Oraciones de gratitud e intercesión

  • Testimonio para Renovación 2027: Los anabautistas de hoy

    Renovación 2027 es una serie de eventos que se llevarán a cabo durante 10 años, con la finalidad de conmemorar el aniversario 500 de los inicios del movimiento anabautista. Esta serie destaca a los líderes del movimiento desde épocas históricas hasta el presente.

    Vea también la presentación #1: Una iglesia de Jerusalén en Indonesia.

    Una serie de pastores reemplazó al Reverendo Andreas Parwadi, quien renunció después de un largo tiempo como pastor de la Iglesia GKMI Lamper Mijen en 1984 (Gereja Kristen Muria Indonesia, una iglesia miembro del CMM). El dinámico establecimiento de la iglesia en el área de Semarang fue parte de un movimiento de cristianos Menonitas étnicamente chinos de la zona de Muria quienes compartieron el evangelio principalmente con indonesios javaneses.

    El pastor Javanés Budi Santoso fue aceptado por la congregación en 1996, ordenado como pastor de jóvenes de GKMI Lamper Mijen el 24 de enero del 1999, y luego como pastor el 6 de diciembre del año 2000.

    Los miembros de la congregación GKMI Lamper Mijen provienen en su mayoría de grupos étnicos javaneses. Muchos son antiguos artistas tradicionales javaneses.

    Presentando arte y cultura Javanesa

    El reverendo Budi Santoso quería presentar el arte y la cultura javaneses tradicionales, especialmente Karawitan (música tradicional indonesia) en la iglesia. Santoso comenzó a desarrollar servicios contextuales en GKMI Lamper Mijen.

    A partir del año 2000, el reverendo Budi comenzó a incluir arte tradicional javanés en los momentos públicos de adoración los domingos.

    Cada cinco semanas, los cantos congregacionales van acompañadas de un conjunto de instrumentos de percusión al estilo tradicional indonesio llamado gamelan.

    El teatro tradicional indonesio Wayang Orang Punakawan enseña historias bíblicas y valores Menonitas. Fotos cortesía de GKMI.

    Gamelan y punakawan, (teatro tradicional javanés de marionetas con sombras) también son utilizados para eventos especiales (cumpleaños de la iglesia, celebraciones navideñas, celebraciones de pascua, etc.). Ellos son utilizados para contar historias especiales  de la Biblia o historias que representan valores cristianos, especialmente los Menonitas.

    La presencia del GKMI Lamper Mijen es aceptada por la comunidad que les rodea. Su visión es “Convertirse en una iglesia en crecimiento, sana y fuerte”.

    La reunión general del domingo se lleva a cabo los domingos a las 7 de la mañana. Cerca de 115 personas asisten a los cultos.

    Un nuevo edificio con arquitectura javanesa fue construido en octubre del 2006 e inaugurado el 11 de abril de 2007. Actualmente, GKMI Lamper Mijen es pionera en la construcción de una nueva iglesia en la zona de Ungaran, a unos 18 kilómetros de Semarang.

    GKMI Lamper Mijen es el miembro número 16 del Sínodo de GKMI, que actualmente cuenta con 61 iglesias independientes.

    —Un comunicado del Congreso Mundial Menonita de Paul Gunawan, historiador de GKMI. Traducido del bahasa indonesio por Mark Ryan, redactor jefe de la revista Berita GKMI.

    Vea también la presentación #1: Una iglesia de Jerusalén en Indonesia.

     

  • “Nunca antes el mundo ha necesitado nuestro mensaje como ahora…. Ahora es el momento de arriesgar todo por nuestra creencia de que Jesús es el camino a la paz;… ahora es el momento de vivir lo que hemos expresado”.

    Las palabras de Ron Sider a la Asamblea 11 del Congreso Mundial Menonita reunida en Estrasburgo, Francia, en 1984, dieron lanzamiento a los famosos Christian Peacemaker Teams (Equipos cristianos pacificadores), una organización que utiliza la acción directa no violenta para enfrentar los sistemas de violencia y opresión.

    Las Asambleas tienen lugar cada seis años. Aunque solo representan una faceta de la labor del CMM, estas reuniones “brindan el vehículo principal para la interacción con los anabautistas en otros continentes”, señala César García, secretario general del CMM.

    Conocer viejos y nuevos amigos de todo el mundo mientras se participa en talleres, actividades de servicio, y algo de turismo local, hace que sea una experiencia inolvidable.

    “Las Asambleas propician un sentido de interconexión mundial y aprendizaje mutuo que tiene el potencial de transformar vidas, congregaciones e incluso iglesias nacionales”, menciona César García.

    En las últimas16 Asambleas, los oradores de las plenarias han dejado a los participantes desafíos de cambio de vida.

    “¿Contamos con el valor de pasar de las líneas de retaguardia del pacifismo aislacionista a las líneas de avanzada de la pacificación no violenta?”oró Ron Sider “que con nuestros ojos fijos en el crucificado, la iglesia se atreva a pagar el costo de ser el pueblo reconciliador de Dios en un mundo quebrantado”.

    En la Asamblea anterior en Wichita, Kansas, EE.UU., en 1978, Albert Widjaja de Indonesia hizo un llamado a la justicia económica y climática que resuena hoy con más verdad que nunca.

    “El Reino de Dios no es una entidad estática, sino un movimiento dinámico de un nuevo orden social visible en el cual los miembros ven el llamado de Dios de compartir su amor con los demás, de cuidar al afligido, de defender al indefenso, y de llevar a cabo la justicia en el sistema político y económico mundial, y dejar que su señorío sea conocido en la historia mundial”, afirmó Alberta Widjaja.

    “No podemos permitirnos permanecer neutrales” frente a sistemas opresivos y a la crisis ecológica mundial, señaló. “Deberíamos participar en la acción de Dios, poner de manifiesto su reino como una realidad viviente de la presencia de Dios en la iglesia”.

    En Paraguay en 2009, Nzuzi Mukawa de la RDC continuó esta vena profética. “El profeta Miqueas nos dice que no podemos adorar a Dios y olvidarnos de la justicia social”.

    “En un mundo muy similar a la Judá de Miqueas, la iglesia debe responder al mismo llamado al arrepentimiento, a amar la misericordia y a andar humildemente delante de Dios”, afirmó Nzuzi Mukawa. “Seguir a Jesús claramente significa que tenemos que seguir su camino de justicia. Proclamar la justicia de Dios debe ser parte de nuestra adoración, nuestro discipulado y nuestra misión”.

