• Las campanas resonaron por toda la ciudad llena de anabautistas. Se estima que más de 3.500 personas colmaron las calles del casco antiguo de Zúrich el 29 de mayo del 2025, Día de la Ascensión, para conmemorar el quincentenario del anabautismo. 

    “Hoy en día, como menonitas de Suiza, somos una comunidad pequeña”, afirmaron Gladys Geiser y Lukas Amstutz, copresidentes de la Konferenz der Mennoniten der Schweiz, en la apertura del culto. En la ciudad anfitriona tuvieron lugar los primeros bautismos de adultos conocidos del movimiento anabautista. “Pero como podemos ver en este culto, somos parte de un movimiento que se ha hecho más diverso e internacional.” 

    Una celebración de reconciliación

    Todas las naciones juntas 

    Desde sus inicios con unos pocos creyentes valientes en Europa, actualmente el Congreso Mundial Menonita tiene 111 iglesias miembros (tras la reunión del Comité Ejecutivo realizada unos días antes en Alemania) en 61 países de todo el mundo. 

    “Hoy todos podemos reunirnos aquí, todas las naciones, como dice la Palabra: todas las naciones, todas las tribus, todos los idiomas. Esto es especial porque únicamente el Señor puede hacer tales cosas”, expresó Jean-Claude Ambeke, de los Hermanos Menonitas de Angola, que actualmente vive en Francia. 

    Una mañana algo nublada se convirtió en un día soleado para caminar por las calles históricas, abarrotar las salas de conferencias o escuchar los coros. Incluso había un vendedor ambulante que repartía helados, cortesía de la Iglesia Reformada. 

    Los participantes podían estirar las piernas mientras seguían un recorrido histórico a pie o se hacían dramatizaciones en escenarios denominados “senderos con historia”, mientras que más de una docena de talleres brindaban perspectivas sobre el anabautismo: testimonios, estudios históricos y asuntos actuales. Además, la teóloga y periodista suiza Judith Wipfler presidió una mesa redonda en que se reflexionó sobre “un mundo en llamas”, junto con líderes anabautistas que actualmente viven en zonas de conflicto que conllevan grandes desafíos. 

    Cinco coros de todo del mundo dieron conciertos en un espacio cubierto y al aire libre, y se sumaron a un coro masivo para el culto. Dirigieron temas favoritos de las Asambleas como Ewe Thina y Kirisuto no heiwa ga. El grupo musical suizo Songs of Peace presentó una nueva canción con un coro que exclamaba, “¡Queremos justicia, queremos paz!” 

    Una iglesia importante 

    Las filas para el culto de clausura comenzaron a media tarde. La iglesia Grossmünster, con capacidad para 1.200 personas, estaba al tope de su capacidad, al igual que los sitios adicionales para presenciar el culto (Predigerkirche 350, Friedenskiche 250, FEG 100 y el agregado ad hoc Helferei 130). Y aun así quedaron cientos de personas afuera, sentados en la plaza o dispersos en los cafés, mirando desde la pantalla de sus teléfonos celulares. 

    Mientras tanto, en todo el mundo, miles de personas se conectaron en línea a través de sus pantallas personales o junto con otros en iglesias, oficinas o museos. 

    Con representantes de trece comuniones mundiales y tres organizaciones ecuménicas multilaterales como invitados de honor, el culto no sólo trató sobre el anabautismo sino que también constituyó otro paso en la senda de la reconciliación. 

    Un camino hacia la reconciliación 

    “Todos heredamos un legado de dolor debido a las divisiones de la Reforma. Sabemos que persisten las diferencias teológicas y prácticas, pero nos alegramos por el camino hacia la reconciliación que hemos compartido”, declaró Janet Plenert en la liturgia del culto. 

    Ver dicha liturgia

    Liturgia de reconciliación: Nuestro camino a la reconciliación

    El culto contó con la presencia de líderes de la Federación Luterana Mundial y de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas, e incluyó un mensaje del Papa León XIV transmitido por el cardenal Kurt Koch, prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos: “Les aseguro mis oraciones para que nuestras relaciones fraternales se profundicen y crezcan”. 

    Mientras que John D. Roth, del CMM y Hanns Lessing, del CMIR confesaron el “testimonio común de su comunión respecto a la unidad de la iglesia”, los secretarios generales César García y Setri Nyomi se lavaron mutuamente los pies, “como expresión tangible de nuestro compromiso con la reconciliación”, señaló J. Nelson Kraybill. 

    Otra expresión concreta de apoyo fue la posibilidad de usar gratuitamente las instalaciones de las iglesias reformadas, incluyendo la emblemática iglesia Grossmünster. 

    “Reencontrarnos en la Grossmünster quinientos años después de la división, ahora como una “familia reconciliada”, creó una instancia nueva y poderosa en nuestra memoria colectiva que espero cambie la manera en que la próxima generación cuente nuestra historia”, expresó John D. Roth. 

    El evento, en el marco estratégico de una conmemoración, concluyó con un tono de celebración. Los coros de cinco regiones formaron un túnel de canciones desde la iglesia hasta la plaza, mientras los invitados salían al son de Siyahamba (Caminamos en la luz de Dios).  


    Una celebración de reconciliación

    Oración de apertura: Oración de invocación 

    Unamos nuestros corazones en oración.  

    Dios misericordioso, en un mundo dividido por el nacionalismo, los conflictos religiosos, la xenofobia y la guerra, nos has reunido hoy como personas de muchas naciones, lenguas y organismos eclesiales. 

    Tu gracia, oh Dios, hace que esta reunión en amor sea posible. Gracias por la inmensa hospitalidad que la ciudad de Zúrich y las iglesias reformadas de Suiza han brindado a los anabautistas. ¡Bendice esta generosa muestra de bondad! 

    Gracias por el testimonio de todos los presentes que conocen y expresan tu amor reconciliador. Aun cuando la iglesia mundial a veces esté dividida, tú nos llamas a vivir como hermanos y hermanas en Cristo. Danos la valentía para amarnos mutuamente, y para amar a los “otros”, quienesquiera que sean. 

    Derrama hoy tu Espíritu Santo sobre nosotros para que tu sanación y tu amor puedan fluir a través de nosotros hacia el mundo. Haz de nosotros —y de las iglesias que representamos— “una nueva humanidad” unida en amor, “para que el mundo sepa” que nuestra esperanza está en Cristo, en cuyo nombre oramos. 

    Amén. 

    Sunoko Lin, tesorero del CMM, guía la oración de apertura en la catedral de Grossmünster durante el culto de clausura en el día del aniversario en Zúrich, Suiza.
    Unos 1.200 fieles de todo el mundo colmaron la catedral de Grossmünster para asistir
    al culto de clausura, mientras que miles más lo siguieron por Internet/Dale Gehman

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    Perturbación: El pueblo de Dios

    Una perturbación en la Iglesia por algunas personas de Dios. 

    Liturgista: Pueblo de Dios, nos reunimos en esta histórica ciudad de Zúrich, lugar de origen de un movimiento de renovación del siglo XVI liderado por Ulrico Zuinglio, y cuna del movimiento que conocemos actualmente como anabautismo. 

    [Cientos de pequeños volantes con mensajes escritos caen desde el balcón hacia los que están sentados en los bancos y en el podio. Tres manifestantes con trajes de época se ponen de pie y exclaman:] 

    Primer manifestante: ¿Qué clase de iglesia es esta? ¿Quién pertenece realmente al cuerpo de Cristo? ¡La Escritura llama a los seguidores de Jesús a separarse de aquellos que no viven una vida pura! 

    Segundo manifestante: ¡Excluyan a aquellos que no bautizan sólo mediante la confesión de fe! 
    Tercer manifestante: ¡Excluyan a aquellos que tienen autoridad y no permiten que nuestras congregaciones vivan tranquilas y en paz! 

    Liturgista: ¡Están interrumpiendo un culto de adoración! ¿Quién son ustedes? ¿Por qué hacen esto? 

    Primer manifestante: Somos sus antepasados anabautistas. Cristo es nuestra autoridad. ¡Incluso él perturbó la paz! 

    Segundo manifestante: Hemos estudiado las Escrituras. ¡Dios nos ha dado una visión! 

    Primer manifestante: ¡Escúchennos! 

    Tercer manifestante: ¡El reino de Dios está cerca! 

    Primer manifestante: ¡Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia! 

    Tercer manifestante: A los ricos les decimos: “Donde esté su tesoro, allí también estará su corazón”. 

    Segunda manifestante: A los poderosos les decimos: “La guerra es contraria a la voluntad de Dios”. ¡Obedeceremos a Dios antes que a la autoridad humana! 

    Tercer manifestante: Cristo se pone del lado de aquellos que no tienen quién los ayude: de los refugiados, de las víctimas de la violencia, de los que están encarcelados por su fe y su identidad. 

    Liturgista: ¡Esperen… por favor! Escuchen la Palabra del Señor dicha por el apóstol Pablo: 

    No tengan un concepto más alto de sí mismos del que deben tener. Dios ha medido una porción de fe para cada uno de ustedes. Tenemos muchas partes en un solo cuerpo, pero no todas tienen la misma función. Ámense unos a otros como a los miembros de su familia. Sean los mejores en honrarse unos a otros. 

    Confesión y lamento 

    Liturgista: La congregación ha estado escuchando. Agradecemos este recordatorio de nuestro pasado. 

    Compartimos su esperanza y sus agravios. Todos los que estamos reunidos aquí hoy deseamos ser más como Jesús. Todos hemos pecado y estamos destituidos de la gloria de Dios. Oremos por la gracia para confesar nuestros pecados y vayamos a vivir vidas santas. 

    Primer manifestante: Gracias por escucharnos. 

    Liturgista: Las aguas del bautismo nos han dividido. 

    [se vierte agua] 

    Pero quienes beben del agua sanadora de Jesús, nunca volverán a tener sed. Purifícanos, Espíritu Santo, refréscanos con el agua de la vida eterna. 

    No creemos que Jesús haya muerto en vano. No creemos que quienes sufrieron por su fe a lo largo de los siglos lo hayan hecho en vano. 

    Segundo manifestante: ¡Sí! Necesitábamos escuchar esto de ustedes. Las palabras que pronunciamos deben impulsarnos a la acción. Por este motivo hemos regresado para esta conmemoración. 

    Liturgista: Oremos. Dios Todopoderoso, venimos ante ti no por nuestra rectitud, sino por tu gran misericordia. 

    Primer manifestante: Perdónanos por la arrogancia de pensar que podríamos ser perfectos y sin pecado. 

    Segundo manifestante: Ya sea que vivamos en comunidades apartadas del mundo o en medio del mundo, perdónanos por ser ciegos a las necesidades de nuestro prójimo. 

    Tercer manifestante: Perdónanos por aquellas ocasiones en las que no hemos sabido “hacer justicia y amar la misericordia”. 

    Primer manifestante: Perdónanos por nuestro silencio… por no dar “razón de la esperanza que hay en nosotros”. 

    Segundo manifestante: Perdónanos cuando nos hemos negado a trabajar con personas diferentes a nosotros, incluso cuando la necesidad era grande. 

