de población y aumentaron el miedo. La intolerancia y la venganza forman parte de la vida del pueblo. Para algunas personas, la pobreza, la guerra y la familia son los símbolos de Etiopía.
Sin embargo, quienes perdieron la esperanza encuentran sentido y dirección a su vida cuando acuden al Creador del Cielo y de la Tierra. Cuando la gente cree en Jesucristo no sólo recibe la esperanza de vida eterna, sino también un nuevo punto de vista desde el cual observar sus difíciles circunstancias a fin de idear mejores mecanismos para afrontarlas.
Nuestra visión sobre el crecimiento de la iglesia
La Iglesia Meserete Kristos (MKC, por sus siglas en inglés) entiende el crecimiento de la iglesia de acuerdo a dos dimensiones.
En primer lugar, el crecimiento de la iglesia es el aumento numérico de sus miembros. Se espera que las congregaciones sumen nuevos creyentes todos los años, tal como se practicaba en la iglesia primitiva (Hechos 2:47).
El segundo aspecto es que el crecimiento de la iglesia se manifiesta en la madurez de la vida espiritual de los creyentes. Los creyentes que manifiestan el fruto del Espíritu en su vida y siguen los pasos de Cristo ejercen una influencia positiva en la sociedad. Cuando las personas comparten el evangelio con los demás a través de sus prácticas de vida, aumenta la posibilidad de que la gente responda positivamente al mensaje.
El crecimiento espiritual de los individuos creyentes y el crecimiento de la iglesia están vinculados.
Estrategias para el crecimiento de la iglesia
En las siguientes páginas, describiremos las diez estrategias/principios que ayudaron a la MKC a crecer rápidamente en la era poscomunista (1991-2024).
1. Oraciones fervientes
La MKC ha utilizado la oración como arma espiritual para vencer el poder del diablo y para liberar a las personas de la esclavitud de los pecados. En las oraciones, le hablamos a Dios y escuchamos cuando Dios nos habla.
En todas las congregaciones de la MKC, los equipos de oración oran por el ministerio de la iglesia, según los temas que se les asignan. Los equipos oran para que la iglesia venza el poder del mal que impide que la gente escuche y crea en el evangelio de Jesucristo.
Hay reuniones de oración que duran toda la noche en las que participan todos los miembros de la iglesia local. Las personas a tiempo completo del pastorado le dedican mucho tiempo a la oración. Las personas en el liderazgo de la iglesia oran antes de las reuniones de trabajo. Los creyentes oran creyendo que Dios les escucha y responde a sus oraciones según su voluntad.
En la sede central de la MKC, un equipo nacional de oración se reúne todos los meses durante un día para pedir a Dios que ayude a la iglesia a acercarse a los pueblos que no han sido convertidos por las buenas nuevas de Jesucristo.
Muchas congregaciones oran por la salvación de las personas a través del evangelio de Jesucristo utilizando diferentes enfoques.
Algunas congregaciones locales oran durante los servicios dominicales por los grupos étnicos que aún no han sido convertidos. Por ejemplo, la MKC Tabour, de la ciudad de Hawassa, en el sur de Etiopía, preparó carteles de varios grupos étnicos, y cada semana el cartel de uno de los grupos étnicos se coloca en la parte delantera del escenario de la iglesia. Toda la congregación ora por ese grupo étnico durante cinco a diez minutos.
2. Llamar a gente nueva a creer en Jesus
“Querido/a predicador/a, cuando termine su sermón, no olvide invitar a personas nuevas a aceptar al Señor.”
En cada congregación local de la MKC, después del sermón del culto dominical, el predicador o predicadora llama a personas nuevas a aceptar a Cristo como su Salvador y Señor. La MKC cree que el Espíritu Santo mueve el corazón de la gente y la convence de sus pecados para que se arrepienta y crea en Jesús. Por lo tanto, los predicadores y predicadoras son recipientes para que obre el Espíritu Santo.
Cada domingo muchas personas nuevas desean creer en Jesús. La congregación lleva a estos nuevos creyentes a la sala de oración para orar por ellas. Los evangelizadores anotan su dirección y su número de teléfono para poder hacer un seguimiento. Luego, se unen a la clase de nuevos creyentes para aprender las doctrinas cristianas básicas. Una vez bautizados, el departamento de evangelización los pasan al departamento pastoral para que se les brinde atención pastoral adecuada.
Cabe señalar que llamar a la gente desde el púlpito sin tener gente nueva (no creyentes) en la iglesia no tiene sentido. Las congregaciones les recuerdan a sus miembros que inviten y lleven al culto dominical a sus amistades, familiares o colegas.
El pastor Deneke Hussein, secretario general de la región de la MKC del sur de Etiopía, hace referencia a un encuentro reciente. Después del culto dominical, salió y vio a una mujer triste. Sintió la guía del Espíritu Santo para hablar con ella. La saludó y le preguntó: “Pareces estar triste, ¿qué ha pasado?” La mujer respondió: “Estaba desesperada con la vida y vine a la iglesia para escuchar la Palabra de Dios. Escuché el mensaje y me sentí animada. Sin embargo, nadie me habló.”
El pastor Deneke se dio cuenta de que el predicador no invitaba a la gente a pasar al frente para aceptar a Cristo como su Salvador y Señor personal. La llevó a la sala de oración y le pidió formalmente que aceptara a Cristo. La mujer aceptó a Cristo, se oró por ella y se la puso en contacto con la persona evangelizadora de la congregación para que le diera seguimiento.