    “[Nosotros] a menudo fallamos en ver cómo [la justicia] se queda corta dentro de nuestras propias estructuras”, dijo Nzuzi Mukawa a medida que pasó a instar a la iglesia a ordenar mujeres, aceptar el liderazgo de grupos minoritarios, “levantarse y defender” a los niños, apoyar a las mujeres que sufren debido a la violencia sexual y actuar en nombre de los países pobres eliminando la deuda internacional, otorgando más acceso al comercio y el pago de los países ricos por los daños de la contaminación.

    Haciendo también un llamado a la iglesia, de mirar el estado en el que se encuentra su propia casa, en Harrisburg, Pennsylvania, EE.UU., en 2015, la Joven Anabautista (YAB) Remilyn Mondez de las Filipinas, enmarcó su llamado a la unidad con una historia desgarradora del cisma de la iglesia.

    “Dios debe estar sonriendo desde lo alto cuando saborea el dulce aroma de la adoración, subiendo a su trono, ofrecido por sus hijos en todo el mundo”, comentó. “Así que, me pregunto: ¿Llorará Dios cuando esos mismos hijos no pueden ser capaces de caminar juntos en paz? ¿Qué piensa Dios cuando nos ve caminando en conflicto, luchando por la reconciliación, y demasiado a menudo, optando por separarse porque es la mejor opción?”

    Se anticipa que en la próxima Asamblea 17 en Semarang, Indonesia, del 6 al 11 de Julio de 2021 se presenten más llamados proféticos de todo el mundo bajo el tema “seguir a Jesús juntos superando las barreras”.

    —Comunicado del Congreso Mundial Menonita

  • ¿Es la construcción de paz cristiana diferente de otros tipos de reconciliación? ¿Trabajan los anabautistas en la construcción de la paz en modos que los divida? Varias de las 223 personas provenientes de 36 países respondieron a dichas preguntas en la Segunda Conferencia Mundial de Construcción de Paz Menonita-Anabautista en los Países Bajos que tuvo lugar entre el 27 y 29 de junio de 2019.

    Prakash Thankachan

    “Muchas personas alrededor del mundo trabajan en la reconciliación”, afirmó Prakash Thankachan de India, “pero los cristianos tienen una motivación diferente. Jesús dijo: ‘Les doy mi paz, pero no se la doy como la dan los que son del mundo’ (Juan 14:27)”.

    Como diácono ordenado en la iglesia del Norte de India, Prakash trabaja con el Comité Central Menonita formando a otras personas en habilidades para la construcción de paz. Él menciona el relato de 1569, de Dirk Willems, a propósito de una fuga de la prisión en los Países Bajos y el perdón por el tiroteo ocurrido en una escuela Amish en 2006, como ejemplos del testimonio de paz anabautista que lo inspiran en forma especial.

    Marcus Weiand, de la iglesia Libre Evangélica, director del instituto para la Transformación del Conflicto en Bienenberg, Suiza, señala a Jesús. “Lo que he aprendido del anabautismo es el fuerte énfasis en el acercamiento de Dios hacia la humanidad a través de Jesucristo para cuidar de los hambrientos y necesitados. Hoy estamos llamados a seguir a Jesús tan de cerca que nuestros pies deben ensuciarse con el polvo de sus pies”.

    Katherine Torres

    La guerra civil es el contexto de la construcción de la paz encarnada por los anabautistas en Colombia. La abogada Menonita Katherine Torres, coordinadora de Puentes para la Paz, habló de sus esfuerzos para atraer a los cristianos de muchas denominaciones al proceso de paz al acercarse el final de una guerra civil de 60 años en Colombia. Ellos iniciaron diálogos arriesgados con los grupos armados. “En un momento estuvimos en medio del fuego cruzado”, relata ella.

    “La no-violencia es el don de los anabautistas”, comenta Torres. “Los anabautistas trabajan en la construcción de paz partiendo de un fuerte sentido de lo comunitario”.

    Tewodros Beyene

    Etiopía es un ejemplo de testimonio de paz anabautista fundamentado en la comunidad. “Cristo mismo es nuestra paz (Efesios 2)”, expresa Tewodros Beyene, presidente de la iglesia Meserete Kristos (MK), una denominación anabautista. “Es por causa de Cristo que nos reunimos como iglesia”.

    Para romper un ciclo de retribución, los miembros de la iglesia MK brindan capacitación vocacional para que los reclusos puedan funcionar de manera productiva al ser liberados. “Si uno mata a alguien en Etiopia”, explica, “inclusive si cumple una larga condena en prisión, morirá asesinado por venganza tan pronto como sea liberado”. La iglesia trabaja preparando a las comunidades de origen de los prisioneros para que los reciban.

    Los miembros de la iglesia no dudan en explicarles a otros que hacen este trabajo porque Cristo vino a reconciliarnos. “Cada año, unas 1.200 personas entregan su vida a Cristo a través de este ministerio”, afirma Tewodros.

    “El trabajo de paz de la iglesia debe tener una visión enfocada en la misión. Tenemos un evangelio de paz y necesitamos ser evangelistas que llamen a otros a tener una relación pacífica con Dios”.

    Grace Carhart & Hector Acero Ferrer

    Grace Carhart, estudiante de posgrado en el instituto de Estudios Cristianos, Toronto, Canadá, ve el potencial de la iglesia para “permitirnos ser moldeados en modos positivos por la comunidad. Si se tiene una base sólida de identidad positiva, la gente de la iglesia no tiene por qué tener temor de interactuar con aquellos que son diferentes”.

    Aunque ella misma no es Menonita, Grace Carhart ve a los menonitas como gente abierta a grupos y perspectivas diversas. Héctor Acero Ferrer, de Colombia, quien dirigió un taller junto con ella, expresó: “La iglesia es un lugar en el que las personas una y otra vez pueden contar la historia de ser una víctima, o un victimario”.

    Derek Suderman

    Para que los anabaptistas puedan continuar el arduo trabajo de la construcción de paz, Derek Suderman de Conrad Grebel University College en Canadá, subraya que debemos mantener en el centro nuestro lenguaje principal de comprensión bíblica/teológica. Desde esa base surge nuestro lenguaje secundario de los derechos humanos y la legislación internacional. “La supervivencia de la postura de paz Menonita depende de nuestra capacidad de articular las principales razones por las cuales hacemos trabajo de construcción de paz”, asegura. “La construcción de paz debería ser un derivado de nuestra fe, no la cosa en sí misma”.