    Tercer manifestante: Perdónanos cuando hemos menospreciado a otras iglesias y hemos perdido oportunidades de aprender de ellas y de asociarnos con ellas. 

    Gracias por aquellas comunidades de fe que nos han abierto sus corazones y nos acompañan en el camino de Jesús. 

    Liturgista: Recibe nuestras peticiones, oh Padre, en el nombre de Jesucristo, por medio del poder del Espíritu Santo. 

    Juntos nos unimos a la oración de Cristo, cada uno en su propio idioma. 

    “Padre Nuestro…” 

    Afirmación del perdón  

    Liturgista: Cristo mismo dijo: “Tus pecados son perdonados. Vete y no peques más”. Somos perdonados, amados y libres. Amén. 

    Lisa Carr-Pries (Canadá), vicepresidenta del CMM, y Danisa Ndlovu (Zimbabue), expresidente del CMM, dirigieron esta liturgia. Ebenezer Mondez (Filipinas), James Jakob Fehr (Alemania) y Ulrike Schmutz (Suiza) hicieron el papel de perturbadores. 

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    Sermón: La valentía de amar

    La valentía de amar

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    Liturgia de reconciliación: Nuestro camino a la reconciliación

    Los líderes de las comuniones respectivas pronunciaron estas palabras. Cuando los representantes luteranos y menonitas hablaban, se hacían las señal de la cruz en la frente uno al otro. Cuando los representantes reformados y menonitas hablaban, los secretarios generales se lavaban los pies mutuamente

    Representantes

    Representantes del Congreso Mundial Menonita 

    • Anne-Cathy Graber, secretaria de Relaciones ecuménicas 
    • J. Nelson Kraybill, ex presidente 
    • Janet Plenert, ex vicepresidenta, actual coordinadora de Representantes regionales 
    • John Roth, presidente, Comité de planificación de la renovación 
    • Larry Miller, ex secretario general 

    Representante de la Iglesia Católica 

    • Cardenal Kurt Koch, Prefecto del Dicasterio para la Promoción de la Unidad de los Cristianos 

    Representante de la Federación Luterana Mundial 

    • Rev. Anne Burghardt, secretaria general 

    Representantes de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas 

    • Rev. Dr. Hanns Lessing, secretario ejecutivo de Comunión y teología 
    • Rev. Dr. Setri Nyomi, secretario general interino 

    Menonitas 

    En nuestro culto de hoy, el Congreso Mundial Menonita, junto con representantes de otras tradiciones anabautistas y de la Iglesia Libre, se reúne con representantes de la Iglesia Católica Romana, la Federación Luterana Mundial y la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas para dar un testimonio común.  

    Todos heredamos un legado de dolor debido a las divisiones de la Reforma. Sabemos que persisten las diferencias teológicas y prácticas, pero nos alegramos del camino a la reconciliación que hemos compartido. 

    En 2003, católicos y menonitas concluyeron un diálogo de cinco años titulado, “Llamados a ser pacificadores”, cuyo punto de partida fue el reconocimiento compartido de que “la lealtad a Cristo como Señor prevalece sobre las exigencias del Estado”. 

    Más recientemente, la participación católica y luterana en el Diálogo Trilateral sobre el Bautismo, ha ayudado a aclarar los puntos de convergencia así como las diferencias persistentes en torno a nuestra interpretación y práctica del bautismo. Consideramos que estos diálogos constituyen un don para la iglesia. 

    Católicos  

    Mensaje del Santo Padre León XIV  
    A los participantes en la conmemoración del quincentenario del movimiento anabautista 

    Queridos amigos, mientras se reúnen para conmemorar los 500 años del movimiento anabautista, los saludo cordialmente con las primeras palabras pronunciadas por Jesús resucitado: “La paz sea con ustedes” (Juan 20:19). 

    En la alegría de nuestra celebración pascual, ¿cómo no reflexionar sobre la aparición de Cristo en la tarde de aquel “primer día de la semana” (ibíd.), cuando Jesús no solo atravesó los muros y las puertas cerradas, sino también los corazones temerosos de sus discípulos? Además, al impartir su gran don de la paz, Cristo fue sensible a la experiencia de los discípulos, sus amigos, y no ocultó los signos de su Pasión aún visibles en su cuerpo glorioso. 

    Al acoger la paz del Señor y aceptar su llamado, que implica estar abiertos a los dones del Espíritu Santo, todos los seguidores de Jesús pueden sumergirse en la radical novedad de la fe y de la vida cristiana. De hecho, ese deseo de renovación caracteriza al mismo movimiento anabautista. 

    El lema elegido para su celebración, “La valentía de amar”, nos recuerda, sobre todo, la necesidad de que católicos y menonitas hagan todo esfuerzo por vivir el mandamiento del amor, la llamada a la unidad cristiana y el mandato del servicio al prójimo. Del mismo modo, subraya la necesidad de honestidad y la amabilidad al reflexionar sobre nuestra historia común, que incluye heridas dolorosas y narrativas que influyen en las relaciones y percepciones católico- menonitas hasta nuestros días. Cuán importante es, entonces, esa purificación de los recuerdos y esa relectura común de la historia que nos permita sanar las heridas del pasado y construir un nuevo futuro a través de la “valentía de amar”. De hecho, solo así el diálogo teológico y pastoral puede dar fruto, un fruto duradero (véase Juan 15:16). 

    ¡Ciertamente no es una tarea fácil! Sin embargo, fue precisamente en momentos de prueba cuando Cristo reveló la voluntad del Padre: fue cuando, desafiado por los fariseos, nos enseñó que los dos mandamientos más importantes son amar a Dios y al prójimo (véase Mateo 22:34-40); fue en la víspera de su Pasión, cuando habló de la necesidad de la unidad: “para que todos sean uno… para que el mundo crea” (Juan 17:21). Mi deseo para cada uno de ustedes, por tanto, es que puedan decir, citando a san Agustín: “Toda mi esperanza está puesta en la inmensa grandeza de tu misericordia. Da lo que mandas y manda lo que quieras” (Confesiones, X: 29, 40). 

    Por último, en el contexto de nuestro mundo desgarrado por la guerra, nuestro continuo camino de sanación y fortalecimiento de la fraternidad desempeña un papel fundamental, porque cuanto más unidos estén los cristianos, más eficaz será nuestro testimonio de Cristo, Príncipe de la Paz, en la construcción de una civilización del encuentro del amor. 

    Con estos sentimientos, les aseguro mi oración para que nuestras relaciones fraternas se fortalezcan y crezcan. Invoco sobre cada uno de ustedes la alegría y la serenidad que provienen del Señor resucitado. 

    Desde el Vaticano, 23 de mayo de 2025 

    LEÓN PP XIV 

    Menonitas  

    En 2010, la Asamblea Luterana Mundial, reunida en Stuttgart, Alemania, afirmó formalmente una “Acción Menonita”, basada en el informe de un diálogo de cinco años titulado, “La sanación de las memorias: Reconciliación por medio de Cristo”. Un culto de reconciliación incluyó expresiones mutuas de perdón y un compromiso de interpretar las confesiones luteranas y las narrativas menonitas de su pasado a la luz de la historia común descrita en dicho informe.  Dicho proceso marcó un momento clave en las relaciones entre nuestras dos comuniones y sentó las bases para un mayor aprendizaje mutuo sobre los temas del bautismo y la relación cristiana con el Estado. 

    En el culto de reconciliación en 2010, todos los presentes compartieron la señal de la cruz como una manera de hacer presente la vida, muerte y resurrección de Jesucristo. La cruz toca las heridas del pecado, sana nuestro quebrantamiento y restaura nuestras vidas. Promete sanación por medio de la gracia de Dios y señala el don de un corazón y un espíritu nuevos.  

    Hoy día, el Congreso Mundial Menonita y la Federación Luterana Mundial recordamos y renovamos nuestro compromiso con la señal de la cruz. 

    Luteranos 

    En el diálogo, “La sanación de las memorias”, nos comprometimos a escuchar atentamente la historia de unos y otros, y a relatar la historia de nuestros comienzos compartidos de tal modo que ambas partes pudieran afirmarla. La convicción luterana de que la iniciativa de Dios hace posible nuestra respuesta de fe fue recibida calurosamente por los menonitas. El pedido luterano de perdón por haber perseguido a los anabautistas fue generosamente concedido. Un análisis conjunto y franco del bautismo contribuyó a posibilitar un fructífero Diálogo Trilateral sobre el Bautismo del Congreso Mundial Menonita y la Iglesia Católica. 

    Damos gracias a Dios porque cada vez más luteranos y menonitas valoran el testimonio mutuo del evangelio. 

    Menonitas  

    Hoy en Zúrich celebramos los pasos hacia la reconciliación que hemos dado con representantes de la tradición reformada.  

    En 2004, la ciudad de Zúrich y la Iglesia Reformada de Suiza ayudaron a erigir una placa conmemorativa junto al río Limmat, reconociendo la ejecución de Felix Manz y otros seis anabautistas en Zúrich.  

    Tres años después, la Conferencia Menonita Suiza y la Iglesia Reformada del Cantón de Zúrich concluyeron un diálogo significativo, comprometiéndose en un proceso permanente de reconciliación. En dicho documento, los menonitas afirmaron: “No nos pertenecemos. Pertenecemos a Jesucristo que nos llama a seguirlo, y ha derribado el muro de la enemistad y unido a personas de cerca y de lejos en un solo cuerpo”. 

    La semana pasada, el Concilio General del Congreso Mundial Menonita recibió formalmente una declaración redactada con representantes de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas titulada, “Restaurando la plenitud de nuestra familia: en busca de un testimonio común”. 

    Al escuchar una letanía de confesión, gratitud y compromiso extraída de esta declaración, César García, secretario general del Congreso Mundial Menonita, y Setri Nyomi, secretario general interino de la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas, se lavarán los pies mutuamente como expresión tangible de nuestro compromiso con la reconciliación. Los invitamos a todos a dar testimonio de esta señal de arrepentimiento y perdón. 

    Reformados 

    Hemos confesado el origen común de nuestras iglesias y el dolor de su fractura. Pedimos a Dios que bendiga el redescubrimiento de un entendimiento común del evangelio, a fin de que inspiren la evangelización y la construcción de la paz. 

    Menonitas 

    En presencia de representantes de toda la Iglesia, el Congreso Mundial Menonita y la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas dan testimonio común de la unidad de la iglesia. 

    Reformados 

    Hoy, conmemoramos los orígenes comunes de nuestras comuniones mundiales, reconocemos nuestra relación fracturada, y nos alegramos de que, basándonos en los esfuerzos de muchos años en pos del entendimiento mutuo y la reconciliación, podemos responder a Cristo nuestra Paz viviendo en la unidad del Espíritu. Unidos, nos comprometemos a ser humildes, pacientes, sinceros y, sobre todo, bondadosos, al andar juntos como un solo cuerpo de Cristo. 