Un pastor del oeste de Etiopía expresa: “Después de que una persona haya predicado el evangelio en un lugar donde se ha reunido mucha gente, no llamar a las personas que quieren creer en el Señor Jesús es como plantar una semilla y negarse a recoger el fruto después de que haya madurado.”
3. Seguir con números pequeños y en crecimiento
La política de la MKC establece que una congregación con más de mil miembros debe dividirse en dos congregaciones pequeñas. Desde un punto de vista práctico, las iglesias pequeñas (con menos de mil miembros) pueden brindar servicios eficaces a su membresía. Además, los miembros de la iglesia se conocen y pueden confraternizar de manera significativa.
Una iglesia madre nutre a la nueva iglesia filial para que se convierta en una congregación de pleno derecho. Luego, tanto la iglesia madre como la iglesia filial siguen creciendo para fundar otras congregaciones nuevas.
El pastor Sebrela Kedir, director del departamento pastoral de la MKC, afirma que cuando las congregaciones tienen una membresía numerosa no pueden prestar servicios pastorales adecuados a los miembros ni movilizarlos a todos hacia un objetivo común. “Una persona en el pastorado puede alimentar y proteger bien al rebaño cuando el número es razonable. Si la membresía de la iglesia es grande, algunos miembros se extravían.”
«Al mantener un número razonable, la MKC crece en calidad y cantidad. Los discípulos de Cristo comparten fielmente el evangelio con los demás”, comenta Sebrela Kedir.
4. La responsabilidad de compartir el evangelio
Quien haya experimentado la bondad de Jesús debe contarle a los demás lo que ha experimentado.
La MKC establece claramente que la iglesia existe para predicar el evangelio de Jesucristo a todas las personas y hacerlas discípulos de Cristo. Los Estatutos de la MKC mencionan la participación de los miembros de la iglesia en el ministerio holístico de la iglesia, sirviendo a la iglesia con los dones espirituales que les fueron dados, oraciones, asesoramiento/ consultoría profesional, trabajo, sabiduría y contribuciones financieras.
Antes de convertirse en miembros de la iglesia mediante el bautismo en agua, a los nuevos creyentes se les imparten enseñanzas sobre lo que la iglesia espera de ellos una vez que se conviertan en miembros de pleno derecho.
Uno de los temas tratados es el concepto de acercar a otras personas a fin de que crean en Cristo. Se espera que los creyentes nuevos acerquen a otros a Cristo así como alguien los acercó a ellos a Cristo. La iglesia les anima a compartir con otras personas la bondad de Jesús que han experimentado en su vida. Contarles a otras personas lo que Jesús ha hecho por ellos no requiere tener formación teológica.
5. Implementar un plan estratégico que tenga relevancia contextual
En toda la MKC se habla actualmente el mismo idioma: la Agenda 2819 es nuestra prioridad.
En el plan estratégico que la MKC preparó e implementó en 2022, la iglesia estableció la hoja de ruta para sostener el crecimiento de la iglesia. La misión de la iglesia fue revisada para definir a la MKC como una iglesia misional/evangelizadora. Afirma: “La MKC existe para predicar el evangelio a todas las personas y hacerlas discípulos de Jesucristo.”
Para inculcar esto en el corazón de los miembros de la iglesia, ésta preparó presentaciones sobre Mateo 28:19 ‚Äì Agenda 2819, y se llevaron a cabo sesiones de concientización en todas las regiones de la MKC. Esto impulsó a los líderes y miembros de la iglesia a enfocarse en predicar el evangelio y acercar a la gente a fin de creer en Jesucristo. El presidente de la MKC dedicó mucho tiempo a transmitir este mensaje a todas las congregaciones de la MKC para lograr los objetivos. El plan estratégico también estableció indicadores específicos para seguir el progreso de la iglesia en pos de la consecución del 10% de crecimiento anual de miembros.
El plan estratégico ha hecho que la iglesia movilice recursos para alcanzar los objetivos fijados. Sobre todo, los líderes de la iglesia se dieron cuenta de que existen para predicar el evangelio y hacer discípulos de Cristo a quienes crean.
El pastor Dessu Abebe, secretario general de la MKC de la región de Nekemte, afirmó que la dirección establecida por el plan estratégico es muy pertinente. Leyó el plan estratégico repetidas veces para poder interiorizarlo porque si no se implementa, la región fracasará.
“Convoqué a las principales personas del pastorado y al presidente del consejo de ancianos de todas las iglesias locales de mi región, para tres días de capacitación sobre el plan estratégico. Hice todo lo posible para ayudarles a entenderlo.” Subrayó que la capacitación por sí sola no bastaba para entenderlo del todo.
Cuando él se reúne con las principales personas del pastorado en sesiones de evaluación trimestrales, repasa el plan estratégico y los escucha para comprender sus desafíos, preocupaciones y éxitos. El pastor Dessu admitió que el plan estratégico es duro y exige mucho trabajo. Dos de los principales pastores de su región renunciaron porque reconocieron que no tenían la capacidad necesaria para implementar el plan estratégico.
La MKC de la región de Nekemte pudo identificar distritos en los que no había congregaciones de la MKC. “Fundamos iglesias en tres de dichos distritos. No pensábamos así antes.
El plan estratégico nos guió hacia dónde debíamos enfocarnos.” “El plan estratégico nos ayudó a ver el panorama más amplio hacia dónde se dirige la MKC y nuestro rol específico como iglesia local”, dijo Shambel Genene, pastor principal de la MKC de Asella. La iglesia estaba comprometida con la evangelización musulmana, incluso antes de que se introdujera el plan estratégico. Ahora, “ajustamos nuestras actividades evangelizadoras al plan estratégico de la iglesia para aportar nuestra parte a la consecución de los objetivos comunes”.
