Oraciones de gratitud e intercesión

  • La representante regional KyongJung Kim visita iglesias menonitas/anabautistas en Japón, del 1 al 18 de Julio de 2016

    Fue un gran privilegio visitar las iglesias miembros nacionales en el Noreste de Asia como representante del Congreso Mundial Menonita (CMM). En tanto planeaba visitar Japón, oraba para que esto sucediera si era agradable para Dios. Con el paso del tiempo, las iglesias miembros Japonesas fueron abriendo sus puertas una por una. (En Japón hay 73 congregaciones y 2.801 miembros).

    El propósito de mi visita era presentar el CMM y su relación con las iglesias miembros nacionales. El tema principal que preparé fue “Nos necesitamos mutuamente para crecer juntos en el cuerpo de Cristo.”

    El 3 de julio de 2016, en la iglesia Menonita Minami en Miyazaki, me di cuenta que la flor nacional de Corea era la imagen de portada del boletín de la congregación ese domingo. Corea tuvo una historia dolorosa con la colonización de Japón (1910-1945). Sentí que nuestra relación ya había sido transformada a una amistad en el Señor.

    Después del culto, la hermana del pastor Syozo Satou dijo que había asistido a la asamblea del CMM en Winnipeg (1990), identificándose a sí misma con la familia del Congreso Mundial Menonita. Ella se disculpó por lo que los antepasados japoneses le habían hecho a los coreanos durante la colonización japonesa. Yo agradecí su manera honesta de compartir, luego pasamos del tiempo de culto al tiempo de fraternizar juntos .

    El 9 de Julio, asistí a la reunión de líderes de la conferencia Hokkaido en donde hablé sobre el CMM y sus relaciones con las iglesias miembros. A lo largo del compartir en la reunión, vi un gran potencial entre los jóvenes. Algunos jóvenes adultos participaron en la Asamblea del CMM en Pensilvania el año pasado; ellos estaban muy interesados en los programas de intercambio.

    El 10 de Julio, estuve en el culto y en la comunión en Bethel Mennonite, una pequeña iglesia casera en el centro de Sapporo. En Japón, encontré que la mayoría de las iglesias son demasiado pequeñas para ofrecerle apoyo financiero completo a sus pastores. Los miembros son animados a participar en la vida y en el trabajo de la congregación tanto como sea posible. (Esto es parecido a mi congregación local en ChunCheon, Corea del Sur.) Todos son ministros, haciendo lo que pueden de acuerdo a sus dones.

    Es bueno tener lideres eclesiales (o miembros activos) que visiten las congregaciones para compartir historias y recibir ideas los unos de los otros. La vida de una congregación local debería ser compartida con otros tanto como sea posible, para animar y fortalecer nuestras iglesias para que crezcan conjuntamente. Las relaciones iglesia – iglesia nos ayudarían también a encontrar mejores recursos para las generaciones futuras.

    Del 11 al 13 de Julio, visité Osaka, en donde hay muchas congregaciones de los Hermanos Menonitas y un seminario. La iglesia de los Hermanos Menonitas en Japón es el grupo anabautista más grande del país (63 por ciento), pero ellos no son miembros del CMM. Un pastor me preguntó sobre la objeción de conciencia al servicio militar en la situación de la iglesia coreana; yo le contesté que no todos en mi congregación están de acuerdo con la posición de paz de la iglesia. Tenemos nuestras debilidades así como nuestras fortalezas; es por eso que nos necesitamos mutuamente. Animé a las iglesias de los Hermanos Menonitas a interactuar con otros grupos anabautistas/menonitas en Japón primeramente y construir relaciones con otros quienes estén más allá.

    Del 14 al 17 de Julio, conocí hermanos y hermanas en el área de Tokio. Como otras conferencias, ellos estaban muy abiertos a desarrollar una construcción de relaciones con otras iglesias.

    ¿Qué haría que tal construcción de relaciones fuera posible? Discutimos varias cosas incluyendo YAMEN, un programa conjunto del Comité Central Menonita y el CMM. Me alegró que ellos estuvieran dispuestos a explorar ésta posibilidad. Enviar y recibir voluntarios significa aprendizaje potencial y crecimiento a través de compartir experiencias de vida y de involucrarse en el quehacer y el trabajo del cuerpo extendido de Cristo.

    Como otras iglesias en el mundo, las iglesias japonesas se están enfrentando a muchos retos. Es nuestro deber y responsabilidad caminar con Dios, no solos, sino junto con otros hermanos y hermanas alrededor del mundo.

    En el camino de vuelta a casa, reflexioné en lo que había aprendido; fue todo sobre la relación en Cristo. ¡Gracias sean dadas a Dios quien renovó nuestras relaciones con él a través de Cristo!