    Menonitas 

    Reunidos bajo la mirada bondadosa de Dios, celebramos que nuestra identidad se encuentra en nuestra confesión común de Jesús como Señor, nuestros comunes antepasados ​​en la fe y nuestro llamado común al discipulado y al testimonio del evangelio en un mundo fragmentado. 

    Reformados  

    Nuestras tradiciones nos han bendecido con una pasión por la justicia y la paz. Que el Dios de la cruz y la resurrección nos dé el corazón y la mente para procurar la paz y practicar la justicia que resiste la violencia, la opresión y la devastación ecológica, una justicia que encuentra su máxima expresión en el perdón, la misericordia y la reconciliación.  

    Menonitas  

    Hoy, como miembros anabautistas y reformados del cuerpo de Cristo, afirmamos que nuestro testimonio al mundo se nutre y se sostiene por la gracia de Dios, que nos permite amar a Dios, a los demás y a toda la creación. 

    Reformados  

    Nos comprometemos con la sagrada misión de proclamar el evangelio del amor en todos nuestros contextos, cada uno con sus propios desafíos y exigencias. No permitiremos que el miedo, la desconfianza o los obstáculos al diálogo nos impidan responder a este llamado. 

    Menonitas 

    Prometemos recorrer juntos el camino para sanar las heridas del pasado y volver a unir el cuerpo de Cristo. Nos comprometemos a aprender unos de otros, compartiendo la riqueza y diversidad de nuestras tradiciones. Nos comprometemos a una cooperación intencional que afirme la misericordia de Dios y facilite la justicia que lleva a la paz. 

    Reformados 

    Juntos, oramos por el cuerpo de Cristo. En Cristo, somos miembros unos de otros, hermanos y hermanas de la misma carne y del mismo Espíritu. 

    Menonitas 

    Juntos, acogemos el don de la unidad, convencidos de que tú, oh Dios, estás restaurando la plenitud de tu familia. Amén. 

    Juntos confesamos nuestra fe  

    En reconocimiento de nuestra identidad común en el cuerpo de Cristo, los participantes se pusieron de pie y recitaron juntos el Credo de Nicea, cada uno en su propio idioma.  

    Esta antigua declaración de fe cristiana surgió del Concilio Ecuménico de Nicea, y este año se conmemora su 1700 aniversario. 

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    Una letanía para la sanación de las naciones

    Breves piezas musicales de órgano sirvieron para remarcar la letanía, como así también agua vertida de un cuenco como recordatorio del bautismo.  

    Hoy nos hemos reunido para participar del culto, en la ciudad donde los primeros anabautistas se inspiraron en las enseñanzas de Ulrico Zuinglio… y junto a las aguas del río Limmat, donde fue ejecutado Félix Manz, el primer mártir anabautista. 

    [Se vierte agua] 

    Dios de amor, recordamos a Félix Manz y a los seguidores del Cordero, que en todas las épocas y lugares han sufrido un discipulado fiel. 

    Una voz potente clama desde el trono de Dios: “Yo hago nuevas todas las cosas… Al que tenga sed, le daré a beber del manantial del agua de vida”. (Apocalipsis 21:5-6) 

    [Se vierte agua] 

    Dios bondadoso, en un mundo desgarrado por la guerra y una iglesia mundial a menudo dividida, ¡cuánto anhelamos que hagas nuevas todas las cosas! ¡Ven, Señor Jesús!  

    [interludio de órgano] 

    “El ángel me mostró un río limpio, de agua de vida. Era claro como el cristal, y salía del trono de Dios y del Cordero. En medio de la calle principal de la ciudad y a cada lado del río, crecía el árbol de la vida, que da fruto cada mes, es decir, doce veces al año; y las hojas del árbol sirven para sanar a las naciones.” (Apocalipsis 22:1–2) 

    “Con la dolorosa conciencia de que nuestras diferencias se convirtieron en fuente de conflicto y división, oramos ahora por la valentía y la creatividad para transformarlas, de modo tal que enriquezcan nuestra unidad en el cuerpo de Cristo.” 

    [Se vierte agua] 

    ¡Por la sanación de las naciones! ¡Por la sanación de la iglesia! “En Cristo somos miembros los unos de los otros, hermanos y hermanas de la misma carne y del mismo Espíritu…” 

    Dios sanador, el río de agua de vida ha llegado a nosotros. Las hojas del árbol de la vida han traído sanación entre las comuniones de las iglesias representadas hoy aquí. 

    [interludio de órgano] 

    “Soy yo, Jesús, quien les envió a mi ángel con este testimonio para las iglesias. Soy la raíz y el retoño que desciende de David, la estrella brillante de la mañana. 

    El Espíritu y la Esposa del Cordero dicen: “Ven”. 

    Y el que escuche, diga: “Ven”. 

    Y el que tenga sed, y quiera, venga y tome del agua de la vida sin que le cueste nada. (Apocalipsis 22:16-17)  

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    La valentía de amar en un mundo turbulento 

    Oh Dios, nuestra ayuda en épocas pasadas, nuestra esperanza en los años venideros: 

    Gracias a la obra del Espíritu Santo en nosotros, tenemos una esperanza renovada al ver señales de sanación y unidad en la iglesia mundial. 

    Tenemos esperanza al ver la vitalidad de las iglesias representadas hoy aquí, que están geográficamente alejadas de sus raíces denominacionales en Europa. 

    Tenemos esperanza al ver que la evangelización y la construcción de la paz van de la mano en muchos lugares del mundo. 

    Sobre todo, tenemos esperanza porque en Cristo has prometido que estarás con nosotros “siempre, hasta el fin del mundo”. 

    Ven, Espíritu Santo, inspíranos con la fidelidad de los santos a lo largo de los siglos. Como ellos, que nunca nos avergoncemos del evangelio. Señor Jesucristo, bendícenos con la valentía de arriesgarnos a amarnos unos a otros, a nuestro prójimo e incluso a nuestros enemigos como tú nos has amado. 

    Amén. 

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  • Ella era una joven esclavizada. No sabemos su nombre, pero sí sabemos que era prisionera de guerra. Tan solo podemos imaginar la vulnerabilidad, la pérdida y el trauma que debió haber sufrido como persona desplazada y como refugiada esclavizada en una tierra extranjera. 

    Se cuenta la historia en 2 Reyes, capítulo 5. Naamán, comandante del Ejército arameo, acababa de obtener una importante victoria militar sobre el pueblo de Israel. Como parte del botín de guerra, se apoderó de una joven y la obligó a servir como sierva de su esposa. 

    Pero ahora Naamán, el que la esclavizó, está enfermo. Y la joven sabe exactamente lo que se necesita para curarlo. 

    Este es el momento de la verdad: la joven se enfrenta a una decisión fundamental ya que vive con las personas que destrozaron sus sueños, cortaron sus vínculos, destruyeron su familia y quitaron sus posesiones, su libertad e identidad cultural. 

    ¿Cómo responderá a quienes han representado una grave amenaza a su bienestar? 


    Hace unos quinientos años, Ulrich Zuinglio se enfrentó a la misma pregunta: ¿Cómo debía responder a quienes ponían en peligro su bienestar y el de su ciudad? Las circunstancias eran muy diferentes. Él era el líder de la Reforma en Zúrich y pastor de esta misma iglesia. 

    En la primavera de 1529, las autoridades católicas amenazaban con aplastar la Reforma en Zúrich. Preocupado de que sus reformas estuvieran a punto de derrumbarse —y que se frenaran los avances del Evangelio—, un Zuinglio frustrado redactó un llamado urgente al Concejo municipal, instándolo a movilizar un ejército. 

    En la carta al Concejo, Zuinglio incluyó una frase que más tarde se convertiría en lema de la Reforma suiza. “¡Por el amor de Dios!”, escribió Zuinglio, “¡hagan algo valiente!” 

    Para Zuinglio, el enfoque era claro: la valentía, ante los enemigos del evangelio, significaba movilizarse para la guerra. 


    ¿Cómo se manifiesta la valentía cuando afrontamos decisiones difíciles? Esta pregunta es tan relevante actualmente como lo fue hace quinientos años o en el siglo IX antes de Cristo. 

    Todo indicaba que la sierva de Naamán debería haber permanecido en silencio. Después de todo, era joven, era mujer, era israelita, y estaba esclavizada. No tenía derecho a hablar. 

    Por otra parte, Naamán era gentil y era un opresor, razones suficientes para ser odiado por los israelitas. Y su enfermedad de la piel lo hacía aún más impuro, según la perspectiva de la ley judía. 

    Ella no tenía autoridad para hablar, y aun así lo hizo. Encontró la valentía para actuar de una manera que trascendió su condición de víctima… encontró la valentía para responder con compasión e incluso con amor. 

    “Hay un profeta en Samaria —la tierra de tus enemigos— que tiene el poder espiritual para devolverte la salud”, dijo. 

    La valentía es precisamente lo que las víctimas necesitan para encontrar su voz y resistir el silencio que otros quieren imponerles. 

    No obstante, la valentía —especialmente en respuesta a quienes abusan de nosotros, en respuesta a los perpetradores o enemigos— se presenta de muchas formas. 

    Para Zuinglio, la valentía ante los enemigos del evangelio significaba movilizarse para la guerra. 

    Para algunos cristianos, la valentía a menudo incluye la expectativa de una justicia punitiva, que exige que los perpetradores paguen por sus acciones y sufran represalias justas por sus crímenes violentos. 

    Para muchos líderes políticos, la valentía incluye tomar represalias justas contra los enemigos. 

    Algunas personas exigen justicia de tal manera que se cierra la posibilidad de perdón y transformación para el opresor, garantizando así que los ciclos de violencia simplemente continúen en la siguiente generación. 

    Jesús, sin embargo, ofreció un modelo diferente. No negó ni ignoró la violencia, opresión e injusticia terribles de su época. Pero tampoco buscó represalias ni venganza. En Lucas 4, inmediatamente después de anunciar su ministerio en la sinagoga leyendo Isaías 61, Jesús menciona la historia de Naamán y su sanación milagrosa. 

    Aunque no la menciona, en las acciones de la joven reconocemos algo que apunta al centro mismo del evangelio. Jesús nunca tuvo miedo de confrontar la injusticia; sin embargo, la justicia que predicó permite la transformación del opresor. En los Evangelios, la justicia no es retributiva; no da a los opresores lo que merecen, sino más bien lo que necesitan: verdad, amor, compasión, la posibilidad de transformación y perdón. 

    En la historia de 2 Reyes, la joven se niega a ver la vulnerabilidad de su opresor como una oportunidad para la venganza o represalias. En cambio, su voz encarna la esperanza y la inclusión para alguien que le ha causado un daño increíble. 

    Ella tuvo la valentía de amar, ofreciendo a su agresor lo que no podía obtener por medio de su poder: sanación, libertad y la posibilidad de un nuevo comienzo. Le dio a Naamán no lo que merecía sino lo que necesitaba: la oportunidad de ser transformado. 

    Es un amor que escapa a toda comprensión humana. 