6. Ordenación de evangelizadores en las congregaciones
Cada iglesia local de la MKC debe tener por lo menos una persona evangelizadora dedicada a predicar la Palabra de Dios y a guiar a las personas a la fe en Jesucristo.
ace dos décadas, los evangelizadores realizaban la labor de pastorado. La MKC revisó las pautas del ministerio para liberar a la persona evangelizadora de la labor pastoral y así enfocarse en la evangelización.
Una persona evangelizadora en una congregación comparte las buenas nuevas de Jesucristo con la gente a fin de ser un modelo. También es responsable de motivar y preparar a los miembros de la iglesia para que participen activamente en la evangelización y el establecimiento de nuevas iglesias. Informa trimestralmente de sus logros en el ministerio de evangelización al pastor principal y al consejo de ancianos.
Ayalew Balcha se graduó del Seminario Meserete Kristos y es evangelizador ordenado de la MKC de Akaki. Afirma que las congregaciones necesitan evangelizadores que proclamen el evangelio a las personas no creyentes. √âl coordina el ministerio evangelizador de la iglesia local y moviliza a la congregación para la evangelización.
Tiene un equipo de evangelización ‚Äìun grupo de acción‚Äì que sale todos los meses a las calles y va de pueblo en pueblo, compartiendo las buenas nuevas de Jesucristo con todo aquel con quien se encuentre.
El año pasado, diecinueve nuevos creyentes que se acercaron a la fe de esta manera fueron bautizados y se convirtieron en miembros de la iglesia. “Estamos orando y trabajando duro para ganar más almas para Cristo este año”, dijo.
7. Movilizar los recursos localmente
“Nuestros recursos son las personas que tenemos en la iglesia.”
La mayoría de los miembros de la MKC no son ricas. Hay varias congregaciones en zonas rurales que se dedican a la agricultura de subsistencia. Debido al cambio climático, los conflictos, el estilo de agricultura tradicional, el acceso inadecuado a semillas mejoradas y fertilizantes y otros factores, no pueden mejorar sus ingresos.
La mayoría son agricultores muy trabajadores que contribuyen a la iglesia mediante diezmos, ofrendas, donaciones especiales y regalos de amor. Son pobres pero lo bastante generosos como para apoyar el ministerio de la iglesia.
Empleados y empresarios que tienen ingresos regulares pagan sus diezmos mensualmente.
Las iglesias locales también recogen ofrendas para la evangelización y para la misión de la iglesia. En algunas congregaciones, los grupos de estudio bíblico organizados por la iglesia contribuyen con dinero a los fondos para la misión de la MKC.
Birru Robele, uno de los líderes prominentes de la MKC, recauda las contribuciones mensuales de los integrantes de su grupo de estudio bíblico y las entrega a la congregación de Misrak Addis Abeba. Mantiene a más de 130 fundadores de iglesias en distintas partes del país con un salario mensual de unos USD 50.
Algunas personas no pueden continuar con sus trabajos después de creer en Jesucristo porque dichos trabajos son incompatibles con las enseñanzas de la Biblia. Entre estas personas hay mujeres que se dedican a la prostitución, y a la producción y venta de bebidas alcohólicas locales. Rehabilitarse y cambiar los medios para generar ingresos requiere dinero.
Bekele Bajira, pastor principal de la MKC de Bordi Nekemte, dijo que tres trabajadoras sexuales profesionales se acercaron al Señor gracias a la campaña de evangelización. Completaron la enseñanza cristiana básica y se bautizaron. Más tarde, las mujeres le contaron que no tenían comida porque habían dejado de trabajar. Cuando el pastor Bekele compartió sus historias con la congregación, los miembros aportaron dinero suficiente para ayudarlas a poner en marcha otros pequeños negocios.
“Si presentamos realmente las necesidades que hay que atender para hacer avanzar la causa del evangelio, los creyentes están dispuestos a dar lo que tienen”, señala el Pastor Bekele.
8. Utilizar el idioma de la gente
La política de la MKC establece que el evangelio debe predicarse y enseñarse en el idioma de la gente. Dado que el propósito de la iglesia es ayudar a la gente a escuchar el evangelio, creer en Cristo y convertirse en sus discípulos, se predica y enseña la palabra de Dios en el idioma que prefiere la gente. La gente suele abrir su corazón cuando escucha el evangelio en su propio idioma.
En una sociedad en la que la cuestión del idioma es delicada, permitir que la gente aprenda el evangelio en su idioma les ayuda a no asociar los ministerios de la iglesia con la política.
La MKC prepara y pone a disposición materiales de evangelización y de discipulado en varios idiomas. Animamos a los creyentes que sienten el llamado al ministerio a ser multilingües. Conocer varios idiomas abre la puerta al ministerio y al establecimiento de iglesias en diversas culturas.
El pastor Firew Lemma, del departamento de educación y capacitación de la sede central de la MKC, viajó recientemente a Tigray, en el norte de Etiopía, para enseñar a líderes de la iglesia. Habiendo aprendido el idioma de su familia, saludó a los participantes en el idioma tigriña y observó que sus rostros expresaban amabilidad y hospitalidad. Les sorprendió que hablara su idioma.
Hablar el idioma de las personas a las cuales servimos es esencial para comunicar el evangelio con claridad y entablar buenas relaciones, afirmó el pastor Firew.
9. Ubicar a fundadores de iglesias en comunidades sin iglesia
“Labrar la tierra con los bueyes de esa zona.”
