Vida en el Espíritu: Aprender. Servir. Adorar.
“Qué oportunidad tan única para preguntar, observar y escuchar más de lo que hablamos”, dice Christen Kong, delegada de la Iglesia Menonita de Canadá para la Cumbre Mundial de la Juventud (GYS, por sus siglas en inglés), del 1 al 4 de julio del 2022 en Salatiga, Indonesia.
“Espero conocer a otras personas jóvenes menonitas y documentar las maneras en las cuales viven su fe. No solemos tener la oportunidad de escuchar lo que significa ser menonita para quienes están lejos de nosotros. ¡También estoy tengo entusiasmo de adorar en muchos idiomas diferentes!” ella dice.
Desde su inicio en la Asamblea de Zimbabue en el 2003, la Cumbre Mundial de la Juventud (GYS) ha brindado a las personas jóvenes anabautista-menonitas de todo el mundo la oportunidad de reunirse, representar a sus diversas comunidades locales y conectarse como una sola familia: un solo cuerpo, la Iglesia.
Cada persona delegada de la ‘GYS’ representa a su iglesia nacional. Su tarea es realizar encuestas entre las personas jóvenes de su iglesia nacional. Las personas delegadas preguntan qué desafíos enfrentan, qué soluciones sugieren a los problemas y que involucramiento tienen en su iglesia. También hacen preguntas relacionadas con el tema: Vida en el Espíritu: Aprender. Servir. Adorar.
La Iglesia Menonita de Canadá (MC, por sus siglas en inglés) seleccionó a cinco personas representantes: una de cada iglesia regional de la Iglesia Menonita de Canadá. Christen Kong, representante de la ‘MC’ del Este de Canadá, se desempeña como delegada nacional oficial.
Las cinco personas representantes de la ‘MC’ cuentan con el apoyo de una persona mentora que ha asistido previamente a la ‘GYS’. Dicha persona mentora ayuda a recopilar información, organizar visitas a la iglesia y guía a la persona delegada a prepararse emocionalmente para las alegrías y dificultades que pueden surgir al compartir con un grupo grande y diverso de personas jóvenes delegadas. El equipo trabajó arduamente para desarrollar una encuesta que recopilara diferentes voces.
“Es necesario escuchar las voces de las personas jóvenes preguntándoles directamente”, dice Christen Kong.
“Muchas citas de las que recolectamos de las personas jóvenes expresaron que no se les preguntó ni se les escuchó – a pesar de que estaban en posiciones de liderazgo – sobre las decisiones que se tomaron en la iglesia. Hay una discusión más amplia sobre cómo la iglesia menonita puede fomentar enfoques más efectivos para el diálogo intergeneracional al descubrir formas de guiar e inspirar a las personas jóvenes”.
Después de llegar a Indonesia, las personas participantes de la ‘GYS’ aprenderán enseñando, interactuando, adorando y jugando junto a personas jóvenes de diferentes culturas y contextos. Los días incluirán adoración, talleres, juegos, música de diferentes países y tiempo de hermandad con personas jóvenes de todo el mundo.
“A través de la ‘GYS’ uno tiene la oportunidad de realmente abrir los ojos, y ser más consciente de que detrás de todos esos países que aparecen en el mapa, hay hermanos y hermanas en la fe que tienen una gran diversidad de contextos sociales, económicos y políticos. Dichos contextos representan los desafíos propios de cada región, a los que Dios responde de manera singular”, expresa Karina Bogarín, miembro de la Iglesia Maranata de los Hermanos Menonitas, Paraguay, y asistente de la ‘GYS’ en el 2015.
Para obtener más información sobre la ‘GYS’, mwc-cmm.org/yabs. Siga a las personas YABs en Instagram y Facebook para ver videos, transmisiones en vivo y actualizaciones durante Indonesia 2022
¿Sabía usted? La inscripción le da un pase de acceso total a la Asamblea.
No solo a…
- Los oradores plenarios trasmitidos a ustedes desde 5 sitios diferentes en Indonesia.
- El coro internacional cantando las antiguas canciones favoritas y los nuevos éxitos.
- Los talleres con académicos y practicantes de la familia menonita-anabautista.
Sino también
- Actividades a través de video del programa para niños adolescentes/jóvenes.
- Una sala de chat para grupos pequeños, para encontrar nuevos y viejos amigos de todo el mundo.
- Y la oportunidad de orar con hermanos y hermanas en lugares de desafío, sufrimiento y/o alegría.