Oraciones de gratitud e intercesión

  • Recurso para el ministerio de niños

    Esta historia muestra una manera de adorar con los niños. La autora cree que es muy importante reconocer la conexión de los niños con Dios y el carácter sagrado de aprender de las Escrituras al comienzo de la hora del cuento. Sus preguntas llenas de curiosidad no requieren respuestas verbales; más bien abren el proceso del pensamiento teológico del niño. A veces se dan conversaciones maravillosas, pero está bien confiar en que estas preguntas puedan suscitar la acción silenciosa del Espíritu Santo en el corazón y la mente del niño.

     

    Hacer las paces

    Autora: Elsie Rempel

    Iglesia: Iglesia Menonita de Charleswood, Winnipeg, Manitoba, Canadá

    Tema: Jesús quiere que resolvamos nuestras diferencias rápidamente

    Texto bíblico: Mateo 5:22–25

     

    Actividad para reunir a los niños

    Dé la bienvenida a los niños a medida que vayan llegando y exprese lo mucho que le motiva estar con ellos a la hora de los niños. Acomódense para así estar conscientes de aquel lugar en nuestro interior donde sabemos que Dios está cerca.

    Después de una pausa, pregúnteles a los niños si alguno se metió en una pelea durante la última semana. ¿Alguno de ellos pidió perdón e hizo las paces para poder jugar juntos de nuevo? Pregúntense por qué podría llegar a ser tan difícil y tan importante resolver las diferencias.

    Aclare que la lectura del evangelio de hoy se encuentra en Mateo 5, y que habla sobre hacer las paces o resolver las diferencias. Léales los versículos 22 al 25. Permita que los niños mediten un poco sobre las palabras de las Escrituras antes de comenzar la historia.

     

    Historia

    Miguel era un niño a quien le costaba vivir según las reglas. Quería cooperar con sus maestros y compañeros de juego, pero antes de que se diera cuenta, sucedían cosas que le hacían enojar. Cuando se enojaba, se olvidaba de las reglas y agredía a los demás. En un santiamén, estaba en problemas y el maestro o el director le pedían que explicara lo que había hecho, y qué haría mejor la próxima vez que sucediera algo similar. A veces les pedían a sus padres que hablaran en casa con él sobre el problema.

    A Miguel no le gustaba estar en problemas. No le gustaba para nada. Se preguntaba por qué había tantas reglas. A veces se preguntaba por qué se enojaba tanto mientras que otras personas de su clase simplemente seguían jugando. Un día, una de esas chicas a la que nunca atrapaban haciendo cosas desagradables, lo había molestado durante el recreo por ser un buscapleitos. Antes de darse cuenta, le había golpeado la nariz, y como ustedes adivinarán, ella lo delató, y él estaba nuevamente en problemas.

    Esa noche, después de la cena, su padre llevó a Miguel a dar un paseo y le preguntó cómo se sentía meterse en problemas. Miguel le dijo lo mucho que odiaba eso y cómo se burlaban de él por ser un buscapleitos. Caminaron en silencio durante un buen rato. Luego se preguntaron si Miguel podía idear algunas tácticas que le facilitaran seguir las reglas. Su padre recordó algunas que le habían ayudado cuando estaba en la escuela.

    Decidieron hacer una pulsera de tácticas de paz para Miguel, hecha de cuerda. Hicieron un nudo en la pulsera por cada táctica que se les había ocurrido, que fueron unas cuantas.

    A Miguel le alegró saber que había tantas buenas tácticas para no meterse en problemas. Incluso agregaron una para hacer las paces rápidamente, diciendo: “Lo siento. No quería lastimarte”. En caso de que le hiciera daño a alguien, esa táctica podría ayudarlo a resolver el problema antes de que los maestros se involucraran.

    Lo que más le gustó de hacer esta pulsera era que le ayudó a saber que su padre lo amaba y entendía su problema. Sabía que su padre oraría por él mientras probaba sus nuevas tácticas en la escuela.

    A la mañana siguiente, Miguel se puso la pulsera para ir a la escuela, y su papá oró. Miguel sintió que tenía un protector poderoso en la muñeca. La chica a la que nunca atrapaban, vino a molestarlo otra vez. Pero, en lugar de levantar los puños para golpearla, Miguel tocó la pulsera y recordó las tácticas de las que había hablado con su papá. Le sonrió a la chica y se alejó.

     

    Preguntas para pensar

    • Preguntémonos, ¿qué tácticas tenían para no meterse en problemas?
    • Preguntémonos, ¿por qué a algunas personas les resulta difícil cumplir con las reglas, mientras que a otras les resulta fácil?
    • Preguntémonos, ¿cómo podemos resolver las diferencias rápidamente en lugar de meternos en problemas?

     

    Oración

    Jesús, te damos gracias por personas como Miguel y su padre, que aprenden tácticas que les ayudan a llevarse bien con los demás. Gracias por enseñarnos a resolver nuestras diferencias rápidamente. Por favor, ayúdanos también a pensar en tácticas para llevarnos bien con los demás. Amén.

     

    —Elsie Rempel, tiene una maestría en Teología, se dedicó a la formación cristiana para la Iglesia Menonita de Canadá (2012–2015) y ha compartido cultos con niños por décadas. Su enfoque actual es con niños de preescolar. Esta historia para niños forma parte de un archivo más amplio de historias de la Iglesia Menonita de Canadá, disponible como un recurso descargable para maestros y pastores.