La MKC recluta, capacita y ubica a fundadores de iglesias en contextos de su propia cultura. Dado que reconocen la cultura y ya han establecido vínculos, pueden compartir fácilmente el evangelio de Jesucristo con la gente.
La MKC designa a fundadores de iglesias en varios contextos, donde las creencias ortodoxas, musulmanas y tradicionales están muy arraigadas. Wendimu W/ Mariam, coordinador de misiones de la sede central de la MKC, afirma que los fundadores de iglesias en contextos donde predominan las creencias y prácticas tradicionales establecen más iglesias que las personas en otros contextos. En las comunidades que practican creencias tradicionales, si un líder destacado se acerca a Cristo, muchas de las personas de la comunidad le siguen y creen en Cristo.
En dicho contexto, “nuestros fundadores de iglesias oran y trabajan para acercar a Cristo a las personas guardianas de la comunidad. Una vez que se acercan a Jesús, acercar a otras personas a Cristo es fácil”, dijo Wendimu.
10. Seguir la guía del Espíritu Santo
La MKC enseña sobre el Espíritu Santo y que los creyentes deben ser empoderados para vivir una vida cristiana victoriosa y dar testimonio de Cristo. La iglesia anima a los creyentes a escuchar la guía del Espíritu Santo para discernir la voluntad de Dios en su vida. Las personas a tiempo completo del pastorado y los líderes de la iglesia oran para que los creyentes sean empoderados por el Espíritu Santo.
En el campo misionero, los fundadores de iglesias dependen de la guía del Espíritu Santo, lo cual marca la diferencia en sus esfuerzos.
Los fundadores de iglesias que oran por los enfermos y comparten la Palabra de Dios conforme a la guía del Espíritu, acercan más personas a Cristo que quienes no practican estas cosas. Cuando el evangelio se predica/comparte con poder (demostrado por la sanación de los enfermos, la recuperación de la salud mental, la liberación del miedo a los espíritus malignos y sentir la presencia de Dios), la gente tiende a creer en el evangelio.
Esto difiere de algunos hacedores de milagros de la TV. MKC no organiza congresos de sanación sino eventos para predicar la palabra de Dios. Allí, el Espíritu Santo realiza cosas según la voluntad de Dios.
Los fundadores de iglesias no se centran en los milagros, sino en ayudar a la gente a entender el evangelio. Los milagros ocurren cuando oran por las necesidades de la gente. Dios confirma el poder del evangelio liberando a las personas de cualquier atadura que les impida experimentar lo que Dios planea para su vida.
En conclusión, Dios atrae a la gente al Reino de Dios en medio de una intensa agitación política, social y económica en la Nación.
El crecimiento de la Iglesia Meserete Kristos es un buen indicio de que las condiciones terrenales no impiden la expansión del Reino de Dios. La magnitud y profundidad del problema en nuestro contexto podrían haber destruido la iglesia. Las fuerzas del mal que intentan crear obstáculos al evangelio en la tierra no lo han conseguido. El Dios sabio utilizó los múltiples sufrimientos para conducir multitudes a su Reino.
Dios realiza su obra. Nosotros, los hijos e hijas de Dios, debemos acercar el evangelio a la gente. Podemos participar en la Gran Comisión de Jesucristo aportando nuestro dinero, trabajo, conocimientos, tiempo, talentos y lo que tengamos como prioridad número uno. La razón principal del crecimiento de MKC es que hemos hecho de la Gran Comisión nuestra máxima prioridad y damos lo que tenemos por la causa.
Notas a pie de página
1. Estatutos de la MKC Parte II, Artículo 11(2), 2022
2. Estatutos de la MKC Parte II, Artículo 10(1), 2022, página 8.
3. Plan Estratégico de la MKC 2022-2026.
“100 años de evangelización en el Congo”. Del 4 al 11 de agosto, la Communauté des Églises des Frères Mennonites au Congo (Comunidad de Iglesias de los Hermanos Menonitas del Congo, CEFMC por sus siglas en francés) celebró el centenario de su iglesia nacional. La celebración en Kikwit -retrasada dos años debido a la pandemia- incluyó predicaciones, cantos, actuaciones de coros, una conferencia de personas en el pastorado y una reunión de evangelización e invitados ecuménicos e internacionales.
La iglesia miembro nacional del CMM comenzó en 1922, cuando el estadounidense Aaron Janzen inició una misión para los Hermanos Menonitas en la zona de Kikwit. En el 2024, la iglesia informa de 638 congregaciones con 98,519 personas miembro bautizadas.
Las principales lenguas de las personas miembro de la iglesia son el francés, el kikongo, el lingala y el swahili.
El Congreso Mundial Menonita vive la unidad a través de las relaciones. Ha habido algunos cambios en las caras que ayudan a desarrollar estas relaciones, a través de las personas representantes regionales y de las comunicaciones.
Coordinadora de representantes regionales
Janet Plenert ha asumido el cargo de coordinadora de representantes regionales a medio tiempo a partir de julio del 2024. Lideresa mundial experimentada, Janet Plenert formó parte del comité coordinador de la Fraternidad Mundial Misionera (GMF, por sus siglas en inglés) del CMM del 2003 al 2009, presidenta de la ‘GMF’ del 2006 al 2009, vicepresidenta del CMM del 2009 al 2015, y desde el 2020 forma parte de un equipo de personas consultoras voluntarias de desarrollo para el CMM.
Durante su tiempo de servicio con el Comité Central Menonita y con la Iglesia Menonita, ella ha vivido en la República Democrática del Congo, Brasil y Bolivia.