    Hace quinientos años, un nuevo movimiento en la Iglesia de Zúrich y en otras regiones de Europa encontró valentía en su relación con Jesús, en su vida y enseñanzas, en su muerte y resurrección, afirmando que el llamado de Dios a amar al enemigo no es “idealista” ni “ingenuo”. Para ellos, la valentía de amar, que había sido posible debido a la obra del Espíritu Santo, era el único camino hacia una nueva humanidad. Este movimiento llegó a conocerse como anabautismo. Ésta es la tradición cristiana que conmemoramos hoy aquí. Lamentablemente, Zuinglio y otros líderes de la iglesia europea de esa época consideraron el movimiento anabautista como una amenaza y respondieron con violencia y persecución. 


    ¡Por el amor de Dios, hagan algo valiente! 

    Temprano por la mañana del 11 de octubre de 1531, Zuinglio condujo a un grupo de soldados de Zúrich hacia un campo de batalla en las afueras de la ciudad, para enfrentarse al Ejército católico que ponía en peligro su visión de una Zúrich reformada. Casi de inmediato, fueron rebasados. Al intentar retirarse, Zuinglio fue asesinado, junto con al menos quinientos ciudadanos de Zúrich. 

    Hoy, al honrar la memoria de los primeros anabautistas, les invito a que nos preguntemos, como individuos y como iglesias: ¿qué significa, “hacer algo valiente, por el amor de Dios”? 

    Foto: Tras la “perturbación”, César García, secretario general del CMM, predicó sobre La valentía de amar/Preshit Rao

    Following the “disruption,” César García, MWC
general secretary, preaches on The Courage to Love.

    Fortalecidos por el Espíritu Santo, ¿tendremos la valentía para romper los ciclos de violencia? 

    ¿Podremos enfrentar directamente nuestro pasado, no para afirmar y revivir nuestra victimización, sino como una forma de sanar nuestras heridas y las de los demás, y reparar las relaciones rotas? 

    ¿Podremos convertirnos en faros de esperanza en un mundo donde la fragmentación y la división parecen avanzar por todos lados? 

    ¿Podremos imaginar nuestro futuro apuntando hacia una nueva creación, en que la compasión y el amor permitan nuevos comienzos? 

    La valentía de amar —de manera activa, imaginativa y vulnerable— es más que una técnica de resolución de conflictos; es una espiritualidad profundamente arraigada, una estrategia notablemente original. En un mundo donde el mal engendra el mal y la violencia genera más violencia, el amor tiene el poder de romper esas cadenas. El amor tiene el potencial de sanar tanto a quien ama como a quien es amado. 

    Amigas y amigos cristianos, al seguir los pasos de Jesús, tengamos juntos la valentía de amar, ¡por el amor de Dios! 

    César García, secretario general del CMM, oriundo de Colombia, reside en Kitchener, Ontario, Canadá.


    Throughout the day, participants gathered
at the “Schipfe” to view the site where
early Anabaptists were drowned as
punishment for their beliefs.
  • El Congreso Mundial Menonita cumple cien años 

    Algunos tenemos la tendencia a pensar que deberíamos definir la doctrina correcta y, a partir de ahí, pasar a la práctica. Primero la Escritura; después, la experiencia. Pero, en muchos sentidos, tanto en nuestra historia como en nuestra realidad actual, la experiencia nos impulsa a pensar teológicamente para comprender lo que sucede. 

    Consideremos el Concilio de Jerusalén. Ellos se preguntaban: ¿Podemos incluir a los gentiles o no? 

    Aquello no quedaba claro en la Biblia de la época. 

    El hecho de que los gentiles estuvieran recibiendo el Espíritu Santo impulsó a la iglesia a pensar de una manera nueva, sin contradecir el fundamento que tenían. 

    Su experiencia los llevó a plantear la cuestión a partir de la Escritura y a desarrollar nuevas interpretaciones. 

    Como anabautistas, históricamente hemos enfatizado la congregación local y la centralidad de la congregación local como anticipo del reino de Dios. 

    Pero eso no nos ayuda a responder por qué existe la necesidad de una iglesia regional o mundial. 

    En los inicios del CMM, la experiencia impulsó a las iglesias menonitas a pensar en un organismo mundial. 

    ¿Podría señalar alguna similitud entre la actualidad y algunas de las tendencias de hace cien años cuando se inició el CMM? 

    En ese momento, había una pandemia mundial. Muchos países acababan de atravesar la Primera Guerra Mundial. Por supuesto, un impacto financiero lleva a los gobiernos a buscar un chivo expiatorio: ¿a quién vamos a culpar por ello? Esto fue un factor importante en el auge del nacionalismo en Europa. 

    Y luego nuestras iglesias también se vieron afectadas por la Revolución rusa y la subsiguiente persecución violenta en la zona de Ucrania, donde había una gran concentración de nuestras iglesias en esa época. 

    Por consiguiente, con la mezcla de nacionalismo, diferencias culturales, idiomas y el pasado reciente como también más lejano de violencia entre sus países, era complicado para los líderes de la iglesia menonita en 1925 pensar en ser un solo cuerpo. 

    Algunas personas espiritualizan la idea de la unidad y dicen: Vamos a estar unidos en el cielo

    O dicen: Sí, luchamos violentamente unos contra otros, pero somos uno en espíritu

    Tanto entonces como ahora, algunas iglesias ven a otros cristianos con recelo, incluso en una misma familia denominacional. 

    Pero la Biblia no habla de esa manera. 

    La Biblia se refiere a la unidad de una manera muy práctica, visible aun para el mundo. Hay un nivel de unidad que parece una especie de milagro. 

    El fundador del CMM, Christian Neff y otras personas hablaban y escribían sobre la necesidad de un organismo mundial desde algún tiempo antes de 1925, pero no era fácil superar la falta de confianza. 

    Finalmente, Christian Neff encontró una buena excusa para reunir a la gente: celebrar los cuatrocientos años del movimiento anabautista. 

    Y fue en ese contexto que la iglesia de Ucrania envió una carta a la gente en esta primera reunión anabautista mundial, solicitando la conformación de un organismo mundial que coordinara la labor de educación, misión y apoyo a las iglesias que padecen persecución y sufrimiento, entre otras cosas. 

    Cuando los líderes de la iglesia se reunieron, la experiencia de estar juntos les abrió los ojos a la necesidad de una comunión a fin de enfatizar que el centro no es la política ni un Estado nacional, ni siquiera una cultura. La fuente de nuestra identidad es Jesús. 

    El contexto entonces era muy similar al actual después de la pandemia, en medio de un creciente nacionalismo y experiencias de sufrimiento debido a la violencia y la persecución. 

    Es interesante y triste a la vez ver cómo la historia se repite. 

    Lo que ha cambiado es que dicha experiencia nos invita a pensar teológicamente. ¿Quisiéramos ser un solo cuerpo por cuestiones pragmáticas? ¿O porque nuestra interpretación del evangelio lo exige? 

    ¿Cuáles fueron algunos momentos claves en que optamos por ser verdaderamente mundiales? 

    Para ser una familia mundial, necesitamos ciertos niveles de reconciliación y perdón por nuestra historia de divisiones. 

    No estábamos preparados para pensar de esa manera hace ochenta años. 

    Al principio, los líderes querían que solo se celebrara una Asamblea. Y así fue durante los primeros cuarenta o cincuenta años. 

    Pero cada vez más iglesias del Sur global se fueron haciendo miembros. Y las iglesias que están padeciendo sufrimiento ven con mayor claridad la necesidad de una iglesia mundial. No se puede enfrentar la persecución violenta ni las catástrofes naturales si se está solo. 

    Hacia la década de 1970, se empezaron a nombrar presidentes desde el Sur global. Desde el ejecutivo, C. J. Dyck afirmó: Si deseamos que el CMM continue, debería ser más que una reunión mundial. Debería formar parte de la misión a la que los menonitas están llamados en este mundo, un espacio donde clarificar el significado de la fe en sus diversos contextos culturales. 

    Esa visión fue el resultado, entre otras cosas, del aporte de las iglesias del Sur global que pedían más interdependencia. 

    Impulsados por dichas experiencias, hemos avanzado en el pensamiento teológico al entender la iglesia como algo que va más allá de las puertas de mi congregación local. 

    ¿Estamos donde deberíamos estar? 

    Creo que estamos yendo en la dirección correcta, pero se nos plantean desafíos teológicos cuando abordamos el tema de la iglesia mundial. 

    Para muchos de los líderes y pastores de nuestra iglesia mundial, apenas estamos comenzando a construir una comprensión clara de la unidad. 

    Demasiadas veces, nuestra interpretación de la pureza en nuestra tradición anabautista nos ha impulsado a fragmentarnos porque pensamos que para ser santos o puros, es necesario que nos separemos de aquellos que consideramos que no lo son. 

    Nuestra historia de divisiones exige una verdadera reconciliación. Hay heridas históricas que no han sido sanadas y seguimos observando divisiones que ocurren en tiempo real. 

    Los desafíos del racismo y el colonialismo están presentes. Existe la tendencia a que algunos sectores de la iglesia tomen decisiones sin consultar a otros e impongan sus puntos de vista. 

    Se nos presentan desafíos cuando privilegiamos nuestros propios intereses sobre los intereses de los demás; cuando afirmamos que primero debemos proteger nuestro presupuesto antes de considerar a otras iglesias. 

    Además, tenemos ambición y el deseo de controlar, dominar y conquistar a los demás. 

    Los reinos de este mundo nos resultan muy atractivos. Nos encanta la sensación de ser superiores a otros grupos. 

    Pero Dios nos invita a vivir en contraste con los reinos de este mundo. El reino de Dios es una alternativa real. Debemos reconocer que necesitamos el poder del Espíritu Santo. 

    500@Anabaptism at South Korea
    500th Anabaptist Anniversary

    ¿A qué nos referimos con unidad? 

    Debemos comprender que la unidad no implica necesariamente la ausencia de conflicto. La verdadera unidad implica la unión de diferentes fragmentos y formas. 

    Por definición, la unidad implica diversidad, pues si no hay diversidad de opiniones, cultura, teología o experiencias, entonces no hay necesidad de hablar de unidad porque todos creen lo mismo. Lo opuesto a la unidad no es la diversidad, sino la uniformidad. 

    Y como iglesia de paz, sabemos que el problema no es tener conflictos. El problema es cómo manejamos dichos conflictos. 

    Es imposible tener una relación sana sin conflictos. 

    Hoy en día, muchas iglesias del CMM son el resultado de la división de otras iglesias. El paso del tiempo no cambia la realidad de que fue una división interna. 

    En el CMM, procuramos alentar a las iglesias a mantenerse unidas tanto como sea posible y a no dividirse. 

    Sin embargo, a veces la separación es necesaria porque existe un nivel de desacuerdo que ya no es posible resolver debido a la naturaleza de nuestro corazón. Dios nos permite cierto nivel de distancia, y aun así podemos ser parte de la familia mundial si respetamos nuestras diferencias, aunque no compartamos una postura sobre un tema dado. 

    Eso implica la voluntad de sanar las heridas. Debe haber un esfuerzo intencional de ambas partes para sanar el resentimiento y evitar el odio mutuo. 