    —KyongJung Kim, Representante regional, Noreste de Asia, Congreso Mundial Menonita


  • Así como las partes del corazón, las cuatro comisiones del CMM sirven a la comunidad mundial de iglesias afines al anabautismo, en las áreas de diaconado, fe y vida, paz y misiones. Las comisiones preparan materiales para la consideración del Concilio General, brindan guía y proponen recursos a las iglesias miembros, además, propician redes y compañerismo en relación al CMM trabajando juntos en temas de interés y enfoque común. A continuación, una de las comisiones comparte un mensaje de la perspectiva de su ministerio.


    Comisión de Misiones

    El objetivo de la Comisión de Misiones del CMM es imaginar y construir una nueva comunidad de misiones mundial dentro del cuerpo de Cristo, que se extienda por todos los continentes. Buscamos una fraternidad que esté profundamente basada en el amor mutuo, organizada en torno a la sujeción recíproca y que participe sin restricciones de las relaciones económicas sin incurrir en paternalismos inadecuados ni en dependencias poco saludables.

    Buscamos esto no solamente como una demostración evangélica de nuestra unidad en Cristo, sino también por el bien de la misión de Dios en todo el mundo.

    La historia como guía

    La Biblia es la historia de las acciones amorosas de Dios en la creación y su propósito de redención en la historia. Como consecuencia de la rebeldía humana y el pecado, el mundo que Dios creó experimentó la distorsión y la destrucción. El temor, el orgullo, la codicia y la ambición egoísta nos han llevado al alejamiento de Dios y a la alienación entre los pueblos. La consecuencia de esta alienación es el odio, la violencia, la guerra, la opresión y la injusticia.

    Los propósitos de Dios, revelados en Jesús, son finalizar el odio y el temor, la pobreza y la injusticia para crear una nueva familia que incluya todas las culturas, idiomas y etnias.

    Después de la ascensión de Cristo, la iglesia fue constituida por el Espíritu de Dios para proclamar y para encarnar la buena noticia de que a través de la vida, muerte y resurrección de Jesús, Dios se está reconciliando con toda la humanidad y restaurando a toda la creación. La diversidad es el don de Dios para nuestro enriquecimiento.

    La fuente de nuestra misión.

    La promesa de Dios de bendecir a todas las naciones de la tierra es la fuente de nuestra misión. El propósito de Dios es crear un pueblo con personas atraídas desde cada raza y nación que reflejen su gloria a través de la unidad. De acuerdo al seguimiento de Dios, rechazamos los males del racismo y del orgullo etnocentrista.

    La misión de la iglesia de Jesucristo, por consiguiente, requiere que actuemos con justicia y misericordia y que nos involucremos con cada persona y grupo con dignidad, respeto y compasión en razón al valor que, para Dios, cada uno tiene. También nos demanda denunciar y resistir todo sistema y acción que oprima y explote a aquellos que son pobres, débiles o vulnerables. Creemos que la unidad es un regalo del Espíritu, no algo que nosotros originamos. Al mismo tiempo, vemos la preservación de nuestra unión visible como una expresión práctica de amor y una dimensión critica de nuestra misión. Cuando Jesús ora por la unidad de sus seguidores y les manda a que se amen unos a otros, es por el bien de la misión de Dios (“para que el mundo pueda saber que tu (el Padre) me enviaste‚Äù [Juan 17:23]).

    No hay una demostración más convincente de la autenticidad del evangelio que la de los seguidores de Jesús que estén reconciliados mutuamente y unidos en el amor por encima de las barreras de la etnia, el color, la raza, el género, la clase social, el estrato económico, la alineación política o el origen nacional. De la misma manera, hay algunas cosas que afectan significativamente la credibilidad de nuestro testimonio, como cuando los cristianos nos alienamos unos a otros y toleramos o intensificamos divisiones entre nosotros mismos.

    El reto de la diferencia

    Uno de los retos que enfrentamos dentro de la comunidad mundial es como tratar con nuestras diferencias. Nuestro canon bíblico nos da algunas pistas sobre como equilibrar la tensión entre unidad y diversidad. Una característica básica de nuestra Biblia es la mezcla de géneros y estilos literarios en tanto que se mantiene la coherencia. Contiene documentos legales, genealogías, notas históricas, relatos de viajes, etc, con variedad de autores, temas, géneros y épocas.

    Nuestra biblia permite que haya diversidad dentro de la unidad. La formación del canon es un testimonio de que bajo la guía del Espíritu santo, la iglesia primitiva eligió conservar los cuatro evangelios, cada uno con su tono peculiar y distintivo.

    Una imagen diferente acerca de la diversidad es un diapasón. Esta herramienta es usada para ajustar la orquesta (una variedad de instrumentos, sonidos y calidades) en un tono específico. La presencia del diapasón no borra o elimina las diferencias de los instrumentos musicales, sino que alinea los tonos para que estos instrumentos dispares puedan hacer juntos música hermosa.