“Me alegra aprender a conocer a personas de distintas culturas y a encontrar formas de poner en contacto a personas que, de otro modo, no encontrarían un terreno común”, afirma Janet Plenert. “En el mundo dividido y desconfiado de hoy, servir a la iglesia mundial me da esperanza de que la iglesia se levantará y, será la presencia unificadora y pacificadora que Dios desea. Como anabautistas, necesitamos liderar el camino para vivir en unidad y construir la paz mientras seguimos a Jesús de manera individual y en unidad”.
Después de 12 años trabajando con el Congreso Mundial Menonita, Arli Klassen se ha jubilado. En julio del 2015, ella comenzó a proporcionar liderazgo a las personas representantes regionales del CMM como su coordinadora, lo que continuó hasta junio del 2024. También se desempeñó como directora de desarrollo del CMM desde octubre del 2012 hasta enero del 2020.
“Sólo cuando nos exponemos unos a otros como hermanos y hermanas anabautistas de alrededor del mundo podemos experimentar y crecer en nuestra propia comprensión y experiencia del amor de Dios”, dice Arli Klassen. “Eso es lo que deseo y espero para todas nuestras iglesias miembro de todo el mundo”.
“Sentimos mucho agradecimiento por el trabajo de Arli con el CMM a lo largo de los años. Ella ha sentado unas bases sólidas para el ministerio de nuestras personas representantes regionales. Ahora, Janet aportará su pericia y experiencia a la función. Creemos que las personas representantes regionales harán avanzar su servicio a la iglesia mundial”, dice César García, secretario general del CMM.
Equipo de Comunicaciones
Además, en julio del 2024 el CMM dio la bienvenida a Kristina Toews en su regreso a la función de jefa de comunicaciones, tras su permiso por maternidad. Elina Ciptadi, quien sirvió como jefa interina de comunicaciones, pasó a desempeñar temporalmente el cargo de coordinadora de proyectos, en el equipo de Comunicaciones. Ella está coordinando proyectos especiales para la reunión del Concilio General del 2025.
“Me alienta ver todo el trabajo continuo del equipo de comunicaciones del CMM para ayudarnos a vivir juntos la unidad. Estoy agradecida por el liderazgo que Elina ha proporcionado al equipo de comunicaciones este último año y porque sigue bendiciendo nuestro trabajo con su experiencia en la coordinación de proyectos”, dice Kristina Toews.
Las personas cristianas anabautistas de un vecindario de Nairobi de 137,000 habitantes, predominantemente musulmán, practican a diario ‘The Courage to Love’ (La Valentía de Amar). “Nuestra modesta congregación anabautista se enfrenta a dificultades de aceptación, evangelización y fusión cultural”, dice George Ochieng, director del ‘Eastleigh Fellowship Centre (EFC) Mennonite Church Choir’ (Coro de la Iglesia Menonita del Centro de la Fraternidad de Eastleigh, EFC por sus siglas en inglés). “Aun así, hemos sido llamados a exhibir valentía a través del amor en este ambiente”.
El coro del ‘EFC’ de una iglesia menonita de Nairobi es uno de los cinco conjuntos musicales seleccionados para representar la música en las iglesias anabautistas de alrededor del mundo en el evento del 500 aniversario en Zúrich 2025. “Nuestro coro espera ansiosamente aprovechar nuestros dones musicales para compartir el amor de Cristo a través de una mezcla de diversos elementos culturales”, dice él.
En la jornada del 29 de mayo del 2025, cada coro actuará dos veces: un concierto en el interior de la ‘Predigerkirche’ o la ‘Friedenskirche’ y otro al aire libre en la ‘Zwingli Platz’ (Plaza Zwingli), frente al ‘Grossmünster’, sin ninguna amplificación. Los coros también participarán en el culto final en la Catedral de Grossmünster, que se retransmitirá en directo.
El coro del ‘EFC’ llama a su estilo afrofusión “porque invoca varias culturas musicales procedentes de distintos países de África”, dice George Ochieng. Las propias personas que integran el coro representan diferentes culturas de todo Kenia. Viajan por toda Kenia para actuar en iglesias y festivales de música.
“Elevamos sinceras oraciones para que nuestro conjunto musical obtenga las visas necesarias para el 2025”, dice George Ochieng. Solo 7 de sus 36 integrantes recibieron visa para viajar a EE.UU. y actuar en la Asamblea del CMM en Pensilvania en el 2015. “El privilegio [de asistir a un evento del CMM] nos brinda la oportunidad de aprender mucho más sobre la comunidad de creyentes anabautistas”, dice George Ochieng.
Los cinco conjuntos musicales actuarán en una congregación local el domingo, 1 de junio del 2025. “La música trasciende las barreras, sirviendo como testamento del Reino de Dios y fomentando la unidad por encima de líneas raciales, lingüísticas y nacionales”, afirma George Ochieng. “Oramos por la paz en el mundo en un momento en que el mundo más lo necesita desde la Segunda Guerra Mundial.”
Otros conjuntos musicales:
América Latina:
Banda Ágape de Asunción, Paraguay. Estilos musicales variados que mezclan pop, rock, latino, funk y folk. Siete músicos y un técnico de sonido. Varios son personas miembro de la Iglesia Hermanos Menonitas Concordia y graduados del CEMTA (Centro Evangélico Menonita de Teología Asunción).
“El nombre de nuestra banda es el tipo de amor descrito en 1 Corintios 13. Muchas de nuestras canciones hablan de este amor de entrega de Dios. Muchas de nuestras canciones hablan de este amor de Dios que se entrega. Sabemos que el verdadero amor es para quienes tienen valentía. Sólo podemos sentirnos realizados cuando la relación con nuestro Dios define nuestros valores y nuestra identidad”, dice Carlos Arce Penner, líder de la banda.