    Una vez más, es nuestra experiencia la que nos impulsa a pensar teológicamente sobre la unidad. 

    ¿De qué manera el tema La valentía de amar nos guía y determina la manera de pensar sobre este aniversario? 

    Creo que es un tema crucial y relevante en el mundo político actual, en que tanta gente sufre acoso y acosa a los demás. 

    Hay muchas causas, proyectos y demandas justas. Mucha gente dice: “Tenemos derecho a defender nuestra tierra. Tenemos derecho a exigir que estos abusadores dejen de cometer abusos”. 

    Pero, ¿existe la posibilidad de hacer algo de manera distinta a revindicar tus derechos? 

    Creo que Jesús nos invita a andar otro camino. 

    Decir, “quiero dejar de lado mis derechos y amar” requiere una gran valentía. 

    No es pasivo. Implica una respuesta muy intencional, incluso asertiva, que busca el beneficio del otro, incluso el bienestar del agresor. 

    La valentía de amar que nuestros extranjeros descubrieron hace quinientos años no era nueva. Vemos esta invitación proveniente de Dios desde el comienzo de la historia humana. 

    La valentía de amar implica también desmantelar el miedo (1 Juan 4:18). 

    Percibo que muchos líderes actúan por miedo: miedo a ser contaminados, miedo a ser influenciados, miedo al cambio. 

    Cuando hay un amor perfecto, puedes hablar de cualquier tema difícil sin el miedo de que vayas a perder algo. 

    No hay fragmentación, excomunión ni condenación mutua, pero sí respeto por las convicciones firmes. 

    Como dijo Agustín de Hipona, la definición de pecado es ser egocéntrico, por ende el amor es lo opuesto a ello. 

    Cuando amas, te abres a los demás y no hay lugar para el miedo. 

    Parte de la misión del CMM es vincularse con otras comuniones. ¿Cómo le ha formado esta experiencia? 

    Si no te relacionas con otros cristianos, podrías terminar teniendo una idea muy limitada de lo que es la iglesia cristiana. 

    Al ser un organismo mundial como el CMM, tenemos la capacidad de contar con representación propia como una entidad ante otras iglesias. 

    Cuando tienes una identidad clara y encarnas tus valores, las experiencias con otras iglesias podrán ser inmensamente enriquecedoras y transformadoras. Entonces podrás aprender de los demás y también compartir tus valores. 

    Lo cual no significa que sea fácil. Por ejemplo, en la Conferencia de Secretarios de Comuniones Cristianas Mundiales, están representadas un total de 21 entidades mundiales. Y, como se pueden imaginar, la diversidad es enorme. Algunos tienen un pasado complejo de persecución y condenación mutua. Y con otros grupos, ni siquiera existe una relación. 

    Y por supuesto, es muy diferente la interpretación de estas iglesias sobre muchas cosas, tales como el liderazgo y la jerarquía. 

    Así que fue un desafío pensar en cómo representar al CMM. ¿Cómo debería reaccionar ante los desafíos? Hay reuniones en las que los temas son tan controvertidos que las discusiones se vuelven muy fuertes. 

    Pero con el paso del tiempo, comencé a ver cómo los desafíos de una comunión son muy similares a los desafíos de otra comunión. 

    Y luego las relaciones empezaron a profundizarse, lo que me ayudó a valorar a las personas más allá de las doctrinas o las diferencias doctrinales. 

    Recuerdo una reunión en la que había varios secretarios generales compartiendo una comida. 

    Y uno de ellos le dijo a otro: Al conocerte, me di cuenta de que pensaba de manera tan similar a ti que sentí que estaría bien ser parte de tu iglesia, y el otro respondió: Yo también podría ser miembro de tu iglesia. 

    De manera que esas experiencias determinan tu manera de interpretar las Escrituras y te transforman en el camino. 

    Prayer group in Peru
    500 years of Anabaptism celebration in Peru

    ¿Cómo podrá el CMM evolucionar fielmente hasta llegar a ser una comunión fuerte y renovada, que sea resiliente a los desafíos de un futuro quizá muy diferente? 

    Yo diría que si seguimos por ese camino, seremos resilientes: 

    • construir una comunión mundial, 
    • procurar la interdependencia, 
    • tomar decisiones por consenso, 
    • consultarnos mutuamente, 
    • tener un buen liderazgo, 
    • mantener una buena relación entre los miembros de la familia anabautista, 
    • construir buenas relaciones con otras comuniones mundiales,
    • sanar los recuerdos interna y externamente. 

    Pero, por supuesto, también necesitamos la valentía de reconocer nuestras propias debilidades. 

    A veces tenemos un enfoque triunfalista respecto a la misión y la fundación de iglesias, el servicio y desarrollo social, nuestro impacto en los negocios y la construcción de la paz. 

    Sin duda, es bueno reconocer el trabajo que hemos realizado. Pero también es bueno reconocer todas las debilidades que tenemos. 

    Darnos cuenta de cuánto trabajo duplicamos en la fundación de iglesias, cuánto colonialismo ha permeado nuestra labor, cuánto paternalismo todavía hay en nuestras organizaciones misioneras. 

    Cuánto bien hemos hecho con nuestro servicio y, al mismo tiempo, cuántas personas hemos herido en dicho proceso. 

    También es fundamental mirarnos con humildad y ver lo pequeños que somos en comparación con otras comuniones mundiales. 

    Por lo tanto, para ser una iglesia resiliente y llena de esperanza en el futuro, debemos reconocer las áreas en las que necesitamos trabajar. 

    Una comunión fuerte es aquella capaz de hablar de nuestras diferencias con amor. 

    “La valentía de amar”: el amor nos da la apertura de corazón y la valentía para hacer cosas difíciles. 

    César García, menonita colombo-canadiense, Secretario General del Congreso Mundial Menonita desde 2012, conversó con Karla Braun, Editora ejecutiva de Correo, sobre el CMM a sus cien años y La valentía de amar. Esta entrevista ha sido editada para mayor brevedad y claridad. 

    AWFS group photo Netherlands
  • ¡Invitamos a todos a adorar con nosotros! 

    El servicio religioso que marca la culminación del 500.º aniversario del Congreso Mundial Menonita en Zúrich, Suiza, se transmitirá en vivo. El evento tendrá lugar el jueves 29 de mayo de 2025 a las 15:00 UTC

    Liesa Unger, directora de eventos internacionales del CMM, afirma que “pueden sintonizarnos desde cualquier parte del mundo. Animamos a las congregaciones locales a organizar una proyección para que los miembros puedan verlo juntos, celebrando el culto en grupos de dos o tres personas”. 

    El idioma del escenario es el inglés; habrá una transmisión independiente con interpretación al alemán, francés y español. 

    “Este será un servicio religioso que conmemora los inicios del movimiento anabautista y su expresión global contemporánea con un espíritu de ecumenismo, alegría, confesión y esperanza”.   

    John D. Roth, coordinador de eventos de Renovación

    A través de las Escrituras, oraciones, cantos y declaraciones de confesión y reconciliación, el servicio proclamará La Valentía de Amar. 

    Celebrado en la histórica iglesia de Grossmünster, cerca del lugar de los primeros bautismos anabautistas, el servicio también celebrará nuestro camino hacia la reconciliación con otras comuniones eclesiásticas. Participarán representantes de las iglesias católica, luterana y reformada. 

    Sintonícenos en vivo, por la noche en Asia, por la tarde en Europa y por la mañana en toda América. 

    César García, secretario general del CMM, dice “aprovechen esta oportunidad para participar en esta trascendental reunión y profundizar su compromiso con la familia de fe anabautista mundial. Oramos para que esto también los inspire a encontrar nuevas maneras de apoyar al CMM en la construcción de comunidades de fe prósperas a nivel mundial”. 

    En Lancaster, EE. UU., el público podrá asistir a una transmisión en vivo desde la Sala Comunitaria de Vida Menonita. 

    “Invitamos a cualquier organización o iglesia a organizar una reunión para ver la transmisión en vivo”, añade Liesa Unger. 

    La grabación del evento se publicará durante la primera semana de junio para quienes no puedan asistir en persona o verla en directo. 

    watch party Assembly Indonesia
  • Habrá algo para todos los gustos en La Valentía de Amar, un evento de un día para conmemorar el 500 aniversario del anabautismo, el 29 de mayo del 2025. Entre las actividades de este evento gratuito en Zúrich habrá un panel de discusión y un “Camino de Relatos”. 

    Un mundo en llamas 

    “La mayoría de las primeras personas anabautistas abogaban por el testimonio no violento en un contexto de agitación espiritual, política y económica. En la actualidad, también estamos en un mundo en llamas y en medio de conflictos”, dice Simon Rindlisbacher, coordinador de comunicaciones de la ‘Conférence Mennonite Suisse’ (Conferencia Menonita Suiza) y organizador del panel. 

    Un panel de discusión examinará estas cuestiones en el evento de un día del Congreso Mundial Menonita en Zurich, Suiza, el 29 de mayo del 2025. 

    Anabautistas de Myanmar, México, Burkina Faso, Suiza y EUA hablarán de las preguntas de ser una iglesia de paz en la actualidad. ¿Debe ser neutral una iglesia de paz? ¿Cómo vivimos la no violencia? 

    El evento estará moderado por la conocida periodista suiza Judith Wipfler, experta en el diálogo interreligioso, teología, iglesia y judaísmo, religión y música. 

    “Hablar y gritar es cada vez más frecuente, mientras que escuchar y comprender está en declive”, afirma el panelista de Suiza, Hansuli Gerber, puesto que amenazas como el clima y la creación, la renovada amenaza nuclear, la proliferación de armas y, estrechamente relacionado, el dominio corporativo toma como rehén a la política. “Nuestro panel podría ser una prueba de cómo podemos hablar unos con otros desde nuestros diferentes ángulos y perspectivas”. 

    ¿En quién confiar? El Camino de Relatos da vida a la historia 

    Las personas visitantes de Zúrich pueden ponerse en la piel de las personas anabautistas. Para la conmemoración del aniversario del Congreso Mundial Menonita en Zúrich, las personas visitantes pueden unirse a equipos de 2-8 personas para recorrer el Camino de Relatos.  

    “Está concebida como una experiencia narrativa en la que cada persona elige su propia aventura, ambientada en el contexto de Zúrich en medio de las convulsiones de fe que se estaban produciendo en el mundo cristiano en la época de la Reforma”, explica David Stutzman, creador de la actividad. 

    Las personas participantes eligen un personaje – una persona visitante de Zúrich, como ellas mismas – para la actividad de 30-60 minutos. Un folleto les guiará en la toma de decisiones narrativas y en la resolución de la rompecabeza mientras descubren los lugares de Zúrich. 

    “Tenemos dos personajes desarrollados en este momento, cada uno llega como persona extraña a Zúrich por sus propias razones. Una busca a su hermano, quien ha desaparecido atraído por Zúrich y por las reformas que se están llevando a cabo. El otro es un desertor de las Guerras Campesinas que llega a Zúrich en busca de refugio y un nuevo comienzo”, explica David Stutzman. 