    —J. Nelson Kraybill, presidente del CMM (2015–2021), reside en Indiana, EE.UU.

  • “¿Por qué nos ayudarían? ¿Quiénes son ustedes, los menonitas?” Una familia Colombiana preguntó esto a sus amigos en la Iglesia de los Hermanos Menonitas (HM) de Grantham en St. Catharines, Ontario, Canadá. Con la ayuda burocrática del Comité Central Menonita y el apoyo lingüístico de la iglesia vecina Scott Street de los HM, Grantham patrocinó a esta familia que huyó de su hogar en Colombia para comenzar de nuevo en Canadá.

    La familia quería saber más sobre lo que llevó a estos cristianos a ayudarles a establecerse en Canadá. El pastor Michael VandenEnden acudió al Congreso Mundial Menonita (CMM) para solicitar recursos en español de la familia mundial anabautista.

    El titulo Shalom – un proyecto de Dios de la Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial  proporciona “los conceptos básicos del anabautismo: paz, comunidad y discipulado”, explica Minamino quien tradujo el libro al japonés.

    Escrito en un lenguaje claro y explicativo Shalom – un proyecto de Dios abarca un gran rango de las enseñanzas de la tradición. VandenEnden quería estudiar el libro con sus amigos pero descubrió que aún no había sido traducido al español.

    Las iglesias de Grantham y de Scott Street recogieron una ofrenda especial el viernes santo para levantar fondos para la traducción. Con esta contribución, el CMM trabajó en cooperación con CEMTA (Centro Evangélico Menonita de Teología Asunción), una escuela teológica Menonita en Paraguay, para traducir el libro desde su original en alemán al español.

    Shalom – El Proyecto de Dios ahora se suma a las versiones en alemán, inglés, francés y japonés (ministerio editorial Word of Life 2017) del libro.

    “La Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial invita a nuestros miembros a participar en una conversación a nivel mundial sobre asuntos de fe y practica desde una perspectiva Anabautista-Menonita”, manifiesta  John D. Roth, secretario de la comisión de Fe y Vida.  “Muchos de los libros están  escritos en coautoría con líderes de diferentes contextos culturales; la mayoría de los libros incluyen preguntas de estudio, que ayudan a la discusión en grupos pequeños; y todos están profundamente arraigados en las Escrituras”.

    Las comisiones están comprometidas con la traducción continua de estos volúmenes. “Esta es una serie viva”, afirma John D. Roth. “Siempre estamos abiertos a sugerencias o propuestas de nuevos títulos”.

    Haga clic aquí para ver los enlaces de los ocho títulos de la Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial.

    —Comunicado del Congreso Mundial Menonita

     

    Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial:

    Anabaptist Seed (Inglés)
    De Semilla Anabautista (Español)
    Graines d’anabaptisme (Francés)
    重洗派的根源 (Chino)
    Täuferische Saat – Weltweites Wachstum (Aleman)
    Anabaptist Beej se (Hindi)
    재세례신앙의 씨앗으로 부터 (Coreano)
    Từ hạt giống Anabaptist (Vietnamita)
     
    Sharing Gifts in the Global Family of Faith (Inglés)
    Compartiendo Dones en la Familia Global de la Fe (Español)
    Dons de chacun au service de tous (Francés)
    Teilen, was wir sind und haben (Aleman)
     
    God’s Shalom Project (Inglés)
    Shalom – un proyecto de Dios (Español)
    Shalom, le projet de Dieu (Francés)
    Schalom – das Projekt Gottes (Aleman)
    „Ç∑„É£„ɺ„É≠„ɺ„Ɇ Á•û„ÅÆ„Éó„É≠„Ç∏„Çß„ÇØ„Éà  (Japonés)
     
    A Culture of Peace (Inglés)
    Ein Kultur des Friedens (Aleman)
     
    Stewardship for All? (Inglés)
     
    What we Believe Together (Inglés)
    Lo que juntos creemos (Español)
    Was wir gemeinsam glauben (Aleman)
    Keyakinan kita bersama: mengungkap butir-butir keyakinan bersama gereja-gereja Anabaptist(Indonesio)
    우리가 함께 믿는 것 (Coreano)
     
    Life Together in the Spirit (Inglés)
    Convivencia Radical (Español)
    Vivre ensemble, unis dans Esprit (Francés)
    Hidup Bersama dalam Roh: Spiritualitas Radikal untuk Abad Kedua Pubu Satu (Indonesiano)
    성령과 함께 하는 삶: 21세기의 급진적 영성 (Coreano)
    Vida no Espírito em Comunidade : Uma Espiritualidade Radical para o Século XXI (Portugués)
     
    God’s People in Mission: An Anabaptist Perspective (Inglés)
    Proximamente: El Pueblo de Dios en Misio?n: una Perspectiva Anabautista (Español)
    Proximamente: Le peuple de Dieu dans la mission : une perspective anabaptiste (Francés)

    Si usted conoce de una versión traducida que no se encuentra en la presente lista, por favor comuníquenoslo. Escriba al correo electrónico info@mwc-cmm.org


     

  • “Aunque cada congregación tiene su propia historia, trasfondo social y cultural, es común que experimentemos el mismo tipo de conflictos, problemas y situaciones”, afirma Ellul Yongha Bae, líder de la iglesia Menonita y editor en Corea del Sur.

    “Las comunicaciones del CMM son muy importantes para demostrar que como iglesias Menonitas, nos hemos planteado preguntas similares y hemos tratado de encontrar soluciones con un enfoque en la comunidad, el discipulado y los asuntos de paz”.

    La editorial Daejanggan ha estado traduciendo libros Menonitas al coreano desde el año 2010, incluyendo el libro Convivencia Radical de John Driver, perteneciente a la Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial.

     “No es fácil encontrar un buen modelo sobre los movimientos radicales en la historia cristiana de Corea”, explica Ellul Yongha Bae. Enseñar sobre la paz es algo crucial en Corea debido a la continua herida creada por la división entre Corea del Norte y Corea del Sur.

    “Creemos que la teología de paz Menonita puede ser un buen modo de enseñar ética cristiana y un modo práctico de vida”, declara  Ellul Yongha Bae.