    Como comunidades de fe, nuestra tarea es compartir sobre el amor redentor de nuestro Dios. Cristo es nuestro diapasón. Cuando estamos afinados con Cristo, es más fácil distinguir esas cosas que no son esenciales que nos separan. En vez de eso, trabajamos en el medio de la diversidad por el reino de Dios.

    Nos damos cuenta de que nuestro objetivo requerirá un compromiso inquebrantable con la honestidad y la solidaridad. En un espíritu de amor y perdón, debemos hablar honestamente entre nosotros sobre los obstáculos de una comunidad auténtica. El amor mutuo también requerirá solidaridad recíproca. Debemos estar dispuestos a compartir en las luchas y sufrimientos de los otros, además, estar atentos a ofrecer apoyo, oración y compañía en los retos que cada uno enfrenta para dar testimonio de nuestro del evangelio.

    Entonces, ¬øPor qué es importante el trabajo de la Comisión de Misiones?

    Importa porque como el cuerpo de Cristo, la iglesia es la buena nueva de Dios en un mundo herido y quebrantado. En su libro, El evangelio en una sociedad pluralista (The Gospel in a Pluralist Society*), Lesslie Newbigin describe la iglesia como un “signo, instrumento y adelanto‚Äù del reino de Dios. Ante un mundo que nos observa, somos llamados a través de nuestra unidad en el amor a compartir y ser un reflejo de la reconciliación que Dios ha logrado en Jesucristo. Ya no vivimos por nosotros, sino por el mundo que Dios ama y busca bendecir a través de nosotros (Génesis 12:3).

    ‚ÄîStanley W. Green y Rafael Zaracho, presidente y secretario de la Comisión de Misiones del CMM

    *(Eerdmans, 1989, p. 233)

    Rafael Zaracho

    Stanley W. Green

  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por su sigla en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    Presentamos “La Iglesia en misión”: una consulta de ICOMB sobre misión y oración

    Localización: Bangkok, Tailandia

    Fechas: 7–11 de Marzo de 2017

    La familia global HM está buscando la dirección de Dios en cuanto a nuestro mayor llamado a la misión.

    La misión HM es una parte vital de este evento, a medida que trabajamos juntos, será algo histórico. En 1988 una consulta de misión se llevó a cabo en Curitiba, Brasil, e ICOMB fue su resultado. En 1999 una consulta más pequeña de misión se llevó a cabo en Wichita, EE.UU. Esta es la primera vez que la Iglesia global HM en sí misma está pidiendo una reunión de este tipo.

    Nuestra visión es que cada conferencia se valla con un renovado sentir en cuanto al llamado de Dios, con 3-4 iniciativas de misión específicas (global y local). Nuestra visión en fe, es que cada grupo salga con el compromiso de construir un movimiento de oración en su Iglesia nacional.

    El comité de dirección es: Heinrich Klassen (Alemania), Paul Duck (Brasil), Vic Wiens (Misión HM), David Wiebe (Canada)

  • Elkhart, Indiana, EE.UU. – Se ve el fuego del Espíritu Santo destellando en los ojos de Bercy Mundedi. Este fuego enciende el ministerio para el cual ha sido llamada – el más reciente ha sido dirigir el Instituto Bíblico Kalonda en la República Democrática del Congo.

    Mundedi fue nombrada directora durante la asamblea general de la Communauté Mennonite au Congo (Iglesia Menonita del Congo) que se realizó del 29 de junio al 3 de julio de 2016 y que se lleva a cabo cada dos años. El instituto, ubicado a tres millas de la sede de la denominación en Tshikapa, es uno de los centros principales donde los pastores menonitas reciben entrenamiento en ese país. Hay 36 estudiantes matriculados en Kalonda, de los cuales ocho son mujeres.

    “La Reverenda Pastora Mundedi es una mujer de fuertes cualidades espirituales, morales e intelectuales,” dijo Adolphe Komuesa Kalunga, presidente nacional de la Iglesia Menonita del Congo. “Ella ha demostrado su compromiso personal con Jesucristo y su devoción al ministerio pastoral. La hemos visto dispuesta a responder con entusiasmo a cualquier ministerio que la iglesia le solicite.”

    Mundedi conoce muy bien el Instituto Bíblico Kalonda ya que enseñó allí por 10 años. Ella fue una de las primeras tres mujeres de la Iglesia Menonita del Congo en ser ordenada en el año 2013 y se regocija al ver los avances de la obra que Dios está realizando en su denominación.

    “Estoy desbordando de gozo,” dijo Mundedi justo antes de su instalación como directora del Instituto Bíblico Kalonda. Describió su visión para este ministerio de entrenamiento de líderes de iglesias como algo que lleve a la transformación de la persona en su totalidad.

    “Quiero promover un liderazgo santo en nuestras iglesias,” dijo Mundedi. “También quiero servir de inspiración a otras mujeres y chicas para que usen sus dones en las iglesias, que sepan que los dones que el Espíritu Santo les da son para ser utilizados en la edificación de la iglesia.”

