¡Señor, ten piedad! Dios de amor, muestra tu gracia a los niños de Myanmar afectados por la guerra. Ministra a sus corazones y espíritus para que el frío del miedo y la raíz de amargura no se apoderen de ellos y envenene su futuro.
Jes˙s, trae conversión y arrepentimiento a los líderes y soldados de la guerra civil en Myanmar. Que vean el sufrimiento que est·n infligiendo y comiencen a reevaluar sus metas y estrategias.
Espíritu de Dios, camina junto a los miembros de la iglesia que est·n desplazados y sufren, y los pastores que los est·n ministrando. Bríndales seguridad de tu constancia.
°Amén!
Foto suministrada