    Ilustra por Yosephine Sulistyorini

     

    Haga clic aquí para más información en inglés

  • “Un capítulo de mi historia se escribió mientras estaba con YAMEN,” dice Diana Martínez. La joven líder de iglesia de Colombia quien sirvió como asistente educativa en Casa Hogar Belén, un hogar de niños en Managua, Nicaragua, a través de YAMEN 2017–2018

    YAMEN (Red de Intercambio de Jóvenes Anabautistas Menonitas) es un programa conjunto del Comité Central Menonita (CCM) y el Congreso Mundial Menonita (CMM). Los participantes, de 18 a 30 años de edad, de fuera de Canadá y los Estados Unidos, prestan servicio durante un año en ministerios o empresas en una cultura diferente a la suya.

    Durante este año de desafíos y falta de familiaridad, los participantes de YAMEN experimentan a Dios como protector, proveedor y padre.

    “Durante este tiempo he logrado desarrollar una cercanía más profunda y una dependencia que me hace sentir tan bien, tan relajada y llena de paz”, afirma Gloria Blanco, miembro del Centro de Discipulado Cristiano (iglesia menonita) en Nicaragua, quien se encuentra sirviendo en la Comisión de Acción Social Menonita (CASM) en Honduras.

    Chaambwa Siachiwena en Mount Hallasan, Jeju Island, Corea del Sur.

    Confiar en los dones

    “Tuve que confiar en los dones que Dios me ha dado”, expresa Diana Martínez, quien aprendió de memoria Salmos 32:8 en preparación para su año de servicio. “Cuando pones a disposición tu tiempo y tu corazón al servicio de los demás, el Señor te usa de maneras que nunca podrías imaginar”.

    La participante de YAMEN de Cambodia, Malin Yem, llevó a la obra en Haití 2018–2019 la cita “El hecho de que en la vida pueda suceder cualquier cosa bajo la dirección de Dios me recuerda que debo estar preparada para cosas nuevas”. “Me recuerda que cada segundo, Dios está aquí conmigo: ayudándome, protegiéndome, enseñándome y otras mil cosas más que ni siquiera puedo nombrar”, comenta ella.

    En el río de la vida

    Las palabras de Romanos 12:14–18 le hablaron a Diana Martínez en tiempos de incertidumbre. “El estar en paz con el mundo es algo que solo puede convertirse en realidad en mi vida al grado que pueda tener una relación sincera con Dios”.

    Diana Martínez quedó impresionada con la hospitalidad y la sencillez de corazón de la cultura anfitriona.

    Ella dice, “Cuando podemos dar y valorar lo que otros pueden aportar, sin preocuparnos por los trasfondos culturales, las nacionalidades, la raza o el idioma, entonces estamos haciendo realidad la idea de ser un cuerpo con Cristo como la cabeza”.

    Comunicado conjunto del Congreso Mundial Menonita y el Comité Central Menonita

    NombrePaís de origenSirviendo en
    Danika SaucedoBoliviaColombia
    Diana HurtadoBoliviaHonduras
    Guy Hermann OulonBurkina FasoUganda
    Malin YemCamboyaHaití
    Phalyn SanCamboya
    Mozambique/Zimbabue
    Sammady KeangCamboyaZambia
    Juanjuan JiangChinaCamboya
    Ana GuazaColombiaBolivia
    Cris LucumiColombiaHonduras
    Kendri MastakiRepública Democrática del CongoBurkina Faso
    Sandi NatarenoGuatemalaBolivia
    Nancy Cecile ValleHondurasEcuador
    Sarvada TuduIndiaNepal
    Trizah KashyapIndiaZimbabue
    Alexandro MarthinIndonesiaColombia
    Grace RatihIndonesiaLaos
    Chansamai XongLaosCamboya
    Khammoun XayalathLaosIndonesia
    Molula MatobaLesotoCamboya
    Gerhard Neufeld PetersMéxicoBolivia
    Jessica MayaMéxicoGuatemala
    Cicilia MarioMozambiqueMéxico
    Salina BhandariNepalMozambique/Zimbabue
    Gloria Elieth BlancoNicaraguaHonduras
    Jackson OkohNigeriaChad
    Melusi MananaSwazilandiaColombia
    Chaambwa SiachiwenaZambiaCorea del Sur
  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por su sigla en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    La Iglesia en Burundi – informe de viaje de Victor Wiens, Coordinador de Equipos de ICOMB.

    Justo al sur de Uganda, y al lado de Ruanda, se encuentra el pequeño país de Burundi. Sabiendo que nuestro Dios ama trabajar a través de gente pequeña y lugares pequeños, esperaba grandes bendiciones – y no me decepcionó. Multiply tiene un equipo en Burundi desde 2014. Han estado trabajando con un ministerio burundés llamado Cosecha para Cristo en discipulado, desarrollo escolar y entrenamiento de trabajadores. A partir de este ministerio, se ha desarrollado una red interdenominacional de iglesias independientes, la Red Antioquía, en aras de la capacitación y el apoyo mutuo. Dado que su formación tiene un fuerte componente misionero, fui invitado a dar la misma presentación sobre los grupos de personas no alcanzadas que di en la Consulta del ICOMB en Tailandia (2017). El punto culminante de esta visita (del 6 al 11 de marzo) para mí fue una reunión con unos diez pastores de cuatro pequeñas denominaciones que están considerando pasar de ser una red, a convertirse en una familia nacional y eventualmente conectarse con ICOMB. Tanto sus conversaciones internas como sus vínculos con ICOMB se encuentran en una fase temprana, pero existe un gran potencial en este pequeño país.