    Cuando Mundedi tenía 14 años ya estaba predicándoles a sus compañeros de clase. Las mujeres mayores notaron su comprensión espiritual y la animaron a seguir estudios teológicos. Mundedi dijo que nunca habría tomado esa decisión de no haber sido por esa influencia porque, en aquel entonces, las mujeres no podían enseñar ni predicar en la iglesia.

    En 1996, después de completar sus estudios de teología en Kinshasa, Mundedi regresó a su aldea a enseñar. Sus dones llamaron la atención de los líderes nacionales menonitas y la contrataron como profesora en el Instituto Bíblico Kalonda. La ironía era clara: a pesar de que las normas de la iglesia no permitían que Mundedi fuera pastora, la invitaron a entrenar pastores.

    Rod Hollinger-Janzen, coordinador ejecutivo de la Misión Inter Menonita de África, dijo que Mundedi es la primera mujer en dirigir una institución de la Iglesia Menonita de la República Democrática del Congo desde que Elvina Martens, una doctora misionera de América del Norte, supervisó la labor médica de la denominación en los años 60.

    Lynda Hollinger-Janzen, Misión Inter Menonita de África y Misiones Menonitas del Este

  • “La justicia se siembra en paz y da su fruto a los que promueven la paz” (Santiago 3:18)

    En un mundo asolado por la violencia, no es fácil ser una iglesia de paz, una iglesia entregada al camino de la paz de Cristo. Este camino requiere mucha intencionalidad, persistencia y aun sacrificio. No siempre hay certeza de que el camino de paz de Cristo sea eficaz. Y, sin embargo, el autor de Santiago nos recuerda que es importante cómo sembramos nuestras semillas. Si realmente deseamos el fruto de la justicia, debemos sembrar en paz.

    Los menonitas constituyen una de las tres iglesias históricas de paz, junto con la Sociedad de Amigos (cuáqueros) y la Iglesia de los Hermanos. Dichas iglesias, a lo largo de su historia, han manifestado que la paz y el camino de la paz son fundamentales para la participación en el Reino de Dios.

    ¿Cómo construye tu iglesia una identidad de fe enraizada en el camino de la paz? Como comunidad mundial de fe, estaremos conmemorando el Domingo de la Paz, el 18 de septiembre de 2016. ¿Cómo fomenta tu iglesia la paz tan necesaria en nuestro mundo?

    -Andrew Suderman, Secretario de la Comisión de Paz del Congreso Mundial Menonita

    Haga clic aquí para ver los recursos para la adoración del Domingo de la Paz 2016.

  • Durante los últimos tres años, mi familia ha disfrutado de la amistad de unos parientes lejanos de Irak que vinieron a los Estados Unidos como refugiados en busca de asilo. Hemos disfrutado juntos comidas en nuestros hogares, picnics, salidas a caminar por senderos, conciertos de coros, y cultos en la iglesia.

    Cuando vemos en las noticias los terribles eventos que suceden, nos lamentamos juntos.

    En ocasiones, cuando alguien ha estado enfermo, se me ha invitado a orar por sanidad en el nombre de Jesús el Mesías.

    ¿Por qué esta familia está tan abierta a tener amistad con cristianos?

    Recuerdan su barrio mixto en Bagdad donde sus antepasados compartieron en comunidad con los cristianos durante los últimos 600 años. Cuentan haber ido a la casa de sus vecinos cristianos a celebrar el bautismo infantil y de la misma manera los cristianos venían a sus bodas familiares y a las ceremonias donde se les ponía el nombre a los bebés.

    Todo esto finalizó en el año 2003 con la segunda guerra de Irak y con la salida de su comunidad de, virtualmente, todos los cristianos. Hoy en día, la guerra, el terrorismo y la retórica provocadora pone un estrés tremendo en las comunidades cristianas y musulmanas de todo el mundo.

    ¿Cómo se puede aliviar este estrés?

    Un ejemplo reciente ocurrió en enero de 2016: los líderes musulmanes de todo el mundo se reunieron en Marrakech, Marruecos, para poner en consideración las responsabilidades de los musulmanes hacia las minorías religiosas viviendo en su medio. Basaron sus deliberaciones en el Tratado de Medina (alrededor del año 622 DC.)

    La Declaración de Marrakech hace un llamado a los musulmanes en la política, la educación y las artes a desarrollar un enfoque más justo para los que tienen otras convicciones religiosas. Confronta al extremismo afirmando que “no es razonable emplear la religión con el propósito de agredir los derechos de las minorías religiosas.”

    Los anabautistas junto con los cristianos en todas partes deberían regocijarse por este esfuerzo sincero para hacer frente a un problema polémico en curso. “La Declaración de Marrakech tiene el potencial de ser…un poderoso contrapeso en la consolidación de la paz para un extremismo islámico violento encarnado en grupos como ISIS,” afirma Rick Love, fundador y líder de Peace Catalyst International, que asistió a la reunión de Marrakech.