    La actividad es atractiva para todas las edades, pero quienes la diseñaron han prestado especial atención a que resulte divertida para personas jóvenes y adultas jóvenes. 

    Las personas participantes deben preguntarse: “¿En quién confiar? ¿Cuánto hay que divulgar? ¿Debo temer al anabautista?”. 

    ¡Los diseñadores del Camino de Relatos, David Stutzman y Chris Blickensdoerfer, son dos ávidos jugadores con experiencia en la dirección de eventos de grupo, como los retiros del juego ‘Power Up!’ (¡Activate!). David Stutzman dirige una pequeña comunidad de la iglesia menonita en Mannheim. Su trabajo está relacionado con ‘Arbeitsgemeinschaft Mennonitischer Gemeinden’ (Grupo de Trabajo de Congregaciones Menonitas) en Alemania y ‘Virginia Mennonite Missions’ (Misiones Menonitas de Virginia). Chris Blickensdoerfer es un trabajador social y antiguo pastor de jóvenes que crea sus propias salas de escape. 

    David Stutzman está entusiasmado por participar en el evento mundial del 500 aniversario. Como estadounidense que vive en Alemania y ha trabajado en una iglesia indonesia en EUA, está agradecido por las conexiones mundiales. “El movimiento que comenzó aquí en Europa es hoy una verdadera comunión mundial”, afirma él. 

    Más información 

    Se publicará más información en el sitio web de Zúrich a medida que esté disponible.  

    El servicio de clausura (a las 17:00 CEST) se transmitirá en vivo para que personas de todo el mundo puedan participar desde casa u organizar una fiesta de observación para verlo. 

    También consulte la sección “Eventos relacionados alrededor del mundo”, donde encontrará eventos especiales con motivo del aniversario en todo el mundo. 


    a street in Zurich
  • En todo el mundo, las personas anabautistas conmemoran los 500 años de nuestro movimiento de seguimiento de Jesús con cultos de adoración, conferencias históricas y reuniones regionales. 

    Para el Congreso Mundial Menonita (CMM), el año del aniversario coincide con la reunión trienal del Concilio General. Además, el 2025 es un doble aniversario: también marca los 100 años del CMM reuniendo a las personas anabautistas en una comunión. 

    Unas 200 personas en el liderazgo de iglesias anabautistas de alrededor del mundo asistirán como delegadas al Concilio General. El tiempo de confraternidad comienza con la celebración del centenario y culmina con un acto abierto a todas las personas, de un día de duración y sin inscripción o pago, en Zúrich (Suiza). 

    Reuniones Trienales  

    El Concilio General se reúne del 26 al 28 de mayo del 2025 en Schwäbisch Gmünd, Alemania. Estas personas delegadas nombradas por membresías nacionales y por las iglesias miembro asociadas del CMM forman el cuerpo que gobierna la vida, el trabajo y la organización del CMM. Las personas delegadas del Concilio General cumplen un mandato de seis años que abarca dos reuniones: una junto a la Asamblea Mundial y otra en el intervalo entre ambas. 

    “Estas reuniones constituyen una pieza importante de nuestra vida como iglesias que siguen juntas la tradición anabautista”, dice César García, secretario general del CMM. 

    Las resoluciones del Concilio General de este año incluyen una propuesta significativa con respecto a la inclusión oficial de las personas delegadas YABs (Jóvenes Anabautistas) que requiere cambios constitucionales. La propuesta de cambio de nombre, considerada por el Concilio General en el 2018, sigue siendo discernida por el Comité Ejecutivo y no llegará al Concilio General en este momento. 

    Las reuniones trienales implican mucha información: compartir recomendaciones para el Concilio General, actualizaciones de las Comisiones y Redes y recopilar información estadística de todas las iglesias. La asistente de procesamiento de datos Ana María Morales Villarreal, persona miembro de las Iglesias Hermanos Menonitas de Colombia, se ha unido temporalmente al equipo administrativo del CMM hasta después del evento. 

    También se reunirán las cuatro Comisiones del CMM, el Grupo de Trabajo de Cuidado de la Creación y las Redes Anabautistas Mundiales, incluyendo las Redes emergentes de educación y paz (GAHEN, GAPSEN, GAPN). 

    Apoya a líderes de todo el mundo. Cada voz es importante a medida que el Concilio General disciernen juntos, utilizando el modelo de consenso. Tu donación ayuda a un líder a participar en el compañerismo, la adoración, el testimonio y a vivir la unidad a través del Congreso Mundial Menonita. 


    Aniversario transmitido en vivo 

    El servicio del 500 aniversario de la Valentía de Amar mostrará música de personas anabautistas de todo el mundo e incluirá una declaración conjunta de reconciliación entre el CMM y la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas. 

    “Nuestro servicio de culto ofrecerá una muestra de la Asamblea. Invitamos a las congregaciones y a las personas particulares a que organicen una fiesta para presenciar este acontecimiento especial”, afirma Liesa Unger, Directora de Eventos Internacionales. “A partir de las 17:00 hora local (CEST), el culto de adoración tendrá lugar por la mañana para las Américas, a primera hora de la tarde en África, y más tarde por la tarde y hasta la noche cuando se dirija al este de Asia”. 

    Zurich church
  • “El amor por Jesucristo nos inspira y nos motiva a superar todo tipo de miedo”, dijo Sushant Nand. La coordinadora del Programa de Intercambio Internacional y oficial de proyectos del Comité Central Menonita, India, habló la celebración del Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial en la ‘Mennonite Church Korba’ (Iglesia Menonita de Korba), una iglesia de la Conferencia General de la Iglesia Menonita de Bhartiya, India. 

    “Las primeras personas anabautistas eran personas llenas del amor de Dios y profundamente enamoradas de Jesús porque habían experimentado su amor y su gracia en lo más profundo de su corazón”, dijo Sushant Nand a la congregación de 110 años de antigüedad. “La Valentía de Amar” es el tema de la celebración anual del culto de adoración mundial, y también del evento del 500 aniversario que tendrá lugar en Zúrich en mayo. 

    La Iglesia de Korba se ha ampliado tres veces para dar cabida a la creciente congregación. Kabra y su esposa Manmati fueron el primer fruto de la misión menonita en Korba. Fueron bautizados el 8 de octubre del 1915, seguidos por otras 15 personas el 9 de diciembre de 1915. En la actualidad, Korba cuenta con 400 familias y más de 8,000 personas miembro. 

    “Las personas que aman a Jesús con todo su corazón, con toda su mente y con toda su alma, ya no se preocupan por las consecuencias internas y externas….. El amor de Jesús nos da la valentía para amar a las personas que son diferentes de nosotros, que están en nuestra contra o que nos persiguen”, afirma Sushant Nand. 

    “Profundicemos en el amor de Cristo para que seamos libres de todo tipo de miedo para compartir el amor de Dios a todos”. 

    The gathered Mennonite congregations in Friesland and Groningen, the Netherlands

    Las congregaciones Doopsgezind (menonitas) de Frisia y Groninga celebraron un gran culto de adoración para conmemorar el Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial. La junta nacional de la iglesia (ADS, por sus siglas en holandés) planea visitar tantas congregaciones como sea posible en el año 2025 para aprender de sus desarrollos y alinear futuras direcciones. 

    BIC Community Church, Zimbabwe

    La ‘BIC Community Church’ (Iglesia de la Comunidad Hermanos en Cristo), Zimbabue, celebró la Santa Comunión el Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial. El Obispo Danisa Ndlovu, representante regional del CMM para África del Sur, predicó el sermón, seguido por una lección de Escuela Dominical del Obispo Sindah Ngulube, representante del Comité Ejecutivo del CMM para África. 

    IMC North Luzon District, the Philippines

    Las congregaciones menonitas del Distrito de Luzón Norte del IMC, Filipinas, se reunieron para celebrar juntas el Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial 2025: ‘Binuangan Mennonite Christian Church’ (Iglesia Cristiana Menonita de Binuangan), Teggep Mennonite Christian Church (Iglesia Cristiana Menonita de Teggep), Tamuyan Mennonite Christian Church (Iglesia Cristiana Menonita de Tamuyan) y Carolotan Mennonite Christian Church (Iglesia Cristiana Menonita de Carolotan). 

    Camino de Santidad Mennonite Church San Pedro Sula Honduras

    La Iglesia Menonita Camino de Santidad, San Pedro Sula, Honduras, conmemoró el 500º aniversario de la Celebración del Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial.  

    Mujeres danzaron en el culto del Domingo de la Fraternidad Mundial Anabautista en ‘Église Évangélique Mennonite de Orodara’ (Iglesia Evangélica Menonita de Odora), Burkina Faso. 

    San Juan Anabaptist Mennonite Church, the Philippines

    Los niños y niñas de la Iglesia Menonita Anabautista de San Juan, Filipinas, mostraron sus corazones en la actividad de la Valentía para Amar del Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial Coraje para Amar. 

    Basna Mennonite Church, India

    Jóvenes de la (Basna Mennonite Church) Iglesia Menonita de Basna, India, presentaron una obra basada en el tema de la “Valentía para Amar” como parte de su Celebración del Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial 2025. 

    IMC North Luzon District, the Philippines

    Sunday service in

    Muestra tu amor por esta valiente familia global con un regalo hoy.

  • Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial

    Parte A: Origen del anabautismo en 1525

    Parte B: Origen de los menonitas anabautistas en su propio país

    Parte C: WCRC y MWC

    Parte D: Liturgia de agradecimiento del CMM

    Este contenido se ofrece para dar un contexto del anabautismo a lo largo de 500 años, tanto en aquel entonces como en la actualidad. Por favor, utilice las partes de este contenido que sean relevante para su propio contexto. Asegúrese de incluir la historia del anabautismo en su propio país y cómo llegó a existir su iglesia hoy en día.

    Parte A: Origen del anabautismo en 1525

    El movimiento anabautista comenzó como parte de un movimiento de renovación dentro de la Iglesia Católica en Europa a principios del siglo XVI. Parte de su inspiración proviene de la tradición católica: el fuerte sentido de disciplina y comunidad que se encuentra en el monaquismo, por ejemplo, la atención al Espíritu Santo que se puede encontrar en el misticismo católico, o el énfasis en seguir a Jesús en la vida diaria en ‘The Imitation of Christ (La imitación de Cristo)’, de Thomas á Kempis. El anabautismo también tiene una deuda con Martín Lutero y el movimiento de la Reforma temprana, particularmente el énfasis de Lutero en la autoridad de las Escrituras y su énfasis en la libertad de la conciencia cristiana. Y el movimiento fue moldeado por el profundo malestar social y económico de su época que estalló en la Guerra de los Campesinos de 1524-1525.

    Las mismas personas anabautistas, sin embargo, habrían dicho que simplemente estaban tratando de ser fieles seguidoras de las enseñanzas de Jesús y el ejemplo de la iglesia primitiva.