A los 22 años, dirigió una banda que lideró el culto en la Cumbre Mundial de la Juventud del 2009 en Paraguay y tocó con diferentes delegaciones durante la Asamblea.
“Gran parte de nuestra música también se centra en temas importantes para el anabautismo, como la paz, la justicia, el discipulado y, el cuidado de la creación y de todas las personas”, dice el director Benjamin Bergey. “Una de las formas más fundamentales de ser agentes de paz en este mundo es amando. Sentimos mucho entusiasmo de conectarnos con este maravilloso y oportuno tema – y con los otros grupos musicales de todo el mundo.”
Benjamin Bergey fue el coordinador musical de la Asamblea 2022 del CMM en Indonesia. El coro de la ‘EMU’ (por sus siglas en inglés) cantó en la Asamblea del CMM de 1967 en Ámsterdam, Países Bajos.
Europa
‘Songs of Peace’ (Canciones de Paz)comenzó como un nuevo proyecto musical en el Bildungszentrum Bienenberg de Liestal, Suiza. En la actualidad, es una asociación independiente dirigida por el matrimonio de Dennis Thielmann y de Karin Franz junto con músicos de congregaciones menonitas locales.
“Valoramos los sonidos naturales y reducidos combinados con elementos electrónicos en nuestra música (la mayoría cantada en alemán)”, dice Dennis Thielmann. Entre las influencias musicales figuran la música del mundo, las tradiciones monásticas y la terapia del sonido. “También intentamos utilizar la forma musical y la puesta en escena para plasmar valores del reino de Dios como la sencillez, la gratitud, la autenticidad, la inclusión, la paciencia, la sostenibilidad y la conciencia global.”
Dennis Thielmann participó en el equipo de música de la Asamblea del CMM en Paraguay en el 2009. “Al compartir nuestra música con las personas invitadas del CMM en Zurich, llamaremos a nuestros oyentes a disminuir la velocidad y buscar la resonancia de la presencia de Dios en todo lo que nos rodea”, él dice.
Asia
La ‘TIARA, The Indonesian Anabaptist peRforming Art’ (El Arte Escénico Anabautista Indonesio) es una banda de 8 personas miembro de la iglesia GKMI Anugerah de Yakarta, Indonesia. Las personas integrantes, que cantan, tocan instrumentos tradicionales (angklung) y bailan, proceden de varias localidades de Java Central y participan regularmente en la música de culto de sus congregaciones locales.
“Queremos compartir el amor de Dios y sus poderosas obras en nuestro país a través de actuaciones que contengan belleza, diversidad y sabiduría”, dice el coordinador de la banda Eliezer Pranawa (Prana) Setiawan. “Esperamos que cada pieza que presentemos en Zúrich 2025 pueda ser un regalo de amor para las iglesias y para la comunidad anabautista mundial”.
“Fue un privilegio participar en la Asamblea del CMM en Indonesia en el 2022”, dice. “En ese fascinante evento, nos dimos cuenta de que tenemos familia y comunidad mundial a través de la iglesia anabautista”.
El secretario general del CMM, César García, se unió a más de 200 personas del liderazgo cristiano mundial para firmar una carta en la que se pide “insistentemente de todo corazón, un alto al fuego completo y permanente, la devolución de las personas rehenes y la liberación de las personas prisioneras palestinas detenidas sin el debido proceso”.
La carta reconoce la pérdida de vidas israelíes el 7 de octubre del 2023 y las decenas de miles de vidas perdidas en Gaza desde entonces; además de la destrucción de dos tercios de las infraestructuras (casas, escuelas, hospitales, carreteras, servicios de agua y energía) y el apoyo a los medios de subsistencia en Gaza.
Expresa su preocupación por el hecho de que se esté cerrando la posibilidad de diálogo y aumente la posibilidad de una guerra regional. Expresa su temor por la pérdida de la presencia cristiana de 2 000 años de antigüedad en Israel y por los territorios palestinos ocupados.
“Hablamos, como líderes cristianos, con una profunda preocupación por el bien común de todas las personas afectadas por la guerra y por los conflictos sin excepción. Hablamos con urgencia. Hablamos con espíritu de paz”, dice la carta.
“Hablamos porque nos inspira profundamente el compromiso valiente y desinteresado de nuestros hermanos y hermanas cristianos palestinos de Tierra Santa, que sufren junto a sus vecinos musulmanes y judíos, y que han decidido ayudar a conseguir un futuro justo y digno para todas las personas habitantes de estas tierras”, concluye la carta.
“Como un anabautista de Colombia, estoy familiarizado con la prolongada violencia interna en una región, y como persona miembro de una histórica iglesia de paz, uno mi voz a la de personas en el liderazgo cristiano de todo el mundo para denunciar la violencia y el sufrimiento y hacer un llamamiento al diálogo constructivo para encaminar a las facciones hostiles hacia la paz”, afirma César García.
“El cuidado de la creación” está adquiriendo una urgencia cada vez mayor.
Las noticias nos recuerdan a diario sobre los alarmantes cambios que se están produciendo en nuestro clima. Como muestra la encuesta llevada a cabo por el Grupo de Trabajo de Cuidado de la Creación, nuestros hermanos y hermanas de nuestra familia mundial de fe sufren sequías, inundaciones, tormentas destructivas, incendios, hambrunas y la devastación provocada por la guerra. Diversas especies están en peligro o incluso en vía de extinción.