    La realidad es que todas las comunidades humanas se quedan cortas con la visión de Dios, la cual fue dada a través de Moisés hace unos 4.000 años:

    “Cuando algún extranjero se establezca en el país de ustedes, no lo traten mal. Al contrario, trátenlo como si fuera uno de ustedes. Ámenlo como a ustedes mismos, porque también ustedes fueron extranjeros en Egipto. Yo soy el Señor y Dios de Israel” (Levíticos 19:33-34).

    Y la visión de una comunidad saludable que dio Jesús hace 2.000 años:

    “Oye, Israel. El Señor nuestro Dios es el único Señor; ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente y con todas tus fuerzas.’… ‘Ama a tu prójimo como a ti mismo.’ No hay otro mandamiento más importante que éstos” (Marcos 12:29–31).

    Un hadiz de Buhkari describe una visión similar, “Sobre la necesidad de amor hacia el prójimo, el Profeta Muhammad ( ??? ???? ???? ???? ) dijo: “Ninguno de ustedes tiene fe hasta que no desea para el prójimo lo que desea para sí mismo” (de A Common Word between Us and You).

    Una de las inquietudes en las recientes iniciativas de la comunidad musulmana es la de no abordar la cuestión de la conversión del Islam.

    James Schrag, en aquel entonces director ejecutivo de la Iglesia Menonita de Estados Unidos, expresó esta inquietud en su respuesta formal a A Common Word between Us and You (una iniciativa académica que los musulmanes ofrecieron a los cristianos en 2007):

    “Creemos que en cualquier sociedad, el amor al prójimo…incluye el respeto por la libertad de esa persona de creer o no, de escoger su fe y su religión.”

    El señorío de Jesús sobre todas las cosas significa que mi primera lealtad es hacia el Reino de los Cielos y por lo tanto doy testimonio fiel de que todas las personas son creadas a imagen de Dios y son dignas de ser tratados con honor y valor. Anhelo que los musulmanes y los cristianos sean transformados por la verdad de que Jesús es realmente el Salvador de todo el mundo.

    Junto con mis amigos iraquíes, estamos experimentando el gozo de la amistad, la comunidad y la hospitalidad al compartir libre y abiertamente.

    —Jonathan Bornman es miembro del Equipo para las Relaciones entre Cristianos y Musulmanes de Misiones Menonitas del Este.

    Una voz de la comunidad menonita de Indonesia:

    La Declaración de Yakarta es una señal positiva para la paz y las relaciones constructivas entre el islam y el cristianismo, especialmente en un país mayormente musulmán como Indonesia. Espero que no se quede solo como una declaración, sino que también se haga realidad en la sociedad. Podemos celebrarlo como un compromiso por la paz entre las comunidades.

    —Danang Kristiawan es pastor de GITJ Jepara, una congregación del Sínodo Gereja Injili di Tanah Jawa (Iglesia Evangélica del Sínodo de Java).

  • “Caminante, no hay camino, se hace camino al andar”. Ésta hermosa frase del poeta Antonio Machado identifica mi caminar por los senderos de la vida. Especialmente mi andar de dos años en la hermosa Colombia.

    Cada persona tiene una identidad marcada por sus antecedentes familiares, sociales, contextuales, etc. A decir verdad mi identidad como Rut Atarama, peruana, Hermana Menonita, fue replanteada positivamente durante mi tiempo de servicio en el programa Semilla Colombia del Comité Central Menonita.

    Durante dos años viví en Ibagué, ciudad capital de la región Tolima, considerada cuna de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia, las FARC. Mi trabajo consistió en acompañar procesos de atención integral a familias en situación de desplazamiento por el conflicto armado con la Fundación Menonita Colombiana para el Desarrollo (Mencoldes); y procesos comunitarios con la Iglesia Menonita de Ibagué. En éste relato sólo voy a referirme a ésta última experiencia.

    La Iglesia en su llamado de actuar en pro de la comunidad trabaja en diversas áreas, especialmente con niños, niñas y adolescentes de comunidades que tienen diversas problemáticas como por ejemplo: drogadicción, delincuencia y pobreza.

    “Profesora y usted qué hace cuando empieza la balacera?” Ésta pregunta de una niña de siete años demuestra la realidad a la que se enfrentan cotidianamente. “Mi hermano y yo nos escondemos debajo de la cama.”

    Por la complejidad de un contexto con escenas de violencia, surgió la necesidad de abordar temas de prevención del abuso, construcción de paz y valores de manera contextualizada; un material educativo que pueda ser utilizado en los procesos comunitarios que desarrolla y acompaña la Iglesia Menonita en Ibagué.

    Debido a esta necesidad un grupo de valerosas mujeres menonitas profesionales: Fabiola Arango, Rosa Triana, Amanda Valencia y Diana Suárez decidieron ponerse manos a la obra y trabajar un material educativo cristiano para niños, niñas y adolescentes de las comunidades con las que trabaja la iglesia Menonita de Ibagué. Gracias a Dios fui llamada a ser parte de éste hermoso grupo de trabajo. !Una comunicadora social, Hermana Menonita de Perú trabajando con Menonitas de Colombia, una hermosa oportunidad de koinonía anabautista!