    Un momento de 1525 sirve como inicio simbólico del movimiento anabautista: un pequeño grupo de reformadores cristianos reunidos para llevar a cabo un culto de adoración secreto en Zúrich, Suiza. El grupo se sintió frustrado por la vacilación de su líder, Ulrich Zwingli, de promulgar los cambios en los rituales católicos que acordaron exigían las Escrituras, especialmente con respecto a la misa y la práctica del bautismo infantil. En su lectura de las Escrituras, el verdadero bautismo cristiano asumió un compromiso consciente de seguir a Jesús – algo que ningún infante podía hacer. Así que, el 21 de enero de 1525, este pequeño grupo de personas acordó bautizarse unas a otras como gente adulta.

    Aunque pasaría algún tiempo antes de que se enfocara el significado completo del bautismo, las primeras personas anabautistas entendieron que este acto simbolizaba la presencia del Espíritu Santo en el don de la gracia de Dios, un compromiso con una vida de discipulado diario y membresía en una nueva comunidad del pueblo de Dios.

    Nombrados por los oponentes

    Las personas integrantes del movimiento generalmente se referían a sí mismas como “hermanos y hermanas” (Brüder) —o más tarde con el término más descriptivo de “mentalidad-bautismal” (Taufgesinnten). Sus oponentes los etiquetaron como anabautistas (rebautizadores), en parte porque el “rebautismo” era un delito penal en el Sacro Imperio Romano, castigado con la muerte. Al principio, el grupo se resistió al término “anabautista” ya que en sus mentes no estaban rebautizando, sino bautizando correctamente por primera vez. Pero con el tiempo, el nombre persistió.

    Hoy en día, anabautista es un término inglés aceptado para todos los grupos de la Reforma que practicaron el bautismo de creyentes (en lugar de infantes), y las denominaciones descendientes de ellos, como los amish, menonitas y huteritas.

    Desafíos que forjaron la identidad

    Sin embargo, con el tiempo surgió un movimiento coherente. Su identidad se forjó, al menos en parte, a partir de la necesidad de responder a varios desafíos básicos.

    Primero, en respuesta a las acusaciones de herejía por parte de las autoridades religiosas y políticas en la primera mitad del siglo XVI, las personas anabautistas se apresuraron a definirse a sí mismas como cristianas fieles y creyentes en la Biblia.

    En segundo lugar, las voces militantes entre las personas, quienes estaban listas a imponer el cambio social y religioso con violencia obligaron a la gente anabautistas a aclarar su identidad como gente cristiana pacífica no violentos y respetuosa de la ley, cuya única arma era el amor.

    Y finalmente, frente a aquellas personas disidentes espiritualistas que favorecían una experiencia religiosa interna evitando las disputas teológicas y pasando desapercibidas por las autoridades, la gente anabautista se vio en la obligación de defender la naturaleza pública y visible de la iglesia.

    Tres corrientes surgen

    A pesar de la diversidad de teología y práctica evidente en la primera generación de anabautistas, en la década de 1540 habían surgido tres grupos coherentes: Los Hermanos Suizos en los territorios de habla alemana; los Huteritas de Moravia; y los Menonitas de los Países Bajos y el norte de Alemania quienes se organizaron en torno al liderazgo de Menno Simons. Aunque estos grupos diferían de manera importante, no obstante, se reconocían entre sí como miembros de la misma tradición religiosa, por lo que sus desacuerdos internos a menudo tomaban la forma de una disputa familiar.

    Extraído de ‘Stories: How Mennonites Came to Be’, por John D. Roth, Herald Press, 2006. Adaptado y utilizado con autorización.

    Durante los siguientes 500 años, el anabautismo se extendió a muchos países diferentes alrededor del mundo, cada uno con su propia historia de origen. El Congreso Mundial Menonita comenzó hace 100 años para reunir a las muchas iglesias de las diferentes corrientes del anabautismo para la fraternizar, adorar, testificar y servir.

    Lectura adicional: Anabaptist World: 2 de marzo 2015, “The Birth of Anabaptism” (en inglés) (El nacimiento del anabautismo)


    Parte B: Origen de los menonitas anabautistas en su propio país

    Asegúrese de hablar sobre la historia de su propia congregación y el desarrollo de las iglesias menonitas anabautistas en su propio país.

    En la Enciclopedia Mundial Anabautista Menonita en línea (GAMEO) hay resúmenes útiles. Busque el nombre de un país para obtener información sobre los movimientos anabautistas en la región.

    La wiki anabautista también ofrece artículos sobre los anabautistas en muchos países.


    Parte C: WCRC y MWC

    Una declaración compartida de confesión, gratitud y compromiso

    El Congreso Mundial Menonita designó a varias personas para participar en un diálogo ecuménico permanente con la Comunión Mundial de Iglesias Reformadas (WCRC). Esta es una de las iglesias estatales que en el siglo XVI persiguió a los primeros anabautistas en Europa.

    Juntos, este grupo de teólogos de WRCR y MWC preparó una declaración compartida para su presentación pública el 29 de mayo de 2025 en Zúrich, Suiza.

    El título de la declaración es Restoring Our Family to Wholeness: Seeking a Common Witness” (Restaurando la plenitud de nuestra familia: en busca de un testimonio común). La declaración incluye secciones sobre dar gracias y celebrar nuestra confesión común de Jesús como Señor; confesión y lamento; y termina con el llamado de Dios a la unidad y la paz. La declaración se encuentra en el sitio web del CMM:

    Continuando con la WCRC, en lugar de “resolver” los puntos teológicos históricos de diferencia que nos han dividido, el CMM pone énfasis en los lugares del mundo donde las iglesias menonitas y reformadas están colaborando en nuestro testimonio.


    Parte D: Liturgia de agradecimiento del CMM

    Basada en el Salmo 136

    Celebramos la fidelidad de Dios y su mensaje de salvación por medio de Jesucristo, tal como se ha transmitido de generación en generación durante más de 500 años, y que ha llegado hasta nosotros hoy.

    Den gracias al SEÑOR porque él es bueno,       porque su amor es eterno*.

    Den gracias al Dios de dioses,       porque su amor es eterno.

    Den gracias al Señor de señores,       porque su amor es eterno.

    Al que hizo los cielos y la tierra con sabiduría, Al que edificó la iglesia como el Cuerpo de Cristo aquí en la tierra, Al que con el transcurso del tiempo renueva la iglesia, Den gracias al SEÑOR porque él es bueno,       porque su amor es eterno.

    Al que a través del testimonio del Espíritu Santo hace 500 años, Inspiró a los reformadores radicales con una visión renovada para seguir a Jesús, Quien trajo una comprensión más profunda del llamado de Dios en nuestras vidas, Fundamentado en Jesús, la Biblia, el discernimiento comunitario, el discipulado y el amor a los enemigos, Den gracias al SEÑOR porque él es bueno,       porque su amor es eterno.

    Quien a través del Espíritu llamó a testigos para difundir las Buenas Nuevas en todo el mundo, Quien inspiró a las nuevas congregaciones para dar testimonio del amor de Dios por todas las culturas y todas las tierras, Den gracias al SEÑOR porque él es bueno, porque su amor es eterno.

    Quien es Señor de nuestra propia [nombre de la iglesia] en [nombre de país], Quien nutre y fortalece a nuestra congregación para vivir el llamado de Dios en nuestras vidas, Fundamentado en Jesús, la Biblia, el discernimiento comunitario, el discipulado y el amor a los enemigos. Den gracias al SEÑOR porque él es bueno, porque su amor es eterno*.

    Quien obra por medio de la familia mundial de fe que llamamos Congreso Mundial Menonita, Que está dando crecimiento a una iglesia que trasciende las fronteras de la raza, la etnia y el idioma, Quien nos llama a unirnos como comunión (koinonia) para seguir a Jesús, vivir la unidad y construir la paz. Den gracias al Señor de señores, porque su amor es eterno.

    Den gracias al SEÑOR porque él es bueno, Den gracias al Dios de dioses, Den gracias al Señor de señores, porque su amor es eterno.

    —- 

    * Durante toda la lectura antifonal, el estribillo “porque su amor es eterno” podría reemplazarse con “Porque el amor de Dios es para siempre”.

  • Domingo de la Fraternidad Anabautista Mundial

    Lucas 6:32 dice: Si ustedes aman solamente a quienes los aman a ustedes, ¿qué hacen de extraordinario?

    Los seres humanos tienen la tendencia a amar a quienes los aman. Es fácil amar a quienes nos aman o son buenos con nosotros. Pero Jesús nos enseña a amar a quienes no nos aman.

    Necesitamos tener el coraje de amar y aceptar a todo tipo de personas que nos rodean. Y esto sólo es posible cuando tenemos a Jesús en nuestro corazón.

    Aquí tienes una actividad que se puede realizar con los niños para pensar en la valentía de amar.

    Materiales necesarios:

    • Diferentes pliegos de colores de papel, incluidos rojo y blanco.
    • Lápiz o marcador
    • Tijeras
    • Pegante

    Pasos:

    1. Dibuja y corta un gran corazón en un pliego de papel de color rojo.
    2. Dibuja y corta una cruz con papel de color blanco. La cruz debe caber dentro del corazón.
    3. Corta pequeños círculos de papel de otros colores. Dibuja en ellos caras con diferentes expresiones. (Estos círculos representan diferentes tipos de personas que tenemos a nuestro alrededor: algunas están tristes, otras felices y otras enojadas).
    4. Pega la cruz dentro del corazón. (Representa la presencia de Jesús en nuestros corazones.)
    5. 5. Pega las diferentes caras dentro del corazón.

    Esta imagen del corazón nos ayudará a comprender que podemos amar y aceptar diferentes tipos de personas en nuestras vidas cuando tenemos el amor de Jesús dentro de nosotros.

    —contribuido por Amita Siddh, Iglesia Menonita Rajnandgaon, Iglesia Menonita de la India

  • En el 2025, el movimiento anabautista mundial conmemorará 500 años de existencia. El Congreso Mundial Menonita invita a todos a un importante evento que tendrá lugar el Día de la Ascensión, el 29 de mayo del 2025, en Zúrich, Suiza.

    Incluso a medida que recordamos un pasado lejano, el enfoque de la conmemoración está en la realidad actual del movimiento anabautista.

    • ¿Quiénes somos hoy como comunión mundial?
    • ¿Qué es importante para nosotros?
    • ¿A qué estamos comprometidos en este mundo?

    Cuando miramos atrás, a los 500 años de historia de nuestro movimiento, queremos compartir lo que somos y lo que tenemos, no sólo con otras iglesias. El compromiso –en este mundo– con la paz, la reconciliación, la unidad, por medio de las cuales podemos vislumbrar el reino de paz de Cristo que está por venir: estos son elementos clave de cómo los anabautistas entendemos el discipulado hoy en día.

    Hemos reunido estos compromisos bajo el lema “La valentía de amar”.

    Hace falta valentía para defender la reconciliación en una sociedad desgarrada por la polarización.

    Hace falta valentía para situarse entre las líneas divisorias, para escuchar y tratar de comprender lo que motiva a los demás.

    Hace falta valentía para centrarse en el amor en lugar de en la influencia, el poder y el control.