Estamos siendo testigos de una violencia terrible contra la amada creación de Dios, y cada vez somos más conscientes de que tanto compartimos el daño, tanto en el rol de pecadores como el de víctimas.
¿Cómo respondemos?
Nuestras respuestas seguramente variarán según el lugar donde vivamos, nuestros recursos, la profundidad de nuestra fe, nuestra teología y nuestra voluntad de responder al llamado del momento. Sin embargo, es imperativo que respondamos, ya sea que vivamos en el Norte global, que carga con una parte desproporcionada de responsabilidad frente a la crisis, o en el Sur global, que carga con una parte desproporcionada de su impacto.
Vivimos en un mundo que ha sufrido los efectos de la pecaminosidad humana desde el Edén, que ha roto nuestra relación con Dios, con los demás y con la creación en toda su diversidad. Pero también vivimos en un mundo en el que el Espíritu misericordioso y liberador de Dios está produciendo una “nueva creación” en y a través de Cristo (2 Corintios 5:17).
¿Qué nos está diciendo ese Espíritu en este momento?
Las convicciones compartidas y el cuidado de la creación
Una de las formas en las que el Espíritu nos habla es al recordarnos nuestras convicciones compartidas en el CMM. A pesar de nuestras muchas diferencias, estas nos recuerdan que ya compartimos una base para responder como familia de fe a la crisis ambiental.
He aquí algunas implicaciones de las convicciones que compartimos:
Convicción compartida #1: Conocemos a Dios como Padre, Hijo, y Espíritu Santo, el Creador que tiene el propósito de restaurar a la humanidad caída convocando a un pueblo y llamándolo a ser fiel en fraternidad, adoración, servicio y testimonio.
La Biblia nos invita a extender la Convicción #1 más allá de que Dios busca “restaurar la humanidad caída” para incluir “a todas las cosas en el cielo y en la tierra” (Efesios 1:10), incluyendo a los ecosistemas que sufren los efectos de nuestro estado caído.
De hecho, Dios desea salvarnos de nuestro cruel y violento abuso de la amada creación de Dios, de modo que podamos unirnos a Él en el cuidado verdadero de la creación que está en peligro. No seremos salvos por nuestro trabajo como mayordomos de la creación; sino que somos “salvos por gracia” para la buena obra que incluye el cuidado de la creación (Efesios 2:8-10).
Convicción compartida #2: Jesús es el Hijo de Dios. Por medio de su vida y enseñanzas, su cruz y su resurrección, nos mostró cómo ser discípulos fieles, redimió al mundo, y ofrece vida eterna.
Cuando la Convicción #2 habla de que Jesucristo “redimió al mundo”, se refiere a un “mundo” que incluye toda la creación. Es porque Dios ama el cosmos (Juan 3:16) que Dios está en Cristo “uniendo todas las cosas” en el cielo y en la tierra (Efesios 1:10). Es este Jesús que ama al cosmos quien nos enseña cómo ser discípulos que aman al cosmos.
Convicción compartida #3: Como iglesia, somos una comunidad de aquellos a quienes el Espíritu de Dios llama a abandonar el pecado, reconocer que Jesucristo es Señor, recibir el bautismo previa confesión de fe, y seguir a Cristo en la vida.
Oímos al Espíritu que nos llama a responder al sufrimiento de la creación por medio de arrepentirnos, alejarnos de la codicia y la ambición egoísta. Reconocer el señorío de Cristo es una base sólida para nuestro llamado misionero a cuidar la creación.
Puesto que Cristo es el Señor, el cosmos entero es el campo de la misión de Dios para rescatar, redimir y restablecer. Seguir a Cristo en la vida es sumarse a esa misión, viviendo con sencillez, reduciendo el impacto de nuestro consumismo en el medio ambiente, defendiendo a los más vulnerables y respondiendo de manera práctica a su sufrimiento.
Convicción compartida #4: Como comunidad de fe, aceptamos que la Biblia es nuestra autoridad para la fe y la vida, interpretándola juntos bajo la guía del Espíritu Santo a la luz de Jesucristo, para discernir la voluntad de Dios y obedecerla.
El Jesucristo que encontramos en la Biblia es aquel por medio del cual se crearon todas las cosas, no sólo las personas, sino también todo lo demás (Juan 1:3 y Colosenses 1:16). Él es, en efecto, la “luz del cosmos” (Juan 9:12). Ese profundo misterio debe moldear nuestro discipulado (Juan 3:21).
Convicción compartida #5: El Espíritu de Jesús nos llena de poder para confiar en Dios en todos los aspectos de la vida, de manera que lleguemos a ser hacedores de paz que renunciamos a la violencia, amamos a nuestros enemigos, procuramos justicia, y compartimos nuestras posesiones con los necesitados.
Reconocemos que la violencia es una parte implícita de la explotación de los recursos naturales, donde los poderosos reclaman tierras y recursos, tratando de silenciar las voces que se alzan en oposición. Quienes protegen y defienden el medio ambiente están siendo perseguidos y asesinados en cantidades sin precedentes en todo el mundo.
El cuidado de la creación en nuestros días exige que, como cuerpo de Cristo, denunciemos la injusticia y la violencia en solidaridad con los más vulnerables. El cuidado de la creación y la búsqueda de justicia son inseparables.
Convicción compartida #7: Como comunidad mundial de fe y vida trascendemos fronteras de nacionalidad, raza, clase social, género e idioma, y procuramos vivir en el mundo sin conformarnos a los poderes del mal, dando testimonio de la gracia de Dios por medio del servicio a los demás, cuidando de la creación, e invitando a toda la humanidad a conocer a Jesucristo como Salvador y Señor.