    Reuniones, jornadas completas, estructuración de lecciones, conversaciones largas sobre cómo debían enfocarse las temáticas, observaciones en las comunidades, investigaciones metodológicas, redacciones, correcciones, entre otros, marcaron nuestros encuentros semanales por más de un año. Todo ello queda atesorado en mi memoria, para siempre. Palabras sabias de mis queridas amigas “Los niños y las niñas deben tener espacios donde puedan comportarse como tales, ser libres, alegres, soñadores… sentirse amados y valorados”.

    En diciembre del año 2015 nació con gran alegría “Aguapanela[i]: Currículo Educativo Cristiano para la Niñez y la Adolescencia”. Este material viene siendo utilizado no sólo por la Iglesia Menonita de Ibagué sino también por otras comunidades anabautistas en Colombia.

    Luego de haber culminado mi tiempo de servicio en Colombia, regresé a mi país, cargada de buenas experiencias, memorias, historias y también nuevas perspectivas sobre mi fe. Traje también algunos ejemplares de “Aguapanela” y los compartí con mi comunidad. Actualmente tengo la alegría de contar que este material educativo viene siendo utilizado en el programa de niños y niñas que tiene la Iglesia Hermanos Menonitas de Miraflores, Piura, Perú.

    Agradezco profundamente a quienes se han cruzado por mi camino en Colombia. Gracias a mis queridas amigas que trabajaron con ahínco “Aguapanela”. Gracias por compartir sus historias, su pasión, su fe vivenciada en hechos de amor a Dios y al prójimo, que han fortalecido mi identidad anabautista, cristiana, peruana con matices colombianos.

    –Rut Atarama, miembro de la Iglesia Cristiana Hermanos Menonitas, Miraflores. Piura, Perú.

    Para saber más del currículo “Aguapanela”, escribe a: menonita_ibg@hotmail.com o fabiola.arango@gmail.com

    Aguapanela!!! Currículo Educativo Cristiano para la Niñez y la Adolescencia.


    [i] Aguapanela es una bebida hecha de azúcar antes de ser procesada. Usualmente se sirve en reuniones o cuando la gente está resfriada.

  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por su sigla en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    Reunión con César García

    Después de la Cumbre de Panamá, me reuní con César a fin de tener la tercera reunión anual entre el Congreso Mundial Menonita (CMM) e ICOMB. Discutimos asuntos de interés y preocupaciones mutuas. Consideramos a la familia global CMM como nuestro “paraguas”. Siempre colaboramos para que no se relacionen a los organismos nacionales de los HM, en diferentes maneras, sobre todo si hay problemas.

    ICOMB es la comunidad de los Hermanos Menonitas – la “denominación” global. ICOMB es el resultado final de la misión. El servicio a los demás y el anuncio del Evangelio son los medios para establecer iglesias locales, que eventualmente se traducirá en una iglesia nacional de los Hermanos Menonitas – un cuerpo autóctono que sirve y proclama dentro de su propio contexto cultural. ICOMB es la expresión de la familia mundial de los Hermanos Menonitas. Otra manera de decirlo: en conjunto formamos la denominación HM como una “comunidad internacional”.

    –David Wiebe

  • Desde el martes 5 hasta el sábado 9 de julio de 2016, se realizó en El Salvador la Consulta Anabautista Menonita de Centroamérica, México y el Caribe. Sandra Campos, miembro de la Iglesia Menonita de Costa Rica y del Comité Ejecutivo del Congreso Mundial Menonita junto con el Pastor menonita de El Salvador Samuel Martínez fueron los organizadores de este exitoso evento. Un total de 59 personas provenientes de México, Puerto Rico, Guatemala, Belize, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá y Argentina participamos de este importante evento que se realizó en la Escuela de Capacitación Adventista Salvadoreña, en San Juan Opico, La Libertad.

    Realmente fue una gran bendición participar en este evento, donde recibimos muchos impulsos para un trabajo pastoral más adecuado frente a los desafíos contemporáneos. El pastor Gilberto Flores, con más de 40 años de pastorado en Centroamérica y los Estados Unidos, fue el conferencista invitado. El tema general de la consulta fue «El Ministerio Pastoral Frente a los Desafíos Contemporáneos. Reimaginando nuestra acción pastoral en la posmodernidad.»

    El programa incluyó un informe sobre el «Movimiento de Mujeres Anabautistas haciendo Teología desde América Latina (MTAL)». Olga Piedrasanta de Guatemala, Mary Cano y Ondina Murillo de Honduras fueron las coordinadoras de MTAL y Ester Bornes de Argentina la encargada de ofrecer el Seminario-Taller «Creadas y creados como Iguales».