    En un mundo en el que las personas exigen a viva voz tomar una postura y diferenciarse de aquellos con quienes no quieren ser identificados, hace falta valentía para apostar por el amor. Un amor que esté dispuesto a dar la vida por los enemigos, tal como Cristo dio la suya por los enemigos.

    El amor va más allá de la no violencia: es un compromiso valiente de encarnar el amor de Dios en este mundo.

    Por ejemplo, los hermanos y hermanas de Etiopía que, en medio de la violencia de una guerra civil, hacen público el hecho de que no portan armas.

    Las personas que buscan seguir a Cristo en medio de los conflictos en Myanmar o Ucrania, a menudo entran en los espacios entre líneas mientras buscan caminos más allá de la confrontación violenta.

    • ¿Qué pasa con nosotros hoy aquí?
    • ¿En dónde se necesita nuestra valiente acción en amor hoy?
    • ¿Cómo podemos interponernos de manera útil en la vanguardia? ¿Cómo podemos dar testimonio de un Dios que se entrega para reconciliar al mundo?

    —Jürg Bräker es secretario general de la Conferencia Menonita Suiza, representante del Comité Ejecutivo del CMM para Europa y miembro del comité organizador del evento. 


    Una versión de este artículo se publicó por primera vez en el boletín electrónico mensual de Konferenz der Mennoniten der Schweiz / Conférence Mennonite Suisse.
  • «Los aniversarios son un momento para detenernos y reflexionar: en ellos recordamos de dónde venimos, consideramos quiénes somos hoy y anticipamos dónde Dios nos está llamando a estar», declara César García, secretario general del CMM.

    “La valentía de amar” es el tema del aniversario del Congreso Mundial Menonita en 2025.

    Para obtener más información sobre el evento de conmemoración del CMM que tendrá un día de duración en Suiza o información sobre otros eventos de conmemoración a lo largo del año, visite mwc-cmm.org/anabaptism500.

    Las actividades del día incluirán presentaciones corales, un panel de discusión, recorridos históricos a pie por el centro histórico de Zúrich, talleres y un juego interactivo para “encontrar la iglesia secreta”. La jornada se cerrará con un culto con invitados internacionales y ecuménicos en la iglesia de Grossmünster.

    Puede viajar a Zúrich para participar durante el día como parte de un tour o por su propia cuenta. El culto de clausura se transmitirá en vivo en inglés, francés, español y alemán.

    A lo largo del año, se realizarán eventos alrededor del mundo para celebrar y reflexionar sobre el movimiento anabautista y en lo que se ha convertido en la actualidad.

    “Nos inspira la manera en que La valentía de amar nos mueve a actuar como Cristo hoy, tanto como hace 500 años. Las iglesias nacionales o las congregaciones locales podrían utilizar este tema para sus propios eventos en el 2025”, expresa Liesa Unger, directora de eventos internacionales del CMM.

    Anabaptism at 500 website - select 'Español'

    Una colección de encuentros

    Antes del evento, el Concilio General del Congreso Mundial Menonita (conformado por líderes de cada iglesia miembro nacional de todo el mundo) se reunirá para tomar decisiones y aprender. Después del evento, los jóvenes se reunirán para una Cumbre Mundial de la Juventud, la primera vez que dicho evento se lleva a cabo fuera de un año de Asamblea.

    Dos aniversarios

    El 2025 marca dos aniversarios para el CMM. Se cumplen 500 años desde que Conrad Grebel, Georg Blaurock y Felix Manz realizaron el valiente acto de «rebautizarse» unos a otros en Zúrich, Suiza, como expresión de su forma de entender la fe. Este acto se toma como el inicio simbólico del movimiento anabautista, que ha crecido hasta contar con unos 2.13 millones de creyentes en más de 80 países de alrededor del mundo.

    También se cumplen 100 años desde que comenzó el Congreso Mundial Menonita. Su primer evento fue una conferencia: una reunión de líderes de iglesias Menonitas de Alemania, Francia, Países Bajos, Suiza y Estados Unidos. Estos líderes se preguntaron: “¿Cómo podemos mejorar la vida espiritual de nuestras congregaciones?”

    Descargar recursos

    Haga clic aquí para ver los afiches del evento 

  • Las personas cristianas anabautistas de un vecindario de Nairobi de 137,000 habitantes, predominantemente musulmán, practican a diario ‘The Courage to Love’ (La Valentía de Amar). “Nuestra modesta congregación anabautista se enfrenta a dificultades de aceptación, evangelización y fusión cultural”, dice George Ochieng, director del ‘Eastleigh Fellowship Centre (EFC) Mennonite Church Choir’ (Coro de la Iglesia Menonita del Centro de la Fraternidad de Eastleigh, EFC por sus siglas en inglés). “Aun así, hemos sido llamados a exhibir valentía a través del amor en este ambiente”.

    El coro del ‘EFC’ de una iglesia menonita de Nairobi es uno de los cinco conjuntos musicales seleccionados para representar la música en las iglesias anabautistas de alrededor del mundo en el evento del 500 aniversario en Zúrich 2025. “Nuestro coro espera ansiosamente aprovechar nuestros dones musicales para compartir el amor de Cristo a través de una mezcla de diversos elementos culturales”, dice él.

    En la jornada del 29 de mayo del 2025, cada coro actuará dos veces: un concierto en el interior de la ‘Predigerkirche’ o la ‘Friedenskirche’ y otro al aire libre en la ‘Zwingli Platz’ (Plaza Zwingli), frente al ‘Grossmünster’, sin ninguna amplificación. Los coros también participarán en el culto final en la Catedral de Grossmünster, que se retransmitirá en directo. 

    El coro del ‘EFC’ llama a su estilo afrofusión “porque invoca varias culturas musicales procedentes de distintos países de África”, dice George Ochieng. Las propias personas que integran el coro representan diferentes culturas de todo Kenia. Viajan por toda Kenia para actuar en iglesias y festivales de música.

    “Elevamos sinceras oraciones para que nuestro conjunto musical obtenga las visas necesarias para el 2025”, dice George Ochieng. Solo 7 de sus 36 integrantes recibieron visa para viajar a EE.UU. y actuar en la Asamblea del CMM en Pensilvania en el 2015. “El privilegio [de asistir a un evento del CMM] nos brinda la oportunidad de aprender mucho más sobre la comunidad de creyentes anabautistas”, dice George Ochieng.  

    Los cinco conjuntos musicales actuarán en una congregación local el domingo, 1 de junio del 2025. “La música trasciende las barreras, sirviendo como testamento del Reino de Dios y fomentando la unidad por encima de líneas raciales, lingüísticas y nacionales”, afirma George Ochieng. “Oramos por la paz en el mundo en un momento en que el mundo más lo necesita desde la Segunda Guerra Mundial.”


    Otros conjuntos musicales:

    América Latina: 

    Banda Ágape de Asunción, Paraguay. Estilos musicales variados que mezclan pop, rock, latino, funk y folk. Siete músicos y un técnico de sonido. Varios son personas miembro de la Iglesia Hermanos Menonitas Concordia y graduados del CEMTA (Centro Evangélico Menonita de Teología Asunción).

    “El nombre de nuestra banda es el tipo de amor descrito en 1 Corintios 13. Muchas de nuestras canciones hablan de este amor de entrega de Dios. Muchas de nuestras canciones hablan de este amor de Dios que se entrega. Sabemos que el verdadero amor es para quienes tienen valentía. Sólo podemos sentirnos realizados cuando la relación con nuestro Dios define nuestros valores y nuestra identidad”, dice Carlos Arce Penner, líder de la banda.

    A los 22 años, dirigió una banda que lideró el culto en la Cumbre Mundial de la Juventud del 2009 en Paraguay y tocó con diferentes delegaciones durante la Asamblea. 

    América del Norte

    Los ‘Eastern Mennonite University Chamber Singers’ (Cantantes de Cámara de la Universidad Menonita del Este) de Harrisonburg, Virginia, EE.UU. Coro de voces mixtas, principalmente a capella, que canta sobre todo música sacra de diversos estilos, épocas y culturas. Las 20 personas integrantes audicionadas son estudiantes de diferentes carreras.

    “Gran parte de nuestra música también se centra en temas importantes para el anabautismo, como la paz, la justicia, el discipulado y, el cuidado de la creación y de todas las personas”, dice el director Benjamin Bergey. “Una de las formas más fundamentales de ser agentes de paz en este mundo es amando. Sentimos mucho entusiasmo de conectarnos con este maravilloso y oportuno tema – y con los otros grupos musicales de todo el mundo.”

    Benjamin Bergey fue el coordinador musical de la Asamblea 2022 del CMM en Indonesia. El coro de la ‘EMU’ (por sus siglas en inglés) cantó en la Asamblea del CMM de 1967 en Ámsterdam, Países Bajos.

    ‘Eastern Mennonite University Chamber Singers’ (Cantantes de Cámara de la Universidad Menonita del Este)

    Europa

    ‘Songs of Peace’ (Canciones de Paz) comenzó como un nuevo proyecto musical en el Bildungszentrum Bienenberg de Liestal, Suiza. En la actualidad, es una asociación independiente dirigida por el matrimonio de Dennis Thielmann y de Karin Franz junto con músicos de congregaciones menonitas locales. 

    “Valoramos los sonidos naturales y reducidos combinados con elementos electrónicos en nuestra música (la mayoría cantada en alemán)”, dice Dennis Thielmann. Entre las influencias musicales figuran la música del mundo, las tradiciones monásticas y la terapia del sonido. “También intentamos utilizar la forma musical y la puesta en escena para plasmar valores del reino de Dios como la sencillez, la gratitud, la autenticidad, la inclusión, la paciencia, la sostenibilidad y la conciencia global.”

    Dennis Thielmann participó en el equipo de música de la Asamblea del CMM en Paraguay en el 2009. “Al compartir nuestra música con las personas invitadas del CMM en Zurich, llamaremos a nuestros oyentes a disminuir la velocidad y buscar la resonancia de la presencia de Dios en todo lo que nos rodea”, él dice.

    ‘Songs of Peace’ (Canciones de Paz)

    Asia

    La ‘TIARA, The Indonesian Anabaptist peRforming Art’ (El Arte Escénico Anabautista Indonesio) es una banda de 8 personas miembro de la iglesia GKMI Anugerah de Yakarta, Indonesia. Las personas integrantes, que cantan, tocan instrumentos tradicionales (angklung) y bailan, proceden de varias localidades de Java Central y participan regularmente en la música de culto de sus congregaciones locales.

    “Queremos compartir el amor de Dios y sus poderosas obras en nuestro país a través de actuaciones que contengan belleza, diversidad y sabiduría”, dice el coordinador de la banda Eliezer Pranawa (Prana) Setiawan. “Esperamos que cada pieza que presentemos en Zúrich 2025 pueda ser un regalo de amor para las iglesias y para la comunidad anabautista mundial”.

    “Fue un privilegio participar en la Asamblea del CMM en Indonesia en el 2022”, dice. “En ese fascinante evento, nos dimos cuenta de que tenemos familia y comunidad mundial a través de la iglesia anabautista”.

    ‘TIARA, The Indonesian Anabaptist peRforming Art’