    Daejanggan les paga a los traductores un pequeño salario de modo que trabajen en estos libros como una manera de ayudar a las iglesias anabautistas coreanas a aprender junto con las otras iglesias del CMM. “Esto nos guía para darnos cuenta que hay otros caminos posibles que podemos ver además de la cristiandad”, señala Ellul Yongha Bae.

    El editor es parte de una organización que incluye una empresa de diseño web y una pequeña granja. Las donaciones – algunas  provenientes de socios anabautistas internacionales como las comunidades Huteritas y Bruderhof – ayudan a financiar las traducciones.

    Los libros Menonitas en su mayoría son leídos por seminaristas y líderes laicos de las iglesias anabautistas quienes se reúnen en casas. Sin embargo, también atraen a otros cristianos en Corea, aquellos que están buscando formas alternativas de vivir una vida cristiana, indica Ellul Yongha Bae.

    “Aunque somos pequeños, es muy significativo confesar que somos seguidores de Jesucristo en el contexto de las formas anabautistas de discipulado”, afirma Ellul Yongha Bae.

    “La Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial invita a nuestros miembros a participar en una conversación a nivel mundial sobre asuntos de fe y practica desde una perspectiva Anabautista-Menonita”, manifiesta  John D. Roth, secretario de la comisión de Fe y Vida.  “Muchos de los libros están  escritos en coautoría con líderes de diferentes contextos culturales; la mayoría de los libros incluyen preguntas de estudio, que ayudan a la discusión en grupos pequeños; y todos están profundamente arraigados en las Escrituras”.

    Haga clic aquí para ver los enlaces de los ocho títulos de la Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial 

    —Comunicado del Congreso Mundial Menonita

     

    Colección de Literatura Anabautista-Menonita Mundial:

    Anabaptist Seed (Inglés)
    De Semilla Anabautista (Español)
    Graines d’anabaptisme (Francés)
    重洗派的根源 (Chino)
    Täuferische Saat – Weltweites Wachstum (Aleman)
    Anabaptist Beej se (Hindi)
    „Ç¢„Éä„Éê„Éó„ÉÜ„Çπ„Éà„ÅÆÁ®Æ„Åã„Çâ    (Japonés)
    재세례신앙의 씨앗으로 부터 (Coreano)
    Từ Hạt Giống Anabaptist (Vietnamita)

     

    Sharing Gifts in the Global Family of Faith (Inglés)
    Compartiendo Dones en la Familia Global de la Fe (Español)
    Dons de chacun au service de tous (Francés)
    Teilen, was wir sind und haben (Aleman)

     

    God’s Shalom Project (Inglés)
    Shalom – un proyecto de Dios (Español)
    Shalom, le projet de Dieu (Francés)
    Schalom – das Projekt Gottes (Aleman)
    „Ç∑„É£„É≠„ɺ„Ɇ Á•û„ÅÆ„Éó„É≠„Ç∏„Çß„ÇØ„Éà (Japonés)

     

    A Culture of Peace (Inglés)
    Ein Kultur des Friedens (Aleman)

     

    Stewardship for All? (Inglés)

     

    What we Believe Together (Inglés)
    Lo que juntos creemos (Español)
    Was wir gemeinsam glauben (Aleman)
    Keyakinan kita bersama: mengungkap butir-butir keyakinan bersama gereja-gereja Anabaptist (Indonesio)
    우리가 함께 믿는 것 (Coreano)

     

    Life Together in the Spirit (Inglés)
    Convivencia Radical (Español)
    Vivre ensemble, unis dans Esprit (Francés)
    Hidup Bersama dalam Roh: Spiritualitas Radikal untuk Abad Kedua Pubu Satu (Indonesiano)
    성령과 함께 하는 삶: 21세기의 급진적 영성 (Coreano)
    Vida no Espírito em Comunidade : Uma Espiritualidade Radical para o Século XXI (Portugués)

     

    God’s People in Mission: An Anabaptist Perspective (Inglés)
    ProÃÅximamente: El Pueblo de Dios en MisioÃÅn: una Perspectiva Anabautista (Español)
    ProÃÅximamente: Le peuple de Dieu dans la mission : une perspective anabaptiste (Francés)

     


    Si usted conoce de una versión traducida que no se encuentra en la presente lista, por favor comuníquenoslo. 
    Escriba al correo electrónico info@mwc-cmm.org


     

     

  • La Comunidad Internacional de los Hermanos Menonitas (ICOMB, por su sigla en inglés) está compuesta por 21 iglesias nacionales en 19 países con aproximadamente 450.000 miembros. ICOMB existe para fomentar las relaciones y los ministerios, para resaltar el testimonio y el discipulado de sus iglesias nacionales miembros – conectando, fortaleciendo y ampliando.

    Un informe de la Cumbre

    Los delegados informaron sobre muchas cosas positivas que están sucediendo en sus conferencias nacionales. Es obvio que Dios se está moviendo alrededor del mundo; ¡el número total de bautismos es de cientos! Se está produciendo un gran crecimiento en el contexto más reciente, Malawi, donde han nacido nuevas iglesias de la JM en los Campos de Refugiados de Malawi. Se informó que hasta 8,000 creyentes son ahora parte de esas iglesias de refugiados. En La*s, muchas iglesias nuevas continúan naciendo entre los Khmu, y hay crecimiento en las iglesias de Baviera y Alemania.

    Aunque gran parte de la información se refería a las cosas buenas que sucedían en muchas de las conferencias, algunos delegados pidieron oración por las dificultades que se estaban experimentando. En Japón, la iglesia está envejeciendo y existe una preocupación real de que los jóvenes no se comprometan. En algunos países simplemente no hay suficientes recursos financieros para hacer todas las cosas que los pastores y líderes quisieran incorporar para llegar a más gente.

    El Centro Mateo dirigido por los misioneros de largo plazo del HM, Trever y Joan Godard, hace un gran trabajo en la formación de futuros líderes jóvenes de varios países. Después de completar la formación de un año, estos jóvenes satisfacen las necesidades de liderazgo en las conferencias del ICOMB y más allá. El MTC fue el anfitrión de la Cumbre y estos jóvenes estudiantes proporcionaron gran parte de la preparación y el servicio de alimentos y la creación de las instalaciones para las reuniones.