    También recibimos un breve informe sobre la programación del Seminario Anabautista Latinoamericano: SEMILLA, la Red de Paz de Centroamérica y el Comité Central Menonita.  En el contexto de este evento Willi Hugo Pérez, Rector de SEMILLA, dio a conocer su anhelo de un trabajo conjunto con iglesias, organizaciones, hermanos y hermanas de las iglesias menonitas y anabautistas en su rol como nuevo representante regional del Congreso Mundial Menonita en la región de Centroamérica. Los presentes impusimos las manos y elevamos palabras de oración de bendición y envío de Willi Hugo para esa importante tarea.

    Destacamos la renovación de CAMCA y el deseo expresado por todos los participantes de volvernos a reunir en Honduras para el año 2018. La Iglesia Menonita de Honduras será la anfitriona de este próximo evento y la fecha del mismo será anunciado por ellos posteriormente.

    De igual manera, cada país nombró un representante para promocionar CAMCA al interior de las iglesias, con el propósito de que muchos jóvenes, mujeres, pastores y hasta familias se vayan organizando para participar en la próxima consulta. 

    Agradecemos mucho a la Iglesia Menonita de El Salvador, quien nos acogió con tanto cariño y ternura. Todos los participantes hemos sido impactados para realizar nuestro mejor aporte en las tareas pastorales y hemos sentido a través de las presentaciones, el estudio de la Palabra, los testimonios, oraciones y cantos, la presencia del espíritu amoroso de Dios. Hemos vuelto a recordar las palabras de Jesucristo, el cordero inmolado: «Yo hago nuevas todas las cosas» (Apocalipsis 21:5). 

    —Jaime Prieto es costarricense, casado con la brasileña Silvia de Lima; juntos tienen un hijo llamado Thomáz Satuyé. Jaime es Doctor en Teología de la Universidad de Hamburg, República Federal de Alemania (1992), miembro de la Iglesia Menonita de Costa Rica desde 1971, y actualmente pertenece a la Asociación de Iglesias Evangélicas Menonitas de Costa Rica (miembro del Congreso Mundial Menonita). 

    Participantes de CAMCA 2016. Foto: Andrew Boden.

     

     

     

     

     

     

    Grupo de participantes en el evento del Movimiento de Teólogas de América Latina. Foto: Andrew Boden.

     

  • ¿En qué piensas cuando oyes la palabra hospitalidad? Por lo general, me recuerda la experiencia que tuve cuando visité un país de otro continente.

    Creía que los colombianos eran buenos anfitriones hasta que me hospedó una familia de una cultura diferente. Fue algo increíble: la cantidad y calidad de la comida que me ofrecían, sus esfuerzos tan evidentes en hacerme sentir bienvenido, cada detalle de mi habitación, sus preguntas, su respeto y buena disposición para servirme tanto como fuera posible.

    No obstante, lo que me conmovió más que cualquier otra cosa fue su actitud. Estaban dispuestos a dejar de lado todas sus actividades y concentrarse muy generosamente en servir a su huésped.

    La hospitalidad se define como la capacidad de prestarle atención a un huésped. Esto es muy difícil porque estamos preocupados por nuestras propias necesidades. Nuestra ansiedad nos impide desviar la atención desde nosotros hacia los demás. Si pecado es cuando el alma se centra en sí mismo, como lo definiera Agustín de Hipona, entonces una vida sin pecado sería poder centrar nuestra atención en los demás. Es decir, cuando uno vive brindando hospitalidad, vive sin pecado.

    Jesús es el mejor ejemplo de lo que significa la hospitalidad. Mediante su vida y muerte en la cruz, Dios ingresa al mundo de la existencia humana. Por medio de su compasión, centra su atención en los demás, en vez de en sí mismo. Es a través del sufrimiento y quebrantamiento de Jesús que Dios comparte la mortalidad, fragilidad y vulnerabilidad de la humanidad. Y entonces, en el libro de Apocalipsis, Jesús hace lugar en su gloria para la multitud de todas las naciones que llegan a adorarle. 

    La actitud y atención de Jesús en el otro trae sanación a las personas que han sido abusadas, que han padecido dolor y sufrimiento. Ni la injusticia de las heridas de Jesús ni la realidad de su triunfo y señorío finales lo llevan a cuidarse de sí. Está presente, cual pastor, para brindar consuelo y guía a los demás. Jesús ha venido a servir, no a ser servido, y esto es así aun en su gloria.

    Actualmente, al afrontar la crisis de los refugiados que observamos en todo el mundo, nuestro llamado a la hospitalidad como cuerpo de Cristo nos convoca a revelar la presencia de Dios en medio de dicho sufrimiento y dolor. Es un llamado a brindar esperanza, sanación, guía y cuidado. Es un llamado a  centrar nuestra atención en los perseguidos, enfermos y sin techo. Aunque quizá tengamos muchas necesidades y bastantes motivos para estar preocupados, el llamado a servir a los demás aún está presente. Al margen de nuestra pobreza, falta de recursos, desacuerdos, conflictos, proyectos y planes, el llamado a centrar nuestra atención en los demás aún está presente. 