Con esta convicción, afirmamos juntos claramente que el cuidado de la creación está en el corazón mismo de la misión de la Iglesia de “dar testimonio de la gracia de Dios”. Además, como “comunidad mundial de fe y vida”, que trasciende las fronteras geográficas, políticas y de recursos económicos, se nos presentan innumerables oportunidades de colaborar para responder a la necesidad crítica de cuidar la creación.
Damos gracias por la colaboración que ya se está llevando a cabo.
Del Señor es el mundo entero, con todo lo que en él hay, con todo lo que en él vive. Salmos 24:1
Thomas R Yoder Neufeld, presidente de la Comisión de Fe y Vida, miembro de la Primera Iglesia Menonita, Kitchener, Ontario, Canadá
Anicka Fast, secretaria de la Comisión de Fe y Vida, miembro de Doopsgezind Gemeente Bussum-Naarden, Países Bajos
Kintsukuroi, es una técnica tradicional japonesa, que implica reparar la cerámica con laca y oro, aceptando el daño como parte de la historia de un objeto en lugar de ocultarlo o descartarlo.
Este proceso conlleva identificar áreas rotas y repararlas delicadamente con oro precioso, dando como resultado piezas únicas que combinan quebrantamiento con magnificencia, elevando su valor y belleza.
En el ámbito de las relaciones internacionales, la injusticia puede escalar hasta convertirse en conflictos y guerras, fracturando a las familias debido a la falta de respeto y consideración. Al entablar un diálogo similar al de un alfarero que evalúa ángulos rotos y aborda las heridas con amor, comprensión, tolerancia y compasión, se pueden restaurar las relaciones y la paz puede prevalecer.
La transformación del quebrantamiento en gloria significa un cambio en el que las imperfecciones ya no denotan defectos, sino que simbolizan crecimiento y resiliencia. La incorporación del oro resalta la belleza dentro del quebrantamiento, realzando su valor y significado.
Durante el Domingo de la Paz se llevó a cabo un acto simbólico con un árbol de papel, donde las personas identificaron a sus “alfareros” a quienes acudirían en busca de apoyo en tiempos difíciles. Esto fomentó una cultura de amor y bondad entre los participantes.
A pesar de la existencia de conflictos, divisiones e injusticias a nivel mundial, sigue existiendo un camino hacia la paz y la curación al encarnar el papel del alfarero en las manos del Padre, tratando a los demás con amor y compasión, así como el oro que llena las grietas para realzar la belleza y la plenitud.
Los individuos pueden contribuir a un mundo más armonioso e interconectado.
Oración
Querido Padre Celestial,
A través de tu suave toque, podemos experimentar tu preciosa curación. Nuestras imperfecciones son tratadas con especial honor.
Padre, por favor ayúdanos a ser sensibles a las heridas de las personas. Que, a través de tu gracia y tus dones, podamos encarnar tu amor, empatía y compasión.
Estamos dispuestos a satisfacer las necesidades de los demás.
Concédenos el valor de abrazar nuestro quebrantamiento, recibir sanación y revelar tu gloria a través de nuestras heridas.
Gracias Padre. Eres Jehová Rafa. Tu curación nos trae unidad y paz.
En el nombre de Jesús, oramos. Amén.
—Wincy Wan es miembro de la Comisión de Paz. Es pastora de una iglesia menonita en Hong Kong.
Kintsukuroi, la práctica de crear o recrear a partir de cerámica rota, me llevó a pensar en Jeremías, quien fue enviado por el Señor a ir a la casa de un alfarero.
Cuando Jeremías llegó allí, notó que “siempre que el objeto de barro que estaba haciendo le salía mal en la mano, lo intentaba de nuevo, haciendo del barro otro objeto de cualquier tipo que quisiera”.
Entonces el mensaje de Dios fue: “¿No podré yo hacer de vosotros como este alfarero, oh casa de Israel? dice Jehová. He aquí que, como el barro en la mano del alfarero, así sois vosotros en mi mano, oh casa de Israel”. (Jeremías 18:4,6 DHH)
El mensaje del Señor a Jeremías es que Dios hace lo que Dios quiere, a veces según una actitud humana.
Desafortunadamente, debido a nuestra terquedad, a menudo invertimos roles, considerándonos Dios y Dios el barro.
Eso es lo que podemos entender en Isaías 29:15-17: “¡Qué modo de pervertir las cosas! Como si el barro fuera igual a aquel que lo trabaja. Un objeto no va a decir al que lo hizo: «Tú no me hiciste», ni una pieza de barro al que la fábrica: «No sabes lo que estás haciendo»”.
De alguna manera el apóstol Pablo compartió esta idea cuando dijo: “El alfarero tiene el derecho de hacer lo que quiera con el barro, y del mismo barro puede hacer una olla para uso especial y otra para uso común. Dios, queriendo dar un ejemplo de castigo y mostrar su poder, soportó con mucha paciencia a aquellos que merecían el castigo e iban a la perdición. (Romanos 9:21-22).
Demos al Señor la dirección de nuestras vidas.
Oración
¡Oh, Señor!, rompe en mí lo que no es tuyo y reconstrúyeme según lo que tú quieres que sea, para glorificar tu nombre.
—Kari Traore es miembro de la Comisión de Paz. Es pastor de una iglesia menonita en Burkina Faso.
Conmemoremos quinientos años del anabautismo
Sábado, 29 de mayo de 2025
Zúrich, Suiza
Talleres
presentaciones musicales
obras teatrales
mesas redondas que culminarán en un culto ecuménico.