Buscando juntos un testimonio común

El diálogo entre el CMM y la CMIR crea una declaración y una guía de estudio 

“La búsqueda de la paz comienza dentro del cuerpo de Cristo”, afirma Tom Yoder Neufeld, presidente de la Comisión de Fe y Vida del CMM. Mientras el Congreso Mundial Menonita celebra 100 años de encarnar la unidad dentro de la familia anabautista, nuestros líderes también están trabajando en nuestra misión de relacionarnos con otras comuniones cristianas mundiales. 

El trabajo de reconciliación entre menonitas y luteranos que culminó en Stuttgart en el 2010 sirvió de ejemplo para otras aperturas con las comuniones cristianas mundiales. En preparación para el aniversario 500 en Zúrich, los líderes del CMM dialogaron con la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (CMIR). 

El trabajo colaborativo de las delegaciones menonitas y reformadas dio como resultado una declaración compartida para la conmemoración del aniversario en Zúrich el 29 de mayo del 2025. También produjeron una guía de estudio para ayudar a las congregaciones locales a celebrar el testimonio común con los hermanos y hermanas de la CMIR en sus contextos locales. 

Tanto los anabautistas como los reformados tuvieron sus comienzos en el mismo círculo de reformadores y estudiantes de la Biblia en Zúrich en la década de 1520, señala Tom Yoder Neufeld, también copresidente del diálogo CMM/CMIR. 

“El deseo de dialogar no tenía la intención de volver a tratar los temas que nos dividían… sino restablecer el círculo de estudio bíblico”, explica Tom Yoder Neufeld. 

“Creemos que compartir nuestra reflexión y orar juntos contribuye a sanar las heridas del distanciamiento y la hostilidad, permitiéndonos especialmente descubrir oportunidades para el testimonio común y la paz”, declara Anne-Cathy Graber, secretaria de relaciones ecuménicas del CMM. 

“Había un hambre real de encontrar oportunidades para dar testimonio juntos de la justicia y la paz en un mundo azotado por la opresión, la violencia y la guerra”, expresa Tom Yoder Neufeld. 

El título de la declaración captura estos impulsos.: “Restaurando la plenitud de nuestra familia: en busca de un testimonio común – Una Declaración común de confesión, gratitud y compromiso”. 

Una variedad de factores, incluidos los cambios de personal y la pandemia, llevaron a un inicio del diálogo más tardío de lo previsto. Un encuentro en persona reunió a tres líderes reformados y cuatro menonitas en Columbia Británica, Canadá, en 2023. Otras reuniones se llevaron a cabo por Zoom. 

“Aun así, llegamos a conocernos y valorarnos muchísimo. Fue un regalo trabajar intensamente juntos como hermanos y hermanas menonitas y reformados. Una y otra vez se hizo evidente cuánto más nos mantiene unidos en Cristo que lo que nos divide”, comenta Tom Yoder Neufeld. 

“Nuestra esperanza es que la declaración sirva como catalizador para que las congregaciones se encuentren entre sí y trabajen juntas en nuestro sentido compartido de llamado a trabajar por la paz”, afirma. 

En conjunto, los participantes del diálogo produjeron un recurso de 24 páginas, “Una guía para el estudio, la liturgia y el diálogo”. Esta guía de estudio está destinada a ser utilizada a nivel congregacional para recibir la declaración. Incluye una descripción del contexto histórico y recursos litúrgicos para la celebración de un culto unido con congregaciones anabautistas y reformadas. 

“Los diálogos ecuménicos no son solo debates de ideas”, declara Anne-Cathy Graber. La guía de estudio, que incluye los recursos para el culto unido, “constituye un aspecto único de este documento y esperamos que promueva el encuentro entre cristianos menonitas y reformados”. 

“Acoger esta declaración a nivel local y en el propio contexto de cada uno es un desafío importante”, afirma. 

Los dirigentes del CMM y de la CMIR aún no han decidido si se seguirán celebrando sesiones de diálogo formal.