    Haga clic para leer el informe completo en la página web de la USMB (en inglés)

    de Don Morris, director nacional de la USMB

  • Testimonio para Renovación 2027: Los anabautistas de hoy

    Renovación 2027 es una serie de eventos que se llevarán a cabo durante 10 años, con la finalidad de conmemorar el aniversario 500 de los inicios del movimiento anabautista. Esta serie destaca a los líderes del movimiento desde épocas históricas hasta el presente.

    “Es cierto, la paz verdadera viene del Dios Eterno. Sin embargo, esta paz se ve entrecortada por los diferentes desafíos de la vida a los cuales se enfrentan las comunidades humanas”, explica Toss Mukwa, miembro de la Communauté des Eglises des Frères Mennonites au Congo (CEFMC – Iglesia de los Hermanos Menonitas en la RD del Congo) y facilitador independiente de terapia y desarrollo comunitario.

    Toss Mukwa, diácono de la congregación de Kitambo/Kinshasa, obtuvo su educación en Suiza, los Estados Unidos, Camerún y Suráfrica. Está casado con Ngsi Bebe y tienen tres hijos.

    Desde 1995, ha estado trabajando en 43 países con organizaciones de iglesias y afines a la iglesia. Actualmente acompaña a las iglesias locales en la CEFMC.

    “Mi trabajo, con mis hermanos y hermanas, es realizado desde la iglesia y está abierto a toda la comunidad humana en donde la iglesia opera”, afirma Mukwa. “Nuestra preocupación está en ayudar al ser humano y a la comunidad a explorar mejor los recursos que Dios nos ha dado para vivir. Es un trabajo abierto al mundo, pero basado en los valores fundamentales menonitas, incluyendo la paz, la justicia, la reconciliación y los fundamentos bíblicos”.

    “Lo sorprendente en este punto es que las comunidades y los empresarios están trabajando con sus propios recursos lo que antes era financiado por los socios”, señala. “Hay más conciencia acerca de un cambio de paradigma, pero aún a pequeña escala”.

    “El propósito de estos procesos es facilitar una conciencia sólida. De la misma manera, y teniendo en cuenta el pasado, aprender de las experiencias y actuar, si es necesario, de manera diferente en el futuro, en función a los activos y recursos con los que disponemos”, expone Toss Mukwa. “El cambio es el mandato del día, empezando por uno mismo”.

    “Lo que significa darle otro significado a la pobreza y a veces, tener una mirada más profunda de la palabra de Dios”, apunta él.

    “Eso es lo que ayuda a la comunidad local y a la iglesia a proporcionar respuestas alternativas a los desafíos de la vida como: el déficit alimentario, la atención médica, la educación de los niños, la vivienda, el acceso a los recursos, la promoción de los valores humanos fundamentales, entre otros”, explica.

    La iglesia contribuye al desarrollo a través del apoyo mutuo, el cual reduce la dependencia del Norte, y ofrece un modelo de autonomía, un evangelismo que aborda a la persona de un modo integral y una base financiera más estable.

    El trabajo de desarrollo tiene mucho que ver con la sanación y la paz.

    “Nuestras intervenciones han revelado que numerosos congoleses, incluso los cristianos, viven bajo el peso del estrés permanente y de los traumas” señala Toss Mukwa. Lo anterior está vinculado con las enfermedades de carácter físico y comportamientos poco saludables como el abuso del alcohol y las drogas.

    “Uno puede leer en estas personas el miedo, la ira, incluso la vergüenza, especialmente frente a la pobreza, la cual afecta su dignidad como seres humanos”.

    Este trabajo de desarrollo aborda la paz con Dios, con ellos mismos y con otros al ayudar a las personas a buscar justicia, a responsabilizarse de sus propias acciones y a prestar atención a la dignidad de los demás.

    “La verdadera paz en este trabajo es aquella que comienza conmigo, y esta paz me pertenece y puedo compartirla con los otros en todo momento y en todas las situaciones de conflicto o de relativa calma”.

    “Creo que no utilizamos ni valoramos en forma suficiente lo que el Dios eterno nos ha brindado como recursos”, declara Mukwa.

    “Todo puede cambiar en el ser humano, el cual es más que un cerebro, es la imagen de Dios en la Tierra. El cambio se construye con el tiempo, tanto en la persona como también en la comunidad, en el Espíritu y en las mentalidades, así como en los aspectos físicos y materiales de la vida”, concluye Mukwa.

    —Karla Braun, Comunicado del Congreso Mundial Menonita

  • Desde 2016, un presidente muy polémico por su campaña antidrogas, lidera las Filipinas. Ha habido un aumento en los asesinatos extrajudiciales; se dice que policías ejecutan a los traficantes de drogas y a los que se resistan. Existe un apoyo masivo por el carismático presidente, pero también hay controversias en torno a su carácter y su enfoque violento respecto al problema de la droga y la pobreza en el país.

     Ebenezer Mondez En la ciudad de Lumban, en la provincia de Laguna, el pastor Eladio Mondez dirige la congregación de la Iglesia Bíblica Menonita de Lacao. Los domingos por la mañana, se reúnen alrededor de cincuenta varones y mujeres, jóvenes y viejos, a escuchar la Palabra de Dios. Por la tarde, entre cuarenta y cincuenta niños de todo el barrio vienen a aprender de las historias bíblicas, a cantar y bailar, y a comer una comida saludable preparada por los voluntarios de la congregación.  

    Durante la semana, Eladio se desempeña como presidente de la Alianza Evangélica Lumbana de Pastores (LEAP, por sus siglas en inglés). Es la asociación ministerial de la ciudad, que une a doce iglesias evangélicas para causar un impacto en su municipio. Dichos pastores se han comprometido a asistir al gobierno local en la campaña nacional antidrogas, cumpliendo la función de facilitadores en las sesiones de rehabilitación de consumidores y traficantes de droga, quienes se entregan a la policía para comenzar a cambiar su vida. 

    Cada mes de enero, la Iglesia Bíblica Menonita de Lacao celebra el Mes Nacional de la Biblia y el Domingo de la Fraternidad Mundial del Congreso Mundial Menonita. 

    Un cuerpo en crecimiento

    Los menonitas llegaron por primera vez a las Filipinas en la década de los setenta, a través de las iniciativas de ayuda del Comité Central Menonita. Más tarde, las Misiones Menonitas del Este (anteriormente, Junta Menonita de Misiones y Caridades del Este [EMBMC, por sus siglas en inglés]) llegaron a las Filipinas y establecieron iglesias menonitas.

     Ebenezer Mondez

    La mayoría de los líderes de las iglesias menonitas locales son pastores de diferentes denominaciones, que se convirtieron a la práctica menonita de la fe, razón por la cual en 1991 se establecieron formalmente como Integrated Mennonite Churches, Inc. (Iglesias Menonitas Integradas [IMC, por sus siglas en inglés]). 

    IMC continúa creciendo, con cerca de 1?500 miembros bautizados en la actualidad. Las iglesias locales adheridas a IMC están conformadas por congregaciones rurales, que se encuentran en montañas de difícil acceso, donde la mayoría de los miembros son agricultores que dependen de cultivos agrícolas para vivir. Algunas iglesias están ubicadas en la ciudad, donde la nueva generación de jóvenes profesionales presta servicios como maestros/as, enfermeros/as y trabajadores de desarrollo de la comunidad.

    El cristianismo en las Filipinas está muy extendido, con iglesias predominantemente católicas romanas. Sin embargo, en la última década ha habido un aumento en el número de iglesias evangélicas. Esto quizá se deba al ingreso de las misiones extranjeras, y como resultado de la división de las iglesias. Hace más de una década IMC también sufrió una división. 

    En las comunidades locales, las iglesias de IMC participan activamente para responder a las necesidades de su entorno. Algunas iglesias tienen programas de alimentación para niños de bajos recursos. También proporcionan útiles escolares antes del inicio del año escolar como estímulo para los niños cuyos padres no pueden pagarlos. En otras zonas, llevan a cabo estudios bíblicos y escuela dominical, que se transforma en un espacio para que los niños y las niñas se diviertan, escuchen historias sobre Jesús y estén con otros creyentes que los aman y se preocupan por ellos.

    Una familia que fraterniza 

    IMC lleva a cabo una convención general anual, en la que todos los líderes y miembros se reúnen para fraternizar y aprender más sobre la teología de la paz, el anabautismo, y cómo abordar los desafíos a nivel local y nacional. Sin embargo, debido a los desafíos geográficos y financieros, solo el 20 por ciento de la membresía total puede asistir a dicha convención. Generalmente, solo aquellos que están cerca del lugar de la reunión pueden llegar debido a los gastos de viaje; los que llegan de lejos tienen que viajar entre cinco y dieciséis horas.

     Ebenezer Mondez

    La juventud de IMC también organiza un campamento todos los años, donde los jóvenes líderes se alientan y fortalecen mutuamente. Asimismo, es una vía para invitar a los jóvenes a conocer a Jesús y tener una relación con él. Los campamentos de jóvenes generalmente revitalizan a la juventud para servir en sus iglesias locales, fraternizar y testificar activamente

    Además, las congregaciones de IMC participan activamente junto con otras iglesias de su zona. Se convierten en miembros de asociaciones ministeriales en su municipio o provincia. Estas organizaciones fomentan la fraternidad entre los creyentes de Jesús. Aunque existan algunas diferencias, destacan la unidad de los creyentes de Cristo. Las iglesias menonitas ofrecen una teología de la paz que las inspira a organizar acuerdos pacíficos entre los candidatos durante los períodos de elecciones locales.

    Otros grupos anabautistas de las Filipinas

    Aparte de IMC, hay otras denominaciones menonitas presentes en las Filipinas, tales como los grupos conservadores de Nationwide Fellowship of Churches, con los cuales IMC no tiene comunicación. Hay una misión de los Hermanos Menonitas en el norte, pero todavía no han hecho contacto con IMC. También hay una Red de Iglesias de Paz (Peace Church Network) establecida por la Iglesia Menonita de Canadá en Metro Manila, la capital del país. La Red de Iglesias de Paz e IMC se han reunido en varias ocasiones para fraternizar y aprender juntas. 

     Ebenezer Mondez

    Como en otros países, los menonitas de las Filipinas enfrentan desafíos en el discipulado y la evangelización. La presencia evangélica en el país es abrumadora y casi no hay quien no haya escuchado el evangelio, pero optan por ignorarlo o alejarse. El desafío es cómo dar testimonio de la singularidad de la tradición anabautista al destacar la paz, la no violencia y la no resistencia.  

    Existe la posibilidad de llevar a la práctica nuestros principios de paz y de no violencia de manera concreta. Los grupos armados que desean una rebelión comunista, habitan en remotas regiones montañosas. Algunas iglesias IMC ubicadas en zonas donde se encuentran grupos rebeldes, dan testimonio ofreciendo meriendas y siendo amigables con ellos.  

    El anabautismo también ha tenido influencia en el proceso de paz del país, donde los líderes de la consolidación de la paz consideran la teología de la paz anabautista como un modelo para acercarse a los grupos separatistas musulmanes, como así también a los rebeldes comunistas.  

    A medida que se acerca el cincuentenario de la presencia menonita, nuestras iglesias ‚Äìque expresan una gran diversidad denominacional‚Äì continúan siguiendo a Jesús en el camino de la paz, testificando a nuestro prójimo por medio del amor y la justicia que Jesús demostró en sus interacciones con las personas en la Tierra.

    ‚ÄîRegina Lyn Mondez-Sumatra, Coordinadora Nacional de IMC, desde 2011. Se formó en la Iglesia Bíblica Menonita de Lumban. Actualmente, es investigadora a tiempo completo para una pequeña ONG, que brega por la consolidación de la paz en Metro Manila promoviendo el proceso de paz entre el Gobierno filipino y el Partido Comunista. /em>

     


    Este artículo apareció por primera vez en Correo/Courier/Courrier en abril de 2019.

     

  • Cada paso es una oración.

    Cada paso es una súplica al Dios que sabe lo que significa deambular durante meses o años en busca de una tierra prometida.

    Cada paso es una protesta sagrada, que clama a Dios por misericordia y justicia.

    De este modo, se elevaron millones de oraciones, mientras amigos volaban hacia el oeste desde naciones como Camerún y Senegal, mientras amigos caminaban hacia el norte desde los barrios de Honduras y El Salvador, buscando una respuesta a sus peticiones a Dios.

    A principios de este año, pasé un tiempo con una delegación de conciudadanos Menonitas en la frontera de EE. UU. y México con New Sanctuary Coalition (NSC) cuya sede central se encuentra en Nueva York. NSC sugirió que usáramos la palabra “amigos” como una manera de reformular la narrativa de cómo nombramos a aquellos que buscan una vida abundante y nuestras relaciones con ellos.

    En sus viajes hacia la frontera sur de los EE. UU., nuestros amigos simbolizaron el deseo de experimentar una vida libre de abusos, vida libre de la guerras, vida que pasa tiempo con los hijos o los padres. Más que nada, estos amigos buscaban la vida misma.

    En la frontera San Diego-Tijuana, aunque el ritmo de los viajes se hizo más lento, las oraciones no fallaron. En todo caso, las oraciones se hicieron más fervientes a medida que nuestros amigos enfrentaban la barrera que habían soñado alcanzar, la entrada a la “Tierra Prometida”. Los obstáculos reales y numerosos, para la entrada, a menudo eran más grandes de lo que ellos habían imaginado; más grandes de lo que yo, una ciudadana estadounidense con cierto conocimiento de la ley de inmigración, había imaginado. Muchos amigos, que ya habían caminado durante meses, ahora se encontraban en la frontera por otros meses adicionales, esperando turno hasta que su número fuera llamado (un sistema ilegal que demoraba deliberadamente la entrada de inmigrantes en el sistema de inmigración de los Estados Unidos).

    Mientras aún se encontraban en México, muchos de los que buscaban asilo fueron preparados por amables abogados de inmigración de los EE. UU. para su “entrevista de un miedo creíble” con Inmigración y Control de Aduanas. La totalidad de los casos de asilo de nuestros amigos reposaban en esas entrevistas. Con su destino pendiendo de un hilo debiendo demostrar “un miedo que fuera creíble” ¿Cómo escuchan nuestros hermanos del mundo mayoritario la invitación de Pablo a los Filipenses en el capítulo 4: 6? En el cual Pablo le pide a los creyentes que “no se aflijan por nada, sino que presenten todo a Dios en oración” ¿Qué significa eso para aquellos que enfrentan largas esperas en centros de detención deplorables? ¿O para aquellos que están obligados a esperar sus audiencias judiciales “al otro lado” en México?

    La esperanza que Pablo alienta aquí no está establecida en la capacidad del sistema de inmigración para impartir justicia verdadera hecho por los humanos. Más bien, Pablo les recuerda a los creyentes acerca del Dios que sufre con ellos, cuya profunda empatía no puede mantenerse fuera de las llamadas hieleras (celdas de detención). El Dios que conoce el dolor de los refugiados que huyen de la violencia, y que conoce la completa angustia de un niño que es separado de sus padres.

    Las palabras de Pablo también hacen eco en los corazones de los creyentes en los Estados Unidos, al recordarnos al Dios que disuelve los límites. Las comunidades de fe aquí se reúnen para orar y actuar con la esperanza de que el amor de Dios derribará las barreras que nos separan unos de otros. Hay un fuego en cada paso de aquellos que proveen refugio, que marchan por el cambio, que acompañan a los amigos a la corte para las audiencias.

    Juntos, no nos preocupamos por que el sistema de inmigración de los Estados Unidos sea justo: no lo será. En todo lo que hacemos, abrimos nuestros corazones, mentes y cuerpos para presentar nuestras esperanzas a Dios. Ya sea desde el norte o el sur, el este o el oeste; cada paso que damos es una oración. Una oración para que la dura frontera entre nosotros se rompa bajo el peso del amor de Dios. Una oración para disolver los corazones callosos y los sistemas injustos. Una oración para liberar a los cautivos. Una oración por la paz de Dios, que supera todo entendimiento y nos lleva a una comunión más profunda con los demás y con Dios.

    Cada paso es una oración.

    —Valerie Showalter, Comunicado del Congreso Mundial Menonita

    Este testimonio hace parte de los recursos para la adoración del Domingo de la Paz 2019. Haga clic aquí para ver más: www.mwc-cmm.org/domingodelapaz

  • En este número, presentamos ejemplos de cómo miembros de la familia anabautista menonita crean un espacio para los niños en las iglesias locales de todo el mundo.


    Somos la Iglesia Cristiana Menonita del Perú, una comunidad de fe que se encuentra en Iquitos, una ciudad en medio de la selva peruana, a la ribera del río Amazonas. Allí en medio del calor y la humedad tropical, hemos venido trabajando durante más de diez años con niños y niñas en condiciones de pobreza y abandono.

    Todo se inició en el corazón de David y Cecy Moreno (misioneros de la Iglesia Cristiana Menonita de Colombia), quienes comienzan un ministerio infantil reuniéndose cada sábado a compartir con chicos y chicas de la calle, para darles de comer y compartir la Palabra de Dios. Estos niños y niñas empezaron a invitar a sus amiguitos, y en poco tiempo ya había también adolescentes y jóvenes.

    A partir del estudio de la Biblia y el discipulado, el amor de Dios fue obrando en sus corazones, de tal modo que empezaron a cambiar sus malos hábitos y a dar testimonio en sus familias. En consecuencia, algunos adultos se acercaron a buscar consejería y así comenzamos a tener grupos familiares en pequeñas casas. Las familias de los niños y niñas veían a David y Cecy como sus pastores. Entonces en febrero de 2012, nos empezamos a reunir en un solo lugar como comunidad de fe establecida, con el acompañamiento de la Iglesia Menonita de Colombia.

    Muchas veces, en la iglesias olvidamos la importancia que tienen los niños y niñas en el proceso de evangelización de las comunidades. Creemos que basta con solo reunirlos los domingos y entretenerlos con alguna actividad. Sin embargo, ellos tienen la capacidad de entender sin prejuicios y con un corazón puro el mensaje de Jesús, por encima de las circunstancias difíciles que estén pasando. Son agentes de perdón y reconciliación en medio de la violencia de sus hogares. Una conducta transformadora que demuestra el amor de Dios. “La respuesta amable calma el enojo, la respuesta violenta lo excita más.” (Proverbios 15,1).

    En la Iglesia Menonita de Iquitos nuestra labor se centra fuertemente en los niños y niñas. Ha sido un proceso en el que la comunidad de fe ha entendido que no es solo una responsabilidad del pastor, sino que todos estamos involucrados. El Señor Jesús nos ha llamado a formar discípulos y qué mejor que hacerlo con aquellos que aún tienen toda una vida por delante. De este modo, algunos hermanos de la iglesia forman parte activa como maestros y líderes, mientras otros ayudan con los alimentos para poder seguir dando el almuerzo a más de 350 niños cada semana.

    Los jóvenes que van creciendo, los vamos formando e integrando al equipo de liderazgo. Dirigen las alabanzas y coreografías que cantamos. Algunos están en las clases de música, otros apoyan tanto la preparación como la distribución de los alimentos, y otros ya están empezando a dar clases a los más pequeños. Sus propios testimonios de vida son de mucha bendición para los niños y niñas, quienes se sienten identificados y animados a través de ellos.

    En nuestra experiencia, hemos entendido que los adolescentes son muy importantes en los ministerios de la iglesia. Ellos están en una edad difícil, ya que no se identifican con los niños pero tampoco con los jóvenes. Por dicha razón, muchas veces terminan alejándose de Dios. Es necesario que la iglesia brinde espacios para que los adolescentes puedan servir. Van a cometer errores, algunos días se comportarán como niños, tendrán una batalla constante contra la pereza, pero aun así debemos acompañarles y creer que Dios tiene un propósito con ellos ahora mismo, a pesar de su inexperiencia. Ello fortalecerá su fe y les permitirá crecer como un árbol plantado a la orilla de un río, que da su fruto a su tiempo y jamás se marchitan sus hojas. ¡Todo lo que hace, le sale bien!” (Salmos 1,3)

    Los niños y niñas son el futuro, pero también el presente de nuestras iglesias. Al igual que los adultos, también necesitan un tiempo de calidad, en que les escuchemos, les animemos, alabemos juntos al Señor, les enseñemos a orar y les demos la importancia que merecen como ciudadanos del Reino de Dios. “Los niños son como el cemento fresco, cualquier cosa que caiga sobre ellos dejará una huella” Haim Ginott.

    —Juan Carlos Moreno, pastor de jóvenes de la Iglesia Cristiana Menonita del Perú.

    Haga clic aquí para mirar fotos y videos en español.

    Este artículo apareció por primera vez en Correo/Courier/Courrier en abril de 2019.

  • ¿Alguna vez tomó una decisión en la que usted estaba a favor de una idea y otra persona estaba en contra? O, ¿ha estado en una junta en la que una votación resultó cinco a favor y cuatro en contra? No es divertido avanzar de esa manera, ¿verdad? ¿Quién de nosotros, si pensamos en las relaciones y no en ganar, está de acuerdo con la toma de decisiones en la que “la mayoría gana”? Espero que no sean muchos.

    Tiene que haber una mejor manera.

    Bueno, tal vez la hay.

    En abril de 2018, junto con Steve Berg y David Wiebe, fuimos representantes de la familia canadiense de los Hermanos Menonitas ante las reuniones del Concilio General del Congreso Mundial Menonita (CMM) en Kenia. Allí, encontramos otra manera de tomar desiciones.*

    Construyendo el consenso

    Anteriormente, no estaba seguro de cómo tomar decisiones por consenso con una junta, una congregación o una delegación.

    Así es como funciona para el CMM.

    Consta de tres pasos.

    Primeramente, está la etapa de información, que tiene dos partes.

    Inicialmente, el enfoque está en presentar la información de antecedentes sobre la propuesta, el rango de posibles perspectivas y un curso de acción. Luego, los delegados hacen preguntas, buscan una explicación más detallada y solicitan información adicional.

    La segunda etapa implica deliberación, ya que los delegados comparten puntos de vista y discuten opiniones diferentes.

    A medida que la conversación avanza, el facilitador puede pedir a los delegados que muestren su nivel de acuerdo al levantar una de las tres tarjetas de colores. El naranja representa pleno acuerdo. El amarillo indica algo de acuerdo con algunas dudas. El azul muestra desacuerdo u oposición.

    El presidente puede solicitar que se levanten las tarjetas para verificar si se está llegando a un consenso después de hacer un resumen de las declaraciones o cuando se ofrecen modificaciones menores a la propuesta. Si es necesario, el presidente promueve una mayor discusión sobre la propuesta.

    La tercera etapa es la de decisión. Sin embargo, no es simplemente una votación rápida de sí o no. Los delegados pueden hablar sobre los beneficios o desventajas. Se les anima a indicar con sus tarjetas su nivel de acuerdo.

    En mi experiencia en el CMM, aquellos que no levantaron las tarjetas de color naranja han tenido la oportunidad de compartir inquietudes, objeciones o perspectivas adicionales. Esto ha dado garantías de que cada persona y su opinión son importantes, y que la decisión ha sido tomada por el grupo.

    Cuando el presidente cree que se ha alcanzado un consenso, él o ella solicita que se muestren las tarjetas. Si todos los colores son afirmativos, se puede declarar un consenso, y la propuesta es aceptada.

    Sin embargo, si no se llega a un consenso, se puede continuar una mayor discusión abordando las inquietudes o respondiendo preguntas. Más preguntas pueden determinar el nivel de apoyo, incluyendo “¿Quién no apoya la propuesta como su primera opción, pero está preparado para aceptarla?” Y “¿Quién no está preparado para aceptar la propuesta?”

    Acuerdo sin unanimidad

    Quienes se oponen a la propuesta son invitados a compartir sus objeciones. Si aún así no se puede alcanzar un consenso, se les pregunta si sienten que han sido escuchados. Se le pregunta al cuerpo más amplio si sienten que los que discrepan han escuchado el otro lado.

    Al reflexionar sobre mi tiempo en estas reuniones, fueron estos actos de asegurar la escucha y el entendimiento mutuo los que nos permitieron avanzar como grupo, en lugar de ser divididos en facciones.

    De esta manera, un grupo puede alcanzar un acuerdo incluso si no hay unanimidad.

    O bien, el grupo puede posponer el resultado final hasta la próxima reunión.

    Inclusive, si una decisión debe ser tomada de una vez, se tomaría una votación convencional decidida por mayoría formal.

    Posiblemente no podamos rehacer los votos del pasado. Pero al enfrentar decisiones, consideremos este modelo para ayudar a mantener la unidad del Espíritu entre nosotros. Esto nos ayudará a aprender unos de otros e incluso a profundizar nuestras relaciones. ¡Encontraremos que se siente bien avanzar juntos!

    Comunicado del Congreso Mundial Menonita release escrito por Laurence Hiebert, pastor de la iglesia Mountainview Grace, Calgary, parte del miembro del CMM, Conferencia de iglesias de los Hermanos Menonitas. Este artículo apareció primero en el MB Herald.

    *Referencia: “Pautas para la toma de decisiones por consenso” (Libro de referencia del CMM)