    Ésa es la razón por la que este número de Courier/Correo/Courrier aborda dicho tema. La familia que me recibió fue una anfitriona excelente, tanto por su cultura como por la manera en la que vivían su experiencia con Cristo. Que Dios guíe a nuestra comunidad mundial a fin de responder a los demás con la misma actitud, viviendo nuestra experiencia con Dios, ¡siguiendo los pasos de nuestro Señor Jesucristo!

    —César García, secretario general del CMM, desde su oficina en la sede central en Bogotá, Colombia.

    Este artículo apareció por primera vez en Correo/Courier/Courrier en abril de 2016. 

     

  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por sus siglas en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    Visita fraternal a Platanares, Panamá: 6-8 Junio 2016

    Después de un aventurero paseo en barco, bastante húmedo, atravesando la lluvia de la tormenta y las olas del mar que golpeaban nuestro bote, 11 delegados de la asamblea anual de ICOMB fueron recibidos calurosamente por Hermes y Aleida Barrigon. Su casa era espaciosa; la comida era deliciosa; así como la comunión que nos conecta en Cristo.

    Designación del Director Asociado para América Latina

    Rudi Plett, actualmente el delegado de Vereinigung der Mennoniten Brüder Gemeinden Paraguays (la Conferencia Alemana en Paraguay) y Presidente de ICOMB, se convertirá en Director Asociado medio tiempo, bajo David Wiebe. Su misión es dirigir y entrenar a las Iglesias Nacionales Hermanos Menonitas en América Latina, para fortalecerles y conectarles mutuamente, con el fin de brindarles mayor vitalidad y capacidad para su misión. Su otra función a medio tiempo será la de Líder de Equipo Regional para la Misión HM, al servicio de los misioneros en América Latina. Estamos expectantes en ver lo que Dios hará, ya que Él ha estado trabajando de una manera especial, trayendo a Rudi (y su esposa Ruth) a este punto.

  • Bogotá, Colombia – La universidad Conrad Grebel fue la anfitriona de académicos, profesionales, artistas y lideres de iglesias en la inauguración de la Conferencia y Festival Mundial Menonita para la Consolidación de la Paz que se celebró del 9–12 de junio de 2016. En Waterloo, Ontario, Canadá, 203 personas de 20 países (desde Canadá a Colombia a la RD del Congo) asistieron a 30 sesiones simultáneas.

    Tres oradores de plenarias (incluyendo a Fernando Enns de Alemania y Paulus Widjaja de Indonesia, conocidos por su servicio con el Congreso Mundial Menonita), dos oradores en el banquete, siete narradores y seis oyentes dirigieron el evento. Además de ponencias, la conferencia incluyó siete instalaciones de arte, fotografía y sonido, un concierto, una obra de teatro, tres reuniones de adoración y dos círculos de percusión.

    La conferencia examinó una diversidad de temas relacionados con la paz, como la inclusión y la exclusión en la iglesia menonita, desarrollo y medios de subsistencia, historia y teología, la práctica reflexiva, y estudios de casos desde la India hasta Indonesia y desde Laos hasta Sudáfrica.

    La Comisión de Paz del CMM condujo un taller para explorar la idea de una Red Mundial Anabautista de Paz (GAPN, por sus siglas en inglés). Jenny Neme y Robert J. Suderman (ambos de la Comisión de Paz) y Noé Gonzalia (miembro del Comité Asesor de GAPN) compartieron historias para resaltar la importancia de la red, las bendiciones de estar interconectados y el apoyo y la solidaridad que vienen con ella.

    “Hubo un buen espíritu de participación e interés en la idea de la Red Mundial Anabautista de Paz y en la propuesta presentada. La mayoría de los comentarios y preguntas se centraron en la estructura orgánica de la red,” dice Andrew Suderman, secretario de la Comisión de Paz, quien dirigió el taller y el debate posterior. “Es emocionante ver cómo esto ya ha inspirado a algunos a pensar en maneras en las que ya estamos apoyandonos y en como podemos brindarnos apoyo mutuo hacia el futuro en la medida en que la red comienza a tomar forma.”

    El evento incluyó eventos creativos por la noche: el jueves concierto público “Voces por la Paz” y el sábado el estreno de la obra “Yellow Bellies: Una Historia Alternativa de la Segunda Guerra Mundial” en el teatro Theatre of the Beat’s y la clausura con un culto de adoración el domingo por la mañana y la plenaria final.

    Los fondos para el evento provinieron de 23 patrocinadores y donantes, incluyendo el Concilio de Investigación de Ciencias Sociales y Humanidades de Canadá y la Cooperativa de Ahorros y Unión de Crédito Menonita.

    —Comunicado del Congreso Mundial Menonita