  • “Celebramos con entusiasmo que somos una comunidad de fe Cristo céntrica, sin fronteras, porque al ser parte del Congreso Mundial Menonita, nos unimos fraternalmente con 107 iglesias nacionales y una asociación internacional anabautistas y menonitas en 58 diferentes países del mundo”, afirmó Maykol Luis García Morelli, presidente de la Asociación de Iglesias Cristianas Menonitas de Costa Rica, en tanto que daba sus palabras de bienvenida a los líderes del Congreso Mundial Menonita y a los invitados locales al evento de Renovación 2027: “En pos de la justicia: migración en la historia anabautista-menonita”, el 6 de abril de 2019 en la iglesia Vida Abundante en San Rafael de Heredia, Costa Rica.

    Renovación 2027 constituye un conjunto de eventos a lo largo de diez años, para conmemorar el quincentenario de los comienzos del movimiento anabautista. Cada año, las iglesias locales de una región diferente del mundo, son sede del evento.

    En pos de la justicia

    “Tomamos las enseñanzas de Jesús muy seriamente”, afirmó el miembro del Comité Ejecutivo Carlos Martínez García quien dio un testimonio sobre como la conferencia de Iglesias Evangélicas Anabautistas Menonitas de México (CIEAMM) trabaja con personas desplazadas. Foto: Len Rempel

    “La tradición Anabautista nos invita a ser fieles en el seguimiento a Jesús y su evangelio, ante la crisis mundial de: guerras, destrucción, violencia e injusticia…. Donde muchas personas deben migrar dejando su propio hogar, por lo tanto, dentro de este Acto, desarrollaremos el tema: ‘En Pos de la Justicia’”, explicó Maykol Luis García Morelli.

    Un grupo de alabanza de Costa Rica y uno de baile folclórico tradicional, inauguraron el día al cual asistieron cerca de 450 personas, incluyendo miembros directivos del CMM, miembros del comité ejecutivo, del personal, del comité de YABs y visitantes para cantar y adorar juntos. La líder eclesial Cindy Alpizar fue la anfitriona del Evento.

    Los colaboradores latinoamericanas Belinda Rodríguez y Jaime Prieto abordaron el contexto teológico e histórico del evento.

    Belinda Rodríguez relató algunas experiencias de migración forzada en Honduras, diciendo, “Para los hijos de Dios, él tiene una demanda de amor y obediencia. ‘Cuando el extranjero morare con vosotros en vuestra tierra, país, ciudad etc. No lo trates mal…’”

    “Las enseñanzas de Jesús, las experiencias migratorias de nuestra tradición anabautista-menonita, y los cantos del migrante, deben entonces, llevarnos a la acción pastoral”, señaló Jaime Adrián Prieto Valladares, un historiador menonita originario de Costa Rica, quien organizo su presentación alrededor de un poema escrito por Carlos Drummond de Andrade.

    “¿Cómo contribuiremos desde las Iglesias para ofrecer un futuro mejor a los migrantes, sus niños y niñas? ¿Será posible que podamos imitar y seguir a Jesús en el camino de los migrantes? ¿Permitiremos la unción de su Santo Espíritu para crear y cantar canciones a las niñas y niños migrantes, que les permita soñar en paz?”

    Encontrando un hogar

    Los bailarines folclóricos de una comunidad de jubilados en San Rafael trajeron el sabor local, con la danza tradicional costarricense, al evento. Foto: Henk Stenvers

    Desde cada región continental, los oradores compartieron un testimonio de desafío y esperanza.

    “Aprendí que pertenecer es una calle de doble sentido”, expresó la Directora de Eventos Internacionales Liesa Unger, quien se mudó de Alemanía a Siberia cuando era niña. “El hecho de que yo pertenezca o no, no solo depende de los demás quienes necesitan aceptarme, sino que también depende de mí, al aceptar o no la invitación”.

    “La historia de la migración, es una historia que todos compartimos como hermanos y hermanas en un reino eterno”, comentó la representante de YABs (Jóvenes Anabautistas) para Norteamérica, Larissa Swarts. “Nuestra identidad espiritual es la de extranjeros en una tierra extraña, en un peregrinaje para alcanzar nuestro verdadero hogar”.

    “No importa cuáles sean los caminos del enemigo, no olvidemos que nuestro Dios es el Dios de la restauración”, expresó Paul Phinehas, representante al Comité Ejecutivo de la India, quien se centró en la historia de José en Génesis para enfatizar el papel de la familia en el proceso de restauración de Dios.

    Zaida López de Costa Rica ofreció un reto: “Cuando nos encontremos con un migrante en nuestro país pensemos: ¿cómo me gustaría ser tratado si yo estuviera en su lugar? Y en lugar de discriminar extendemos una mano amiga, ellos son una oportunidad para compartir del amor de Dios”.

    Alabanza y oración

    Para cerrar el evento, los participantes se reunieron en grupos, con personas con las cuales no se conocían antes, para orar por los países latinoamericanos con la mayor tasa de migración forzada. Foto: Henk Stenvers

    Los líderes de la iglesia costarricense actuales hicieron un reconocimiento a los ancianos que tuvieron un impacto en el desarrollo de la iglesia en el país: Hugo Rodríguez; Orlando Carvajal; Martín Matamoros; Anabelle González; Sandra Campos; María Rodríguez (fallecida); e Isabel Soto de Guadalupe (fallecida).

    Para cerrar el evento, los participantes se reunieron en grupos, con personas con las cuales no se conocían antes, para orar por los países latinoamericanos con la mayor tasa de migración forzada.

    En nombre de Samson Omondi, representante del Comité Ejecutivo de África, que no pudo asistir, Rebecca Osiro compartió ejemplos de atención a los refugiados por parte de Eastleigh Fellowship Center de la Iglesia Menonita de Kenia en Nairobi, una iglesia y un centro de alcance: “Sé intencional y mantente alerta frente a la situación de los refugiados, inmigrantes y migrantes durante tu rutina diaria”, escribió Samson Omondi. “Ora… [y] no te sorprendas cuando Dios ponga tales oportunidades en tu camino”.

    —Kristina Toews y Karla Braun, un comunicado de prensa del Congreso Mundial Menonita.

  • Una tarea de escuela dominical en la década de los 40, de intercambiar cartas con un misionero, fue lo que originó que una mujer canadiense invirtiera el resto de su vida en oración por India.

    Una maestra de escuela dominical de la iglesia Elmira Mennonite Church le asignó a la adolescente Erla Buehler la tarea de escribirle a Lena Graber, una enfermera registrada de Iowa, EE.UU., quien servía, con la que ahora se llama Red Menonita de Misiones, en Dhamtari Christian Hospital en India.

    “Así comenzó mi interés por India,” escribe Erla Buehler en su carta al CMM.

    “La chispa continuó creciendo convirtiéndose en una llama”, señala Buehler. La misma creció a medida que aprendía sobre William Carey y el movimiento misionero, en el instituto bíblico Ontario Mennonite Bible School en los años 50.

    Su sueño de visitar India se hizo realidad en 1997, cuando el esposo de su sobrina nacido en India, dirigió un tour para la Asamblea del Congreso Mundial Menonita en Kolkata. Escuchar a los ponentes hablar sobre el tema “Hear what the Spirit is saying to the Churches” (Oigan lo que el Espíritu dice a las iglesias) fue “inspirador, alentador, maravilloso”.

    “La Asamblea Esparcida, además de la Reunida fue también reveladora”, escribe Erla Buehler. El grupo visitó el centro del Comité Central Menonita y el proyecto de un orfanato.

    Lena Graber

    Señala, “también tuvimos el privilegio de ser repartidos en casas particulares”. “Todavía me asombra cómo el Espíritu Santo estuvo activo al preparar todo eso”.

    Cuando regresó a casa, Erla Buehler ubicó a Lena Graber y reanudó la correspondencia con ella. Alabó a Dios al enterarse de la labor de Lena Graber en la creación de escuelas de enfermería en India y en Nepal, donde fue una de las primeras obreras de la Misión de los Hermanos Menonitas.

    En el presente, Erla Buehler se informa sobre la labor de la iglesia por medio de los correos electrónicos de la Red de Oración del CMM. Por pedido especial, los recibe también en forma impresa por correo cada dos meses.

    “Todos estos años y hasta el día de hoy todavía hay una maravillosa red de creyentes fieles que oran por la edificación del reino de Dios”. Esta mujer de 88 años de edad es parte de la misma.

    —Karla Braun, Comunicado del Congreso Mundial Menonita

  • Laos e Indonesia están ubicados en el sudeste asiático, por lo tanto algunas comidas son similares. Pero, en ocaciones como laosiana viviendo y enseñando inglés en YAMEN, Indonesia, extraño la comida de Laos.

    Cuando preparo la comida de casa me ayuda a no sentir tanta nostalgia. Cocinar comida de Laos, para compartir con otros, me ayuda a compartir el amor de Dios con las personas que me rodean. Disfruto cuando comentan que la comida de Laos es deliciosa.

    Ensalada de pepinos (para 3 personas)

    Ingredientes

    • 2 pepinos medianos
    • 4 tomates pequeños
    • 4 chiles frescos
    • 1 diente de ajo
    • 2 cucharadas de lima
    • 1 cucharada de azúcar
    • 2 cucharadas de salsa de pescado
    • 1 cucharadita de pasta de camarón (la traje de Laos) Windhi Ratna Asari

    Instrucciones

    • Cortar los pepinos y los tomates en pedacitos.
    • Mezclar los chiles frescos, el ajo, el azúcar y la pasta de camarón.
    • Añadir los pepinos y los tomates picados.
    • Añadir la lima y la salsa de pescado, luego mezclar todos los ingredientes.
    • Probar el sabor; añadir más ingredientes según sea necesario.

    Combina bien con pescado o pollo a la parrilla.

    —Khammoun Xayalath (Moon), de la Iglesia Lao Evangelical Church, sirve cono profesora de inglés y trabajadora comunitaria. Durante su año con YAMEN, Indonesia, ella asiste a los cultos de adoración en la Iglesia Dorang Javanese Evangelical Church, una iglesia menonita de Java GITJ (Gereja Injili di Tanah Jawa

     

    YAMEN es un programa conjunto entre el Comité Central Menonita (CCM) y el Congreso Mundial Menonita (CMM)

  • Durante su conferencia anual de 2018, la Iglesia Menonita de África Occidental (MCWA, por sus siglas en inglés) celebró a sus primeros líderes con credenciales: Adriano MBackeh, Sangpierre Mendy, Daniel Djin-ale y Gibby Mane.

    Más de 200 asistentes alegres – la mayor asistencia para este tipo de evento – colmaron el nuevo centro de reuniones de la Iglesia Menonita de Catel durante la conferencia anual de MCWA que se llevó a cabo del 26 al 31 de diciembre de 2018.

    El 27 de enero de 2019, Dijn-ale y Mane fueron ordenados en la congregación de Catel para servir a la iglesia en Guinea-Bissau. MBackeh y Mendy serán ordenados en Gambia el 10 de febrero de 2019.

    Daniel Djin-ale (a la derecha) es instalado como pastor con credencial, el 27 de enero en la Iglesia Menonita de Catel en Guinea-Bissau. El padre de Dijn-ale (a la izquierda), jefe de la aldea y partidario del Islam, se une a él para el evento. Foto: Beryl Forrester

    MBackeh también se dirigió a la conferencia anual como orador principal, el tema fue “Jesús: Nuestro modelo de líder siervo”.

    “El liderazgo cristiano está destinado a ser un servicio, no una forma de señorío”, señaló MBackeh. “Así como Jesús se entregó voluntariamente, los líderes de la iglesia también deben seguir hoy ese ejemplo, en lugar de buscar el honor y el prestigio de su rebaño”.

    El obrero voluntario de Misiones Menonitas del Este, Beryl Forrester, indicó que el proceso de otorgar credenciales es completamente supervisado bajo la vigilancia de la MCWA. La iglesia recibió la contribución e información por parte de la iglesia miembro de la LMC — A Fellowship of Anabaptist Churches (Conferencia Menonita de Lancaster: Una fraternidad de iglesias anabautistas) del CMM; sin embargo, este movimiento afirma que el liderazgo de estos líderes locales, ya no está bajo la supervisión de los misioneros.

    La congregación de Catel – la cual “se encargó completamente de la organización y dirección del programa” según Forrester – completó la construcción de su edificio, lo que les llevó años, antes de servir como anfitriona de la conferencia anual.

    MCWA, socia de Misiones Menonitas del Este, ha sido parte de una presencia menonita en la gran región de África Occidental desde el año 2000.

    — Un comunicado del CMM por Micah Brickner de Misiones Menonitas del Este.

  • El secretario general César García y la asistente ejecutiva Sandra Báez Rojas del Congreso Mundial Menonita (CMM) se trasladaron a Canadá en Febrero de 2019, con el fin de trabajar desde la oficina de Kitchener, Ontario.

    El CMM es una comunión internacional de iglesias afines al anabautismo, con miembros alrededor del mundo. Los representantes regionales generan comunicación bidireccional entre las iglesias locales y el cuerpo anabautista mundial a través de la oración, el compartir de historias, el intercambio de noticias y la construcción de relaciones. Las cuatro Comisiones y el número creciente de redes están compuestas por expertos y líderes eclesiales de nuestras iglesias miembros en todos los continentes. Las reuniones presenciales se complementan regularmente con la comunicación virtual.

    César García es el primer secretario general del Sur Global. Tras la designación de García en 2012, la segunda oficina de la secretaría se mudó desde Estrasburgo, Francia (abierta en 1990) a Bogotá, Colombia. El primer secretario asalariado del CMM, Paul N. Kraybill, fue nombrado en 1973. La oficina de Kitchener fue establecida en 1992.

    Debido a la constante necesidad de que el secretario general se conecte con las iglesias anabautistas de alrededor del mundo y que represente a los anabautistas a nivel global, frente a otras comuniones cristianas mundiales, los miembros directivos del CMM, después de un proceso de discernimiento que comenzaron los líderes del CMM en 2014, determinaron que sería más práctico tener una ubicación más cercana a las rutas de vuelo frecuentes y a una mayor parte de la membrecía.

    “Reconocemos que dondequiera que se encuentre el secretario general, habrá ventajas y desventajas”, afirma el presidente del CMM, J. Nelson Kraybill. “Con este traslado, hay una pérdida de lo que simboliza que nuestro secretario general venga del y viva en el Sur Global. Sin embargo, mirándolo bien, el hecho de que haya mayor facilidad para realizar viajes internacionales desde un centro de operaciones ubicado en Norteamérica hace que el trabajo sea más sostenible”.

    La oficina de Bogotá, en colaboración con el Comité Central Menonita, permanecerá en su lugar para la directora administrativa Anna Sorgius, así como para el asistente administrativo Nelson Martínez y el representante regional para la región andina Pablo Stucky. La directora de comunicaciones, Kristina Toews, también se mudó a Canadá en febrero con el fin de trabajar desde una oficina en casa en Abbotsford, B.C.

    Vivir cerca del centro metropolitano de Toronto con su concurrido aeropuerto internacional mejorará la disponibilidad de comunicación del secretario general.

    —Comunicado del Congreso Mundial Menonita

  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por su sigla en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    La Iglesia en Oriente Medio

    Recientemente un grupo de hermanos y hermanas en un país del Medio Oriente se reunieron con Heinrich Rempel (líder de BTG; co-líder de MB Mission Europa) para aprender sobre el liderazgo de la iglesia. Al menos siete localidades estuvieron representadas, incluyendo aquellas que vinieron de Moldavia y Ucrania. Fueron alentados y equipados. Este grupo (AHT) está pidiendo oración y acompañamiento, y es considerada una conferencia emergente de ICOMB

  • Así como las partes del corazón, las cuatro comisiones del CMM sirven a la comunidad mundial de iglesias afines al anabautismo, en las áreas de diaconado, fe y vida, paz y misiones. Las comisiones preparan materiales para la consideración del Concilio General, brindan guía y proponen recursos a las iglesias miembros, además, propician redes y compañerismo en relación al CMM trabajando juntos en temas de interés y enfoque común. A continuación, una de las comisiones comparte un mensaje de la perspectiva de su ministerio.


    Ya había oscurecido cuando nos salimos de la carretera principal hacia un sendero lleno de baches a través del bosque.

    Una delegación de la Comisión de Diáconos del CMM estaba visitando a hermanos y hermanas en Gana, en el año 2010. Nuestro plan era visitar una pequeña congregación en Pimpimsu por la mañana. Sin embargo, debido a circunstancias imprevistas, solo pudimos llegar al lugar ya entrada la tarde.

    Después de avanzar por 10 minutos, llegamos a la iglesia. Un pequeño grupo de personas nos estaba esperando en el humilde edificio. Escuchamos que habían estado esperando todo el día. Muchos se habían ido a casa. Aun así, nos recibieron con cantos, tocando los tambores y con oraciones.

    No había electricidad. La única luz provenía de unas pocas linternas.

    Desde el lugar donde estaba sentado al lado de la pared, podía ver el bosque oscuro. Para mi sorpresa, vi luces danzantes que se aproximaban. Al principio, no tenía ni idea de qué era eso, pero cuando se fueron acercando, lo entendí. Eran los otros miembros de la iglesia quienes volvieron cuando escucharon que habíamos llegado.

    Lentamente, ingresaron al edificio, uno por uno cada uno, cada cual con su propia linternita. Con la llegada de cada miembro había un poco más de luz. Al final, la iglesia estaba llena y había suficiente luz para celebrar.

    Para mí, esta experiencia es una imagen maravillosa de lo que significa ser una iglesia anabautista en la cual la congregación de creyentes es un punto focal. Las personas que se han comprometido con Jesús a través de su bautismo, se reúnen en la congregación para aprender, adorar, servir, dar testimonio y tener un vistazo del reino de Dios al estar juntos en paz.

    Cada miembro trae un poquito más de luz a la iglesia cuando él o ella se encuentra allí, pero cuando alguien falta, la iglesia es un poquito más oscura. Por lo tanto, en su totalidad y en forma individual, cada miembro es necesario para que la iglesia esté completamente iluminada. Cada persona es igualmente importante porque cada una lleva consigo una luz.

    Puede ocurrir que en ciertas ocasiones su propia luz no sea muy fuerte. Usted puede pasar por dificultades en la vida y comenzar a dudar o incluso sentir que está perdiendo su fe. En dichas circunstancias, la luz de otros puede ayudarle a continuar y encontrar más combustible para su luz.

    En caso contrario, cuando todo va bien y usted cree que no necesita de los demás, su luz sigue siendo necesaria para irradiar a los otros. Compartimos con aquellos quienes están en necesidad.

    En eso radica la importancia de ser una congregación a nivel local y la importancia del Congreso Mundial Menonita a nivel mundial.

    Tanto en los tiempos de persecución y migración en la historia anabautista, como en la actualidad, nos necesitamos unos a otros para mantener nuestra luz brillando.

    En cierto sentido, la Comisión de Diáconos trae luz a las iglesias que se encuentran en necesidad. En momentos de celebración, los diáconos también pueden recibir la luz para compartirla con la familia mundial de fe.

    De esta manera, la comisión de Diáconos comparte las historias de las diferentes iglesias anabautistas, de modo que, a pesar de estar esparcidos alrededor del mundo por causa de la migración y la misión, y a pesar de nuestras expresiones de fe que a veces pueden ser muy diferentes, podamos ser uno en el Espíritu como el cuerpo de Cristo.

    —Henk Stenvers es secretario de la Comisión de Diáconos del CMM.

    *La Red de Oración enviará un correo electrónico cada dos meses, este correo contendrá de cuatro a cinco oraciones. Es posible que también haya correos adicionales cuando surja un llamado de oración urgente. Los correos electrónicos están disponibles en inglés, español o francés. Si desea compartir un motivo de oración con nosotros, por favor escriba a oraciones@mwc-cmm.org

  • En Renovación 2027, El Espíritu Santo Transformándonos en Kisumu, Kenia, el 21 de abril de 2018, varias personas compartieron el testimonio de una experiencia acerca de la obra del Espíritu cambiando a las personas dentro la iglesia. Varias de los artículos en esta sección han sido adaptadas a partir de esas presentaciones. Algunos testimonios adicionales también cuentan sobre la obra del Espíritu Santo transformando las vidas.


    ¿Cómo podría hablar en forma adecuada sobre el Espíritu Santo? A menudo la obra del Espíritu Santo en mi vida ha sido convincentemente real, pero también ha desafiado mi capacidad para entenderla, y mucho más para expresarla.

    He visto al Espíritu Santo obrar en la vida de la iglesia guiando a grupos desconcertados a llegar a una decisión. He visto al Espíritu Santo obrar en el mundo incrédulo sorprendiendo la incredulidad con la presencia de Dios. Ciertamente, he visto al Espíritu Santo obrar en mi propia vida de maneras predecibles tratando de hacer que sea una persona menos egoísta y destructiva.

    La obra del Espíritu Santo puede ser la dimensión más subjetiva e inefable de nuestra experiencia espiritual. Siempre me ha fascinado Romanos 8,26: “Así mismo, en nuestra debilidad el Espíritu acude a ayudarnos. No sabemos qué pedir, pero el Espíritu mismo intercede por nosotros con gemidos que no pueden expresarse con palabras”.

    He experimentado esto como una persona que planta iglesias.

    Una temporada desalentadora

    Fui pastor en un entorno urbano. Esta fue una historia mixta: la mitad de la congregación había sido fruto del trabajo de plantación de iglesias, la otra mitad estaba parcialmente establecida, pero era una congregación pequeña y a menudo inestable. Allí también se encontraban algunas personas sobresalientes.

    Trabajando en ese entorno me volví relativamente pobre, y no se trataba de la pobreza romántica, estaba tratando de trabajar con personas que sufrían problemas aparentemente sin salida. Las cosas no iban bien, sentí que tenían poco respeto hacia el papel pastoral, pero luego sentí que para un pastor que planta iglesias el ser sensible a esto sería una excusa muy débil.

    ¿Por qué no podría estar más confiado y creer que Dios estaba aquí y que yo estaba haciendo lo que realmente importaba?

    En todo caso, la vida no parecía encauzarse hacia un camino que llevaría al éxito, al bienestar, al amor y la calidez de una comunidad feliz. Era más bien como imaginarse lo que sería un matrimonio difícil. Ciertamente no era lo que yo había esperado cuando dejé mi vida de aspirante a músico para convertirme en una persona que planta iglesias.

    Sentí como que estaba desperdiciando años (no meses, semanas o días), talento (en la forma en que estaba) y energía. Más aún, se sentía como que simplemente me estaba agotando y que no tenía nada apreciable para mostrar. Tenía poco poder o confort material para ofrecer a mi familia la cual experimentaba todo esto junto conmigo.

    Dolió, y lo digo sin titubeos, ¡todavía duele!

    Una visión de abundancia

    En una cálida noche de verano sureña, mirando hacia la entrada de mi cochera llena de aceite medité, y mayormente me quejé al respecto. Mitad en oración y mitad en introspección, vi una imagen de agua siendo vertida en un balde con agujero en el fondo y esta agua corría por la entrada de mi cochera (en todas las direcciones).

    Había llegado al punto de sentir cierta apatía hacia la apatía misma. Todo parecía triste e inútil, pero ese parecía ser mi destino. ¿Dónde estaba Dios? ¿Por qué desperdiciaría “nuestro” tiempo y recursos de esa manera?

    En ese momento, creo que el Espíritu Santo me habló. No escuché palabras, pero las impresiones parecían ser auténticas y no solo una creación conveniente de mi propia imaginación dando vueltas.

    Mis fuerzas y recursos son ciertamente limitados e imperfectos, pero el agua viva de la Palabra de Dios que yo estaba tratando de derramar sobre el mundo no es un recurso finito; no se puede agotar y de todos modos no me pertenece. La fuente de esta agua no se iba a agotar. ¿Quién sabe dónde va a parar toda esta agua derramada en el piso? Era parte de una historia más amplia que puedo o no entender.

    Mi situación no cambió y de alguna manera, sin embargo, descubrí que aunque era frustrante podía experimentar la paz de Dios. Esa paz todavía puede ser esquiva o vaga, sin embargo, era real y podría afirmarse cuando fuere necesario.

    Desde entonces, en varias ocasiones he tenido que recordarme a mí mismo y volver a aprender esta verdad sobre la presencia de Dios, pero al hacerlo, generalmente vuelvo a pensar en el agua que salía del balde esa noche en la que meditaba.

    Sobrepasó todo entendimiento, y todavía lo hace.

    —Reuben Sairs es instructor y bibliotecario en Rosedale Bible College y pastor asociado en London Christian Fellowship en London, Ohio, una iglesia CMC (Conferencia Menonita Conservadora).

    Este artículo apareció por primera vez en Correo/Courier/Courrier en octubre de 2018.

  • En Renovación 2027, El Espíritu Santo Transformándonos en Kisumu, Kenia, el 21 de abril de 2018, varias personas compartieron el testimonio de una experiencia acerca de la obra del Espíritu cambiando a las personas dentro la iglesia. Varias de los artículos en esta sección han sido adaptadas a partir de esas presentaciones. Algunos testimonios adicionales también cuentan sobre la obra del Espíritu Santo transformando las vidas.


    ¿Podemos hablar de una misión sin el Espíritu Santo, o hablar sobre el Espíritu Santo pero ignorar la misión?

    Recuerdo la primera vez que aprendí sobre misiones en la Comunidad Cristiana InterVarsity en Jakarta. Estaba en mi segundo año de universidad cuando escuché hablar al Rev. Dr. Mangapul Sagala, quien dijo: “El Espíritu Santo es para la misión”.

    Esta corta oración se quedó grabada en mi corazón y en mi mente.

    Inseparable de la misión

    “Pero cuando venga el Espíritu Santo sobre ustedes, recibirán poder y serán mis testigos tanto en Jerusalén como en toda Judea y Samaria, y hasta los confines de la tierra” (Hechos 1,8).

    Jesús también dijo, “Vayan, pues, a la gente de todas las naciones, y háganlas mis discípulos; bautícenlas en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, y enséñenles a obedecer todo lo que les he mandado a ustedes. Por mi parte, yo estaré con ustedes todos los días, hasta el fin del mundo. (Mateo 28,19–20). La Gran Comisión comienza en forma local hacia lo global.

    Este es el significado de ser un testigo de Jesús. ,No es un mandato fácil pero, el poder del Espíritu Santo nos es dado para estar con nosotros en la realización de esta tarea.

    Cuando el espíritu Santo es derramado, los apóstoles reciben el poder de testificar, con autoridad y señales milagrosas (Hechos 2,32).

    La existencia del Espíritu Santo no puede ser separada del poder dinámico de Dios el cual posibilita los apóstoles (y ahora a nosotros) ser testigos de Jesús.

    Espíritu Santo: Poder para testificar

    Si leemos el libro de Hechos como una unidad, veremos cómo el rol particular del Espíritu Santo, el Dios olvidado, es la temática a lo largo de los Hechos de los Apóstoles. Esto quiere decir, que Hechos es la historia del Espíritu Santo trabajando a través de y en los creyentes, la iglesia primitiva y la iglesia a lo largo de los siglos. Después del evento de pentecostés, el mensaje del evangelio se extendió a Judea, Samaria y hasta los confines de la tierra.

    Pedro, Juan y los apóstoles eran gente común y corriente sin educación (Hechos 4,13). Todos los personajes registrados en los Hechos de los Apóstoles son personas comunes y corrientes dando testimonio de la muerte y resurrección de Jesús. Dios está utilizando gente ordinaria para su labor extraordinaria, equipados con el poder del Espíritu Santo.

    Un testigo valiente

    Recuerdo cuando estaba camino a mi primer viaje misionero, en 1997, a Lampung, South Sumatra. Fui movido en gran manera por el deseo de ser testigo, ya que recién había terminado mi clase de Evangelismo Explosivo ese día.

    Uno de mis amigos y yo decidimos hacer un viaje de 10 días para visitar las iglesias en Lampung para aprender y explorar todo lo relacionado con el ministerio. Estábamos muy apasionados por Dios.

    Viajamos en bus por varias horas, luego continuamos nuestro viaje en barco. Durante las dos horas en las que estábamos en el barco, yo estaba estuve, “Señor, por favor dame una oportunidad para poder conocer a una persona con quien poder compartir acerca de ti”.

    Mientras caminaba y oraba vi a un hombre sentado y cenando solo. Era cerca de la media noche, pero le pedí permiso para sentarme a su lado, él sonrió y me dijo que estaba bien, así que, comencé una conversación.

    Le pregunte, “señor, sé que usted es policía, y solamente quería preguntarle, ¿alguna vez le ha disparado a alguna persona?

    Él se quedó en silencio y me respondió que sí.

    Sin detenerme, le pregunte de nuevo, “¿alguna vez ha matado personas durante su trabajo?”

    De repente bajó la cabeza y respondió que sí.

    ¿Qué fue lo que me permitió a mí (un estudiante en la universidad que estaba emocionado por compartir sobre Jesús) el tener esa valentía de hacerle aquellas preguntas a un oficial de policía? Fue el Espíritu Santo.

    Esa noche, por la gracia y el poder del Espíritu Santo, compartí del evangelio de paz con este oficial de policía. En medio de la noche, en ese barco, guíe al hombre a aceptar a Jesús.

    Después de que nuestro barco llegó al puerto y teníamos que decirnos adiós, le pedí un último permiso, “¿trae un arma con usted?” él dijo que sí. “¿La puedo tocar con mis propias manos?” él dijo: por supuesto…

    Toqué la pistola que estaba debajo de su ropa confirmando que lo que había dicho era verdad. Dije: “Dios, eres increíble, todo se trata de Ti y no de mi”.

    ¿Caminaremos hoy con el Espíritu Santo, y le dejaremos hacer obras poderosas en nosotros?

    —Andi O. Santoso es secretario general de GKMI (Gereja Kristen Muria Indonesia – una de las tres iglesias Menonitas de Indonesia). Este testimonio fue adaptado de El Espíritu Santo y la Misión por Andi O. Santoso, publicado en Berita GKMI (GKMI noticias), Mayo de 2016.

    Este artículo apareció por primera vez en Correo/Courier/Courrier en octubre